Pecchiar: “Pensaba dejar de jugar”
De pensar en dejar el fútbol a firmar un contrato profesional, la vida deportiva de Alessandro Pecchiar dio un giro inesperado. El pibe surgido en las categorías formativas de Independiente no tenía mayores expectativas a fines de 2016, hasta que en su camino aparecieron el representante Heber Marchioni y el director técnico Mauricio Tapia. Entonces, le surgió la posibilidad de jugar en Antigua de Guatemala, campeón de ese país el año pasado, que es dirigido por el entrenador tandilense.
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Tras su primeros meses en Centroamérica, Pecchiar descansa en Tandil y este Diario lo entrevistó para conocer más de su actualidad.
-¿Cómo surgió la posibilidad de jugar en Guatemala?
-Yo estaba jugando en quinta división de Santamarina y algún partido en la primera local. Heber pidió permiso para que hiciera pretemporada con la Uni, que iba a jugar el Federal C, para que me mantuviera con ritmo, ante la posibilidad de que surgiera algo. Lo fue hablando con Tapia, él me vio en un entrenamiento cuando hicimos fútbol y aprobó llevarme.
-¿Qué encontraste allá?
-Apenas había estado un tiempo en Defensa y Justicia, era mi única experiencia fuera de Tandil. Así que imaginate, ir afuera del país era un salto grande. Encontré muy buena gente, sobre todo eso. Viví un tiempo en un hotel y después en una casa con un compañero.
-¿Fuiste directamente a entrenar con el plantel profesional?
-Sí. La habilitación me llegó un día de partido y ahí fui al banco por primera vez. Después me tocó bastante en Reserva, para ir adaptándome a todo. De a poco, fui mejorando y tuve algunos minutos en Primera. Creo que fui creciendo, además de que me metí en el grupo, eso es importante.
-¿El nivel futbolístico cómo es?
-En Reserva, el máximo de edad es de 20 años. Hay chicos que juegan muy bien, hay varios que suben al plantel mayor y están en la selección de su categoría. Y en Primera es un torneo muy competitivo, con doce equipos y muy parejo. Nosotros quedamos anteúltimos, pero a seis puntos del primero. Si hubiéramos ganado en la última fecha nos clasificábamos entre los seis que después iban a ir por el título, pero perdimos y quedamos afuera. La semana que viene arrancaremos otra pretemporada y se viene el otro torneo.
-¿Jugaste de delantero?
-Sí, de delantero por derecha. Tapia me da muchas indicaciones, que haga diagonales. Es un obsesivo con la táctica, varias veces ha cambiado la formación de acuerdo al rival. Una vez nos tocó entrenar a las 6 de la mañana, para acostumbrarnos al rocío porque íbamos a jugar en cancha sintética.
-¿Cómo se dio lo de jugar el año pasado en Santamarina?
-Fui a préstamo en 2016, por gestión de mi hermano. Terminó el torneo de ese año y me veía muy lejos del plantel de la B Nacional. Así que pensaba dejar de jugar, porque con 18 años iba a necesitar trabajar. Ahí apareció Heber. Mi familia y él me están cumpliendo un sueño, porque gracias a ellos hoy puedo estar jugando al fútbol.
-¿Te imaginás jugando en un nivel superior?
-Valoro la posibilidad que estoy teniendo, porque hay seis o siete delanteros en el plantel y yo soy de los más chicos.
Cuando salí del país ya me veía jugando en cualquier lado. Quiero conocer más cosas y aprender, esos son mis objetivos.
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