Arranca Microteatro Tandil, con obras de 15 minutos, en espacios pequeños y para poco público
Desde el próximo fin de semana la ciudad contará con una nueva propuesta escénica, impulsada por La Ñata Roja. Microteatro Tandil presenta una forma distinta de hacer teatro, que responde a los mandatos actuales de la cultura de lo inmediato y la necesidad de romper los protocolos de los espectadores. Se trata de obras de 15 minutos, en espacios de 15 metros cuadrados, para no más de 15 espectadores, que se representan en simultáneo y en continuado.
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Microteatro Tandil estrenará el próximo domingo, desde las 19, en 14 de Julio 467, aunque ya se programó otra función para el 17 de junio debido a la demanda de entradas.
El año pasado, esta propuesta llegó a la Argentina, al Microteatro de Buenos Aires ubicado en Palermo. A partir de entonces, Matías Acuipil y Nicolás Arizcuren se interesaron por el género, coincidieron y unieron sus energías para ofrecerla en Tandil.
“Nos complementamos porque Nicolás escribe, lo hace muy bien, y a mí me gusta dirigir y además, a través de La Ñata Roja tenemos armada la escuela de actores. Entonces, unificamos ahí fuerzas”, contó Acuipil, a cargo de la dirección.
En tanto, Nicolás Aruzcuren, como dramaturgo, adelantó que “son tres obras, naturalmente de entre 12 y 15 minutos aproximadamente, y lo que tiene el formato de 15 minutos es que es muy ágil, donde el público generalmente está parado. Ya predispone de una manera completamente distinta para ver el teatro a lo que viene acostumbrado en el teatro tradicional, de la caja oscura, cerrada. Acá, de pronto, es otro formato, mucho más flexible”.
Por otro lado, describió que las obras “van rotando y hay tantas funciones durante toda la noche que le da una dinámica distinta. La gente está esperando, pasa, ve una obra. Entonces, es otra cosa, otra forma de verlo.
Nosotros lo planteamos desde el lugar de la comedia porque entendemos que es lo más fresco, lo más divertido para poder verlo de esa manera”.
Por otro lado, señaló que la iniciativa “tiene los componentes del teatro que a nosotros nos gusta, esas pinceladas dramáticas o ácidas. Un poco la propuesta viene por ahí. Son tres obras de 15 minutos que van a ir rotando en un lapso de tres horas. Pueden ir a cualquiera de las diferentes funciones de las tres obras. Va a haber abonos para las tres obras, por dos y si no por una”.
El objetivo de Microteatro Tandil es atraer a un público que no asiste al teatro tradicional por el costo de las entradas o porque no está acostumbrado o por todos aquellos factores que lo distancian de los escenarios.
Qué ver
Las tres piezas están escritas por Nicolás Arizcuren, a partir de improvisaciones que se realizaron en el taller de laboratorio con actores que se desarrolló durante tres meses. En ese espacio surgieron ideas, donde el autor descubrió personajes interesantes y escribió historias para ellos.
“La construcción es ágil porque se escribe la obra en función de los actores y de los lugares, que ya los conocíamos”, relató Acuipil.
En relación al tiempo, Arizcuren resaltó que “no son sketchs. Es una obra que tiene un comienzo, que cuenta una historia, tiene un hilo. No son monólogos tampoco; no son escenas, no son performances. Son microobras. Es una historia que se cuenta al igual que una obra de teatro, pero en 15 minutos. Todo es mucho más intenso y contundente”.
Desde su experiencia como espectador, Acuipil transmitió que “te vas con la sensación de que viste una obra, te llena de alguna manera” y analizó que “al estar trabajados los personajes, la historia, el conflicto, al igual que en una obra, no hay prácticamente diferencia. Sí sabés que no pasó una hora, pero igual perdés la noción del tiempo porque la historia está tal cual uno la conoce de épocas ancestrales: introducción, nudo y desenlace”.
Una marca
El proyecto se lanza con miras de continuidad, por eso instalaron la marca Microteatro Tandil. Además, a mediados de junio dictarán un nuevo taller, donde se van a generar más obras.
“Habitualmente el microteatro trabaja por temática y creemos que cuando este motor empiece a circular, va a ser mucho más rápido. Lo ideal sería llegar por mes a propuestas con temáticas nuevas”, adelantó Nicolás Arizcuren.
Por último, expresó que en todas las ciudades “el microteatro empieza a generar en el mundo artístico teatral una especie de semillero, en el sentido de muchos actores que quieren probar la experiencia”.
Importado
de Madrid
El microteatro nació en noviembre de 2009 en la ciudad de Madrid, cuando durante dos semanas, casi 50 artistas entre directores, autores y actores presentaron un proyecto teatral en un antiguo prostíbulo. Miguel Alcantud fue el autor de la idea y coordinador del proyecto.
En las 13 habitaciones del prostíbulo se alojaron 13 grupos de teatro con la consigna de crear una obra teatral de 10 o 15 minutos para un público que rondara las 10 o 15 personas por sala sobre un tema común: la prostitución.
Estas obras se representaban tantas veces como público hubiera durante tres o cuatro horas. El experimento fue un éxito. Colas de más de 200 personas se formaban horas antes de comenzar las funciones y, lamentablemente, se quedó más gente afuera de la que pudo entrar.
El impacto de dicho acontecimiento, que alcanzó una gran difusión mediática y aceptación del público, animó a buena parte de los participantes y a algunos nuevos miembros a abrir de manera permanente un espacio que, como se pudo comprobar, era reclamado por el público.
Así nació microteatro, un nuevo concepto de formato teatral: microobras de 15 minutos, representadas en espacios pequeños para menos de 15 espectadores por pase y varias funciones al día.
Tomando esta experiencia, Nicolas Arizcuren en la dramaturgia y Matias Acuipil en la dirección, luego de tres meses de trabajo con siete actores en un laboratorio/taller generaron tres microobras y crearon Microteatro Tandil.
Sinopsis de las microobras
“Viva la ReBolución”
Roberto descubre que su hijo Ramiro se lleva 7 materias y está a punto de repetir el año. Pero lo más trágico es que se encuentra con un hijo que, a pesar de ver fin de semana por medio, desconoce totalmente. Ya no hay niñeras, psicólogos ni psicopedagogos que puedan ayudarlo, el deberá por primera vez, hacerse cargo de su creación.
Dirección: Matias Acuipil
Dramaturgia: Nicolás Arizcuren
Actúan: Franco Di Menna y Fernando Bruno.
“Salto al vacío”
Rodríguez terminó su jornada laboral, lavó su tasa de café, juntó su maletín de cuero marrón y subió al último piso del edificio de oficinas donde trabaja dispuesto a terminar con su vida. Desde abajo, dos compañeros intentan persuadirlo para que no lo haga. Una trama siniestra de infidelidades, manipulación y cinismo donde cada personaje salta desde el absurdo a su vacío interior.
Dirección: Matías Acuipil
Dramaturgia: Nicolás Arizcuren
Actúan: Alejandro Echaide, Maitena Maraschin Bolzoni y Sergio Cappelluti.
“Las (des) animadoras”
Dos animadoras infantiles tratan de esconder sus miserias personales, sueños y frustraciones tras un denso manto de papel picado. Un cumpleaños atípico donde entre globos, chizitos y canciones se debate algo mucho más profundo: ¿los chicos entienden?
Dirección: Matías Acuipil
Dramaturgia: Nicolás Arizcuren
Actúan: Erika Vidal y Lucía Martin.
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