Acciones de Bromatología para controlar la propagación del dengue
Se encuentran trabajando desde principio de mes, cuando comienza el trabajo de vigilancia mediante la colocación de larvitrampas, como una forma de detectar y prevenir. Se trata de gomas de auto en desuso a las que se les coloca agua y se encuentran distribuidos alrededor de la ciudad en árboles y arbustos, el hábitat adecuado del insecto para que coloque sus huevos. De esta forma, al momento de convertirse en larvas, Bromatología se ocupa de recolectarlas para realizar los análisis necesarios, analizar y determinar si se trata del Aedes aegypti transmisor del dengue o el mosquito doméstico común.
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Olivera señaló que existen múltiples formas por las que un mosquito llega hasta la zona, como en un auto, un camión e, incluso, una valija. Por lo que es imprescindible el desarrollo de herramientas para la prevención.
En cuanto a posibles fumigaciones, el titular de Bromatología explicó que ante la invasión masiva se considerará la implementación de fumigaciones, primeramente en los espacios públicos, para luego continuar en otros terrenos. Asimismo, consideró que fumigar es verter un veneno al medio ambiente, por lo que hay que ser cautos. Es por ello que es preferible colocar larvicidas en piletas o lagunas, espacios donde los mosquitos tienen una reproducción masiva.
Determinó que por el momento no se realizarán campañas de ‘descacharreo’ barrio por barrio, sino que colocarán posters y entregarán folletos para recordar a la gente que mantenga limpio su fondo; cambie el agua de sus animales domésticos cada tres días y los limpie una vez por semana; quite todo tipo de cacharro donde se pueda depositar agua; limpie canaletas y tanques de agua que no tengan utilidad, o los vigile y, si tiene larvas notificar a Bromatología para determinar de qué tipo de larva se trata.
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