Apuestan a “convencer” a la oposición de que la ley antidespidos “es mala”
El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, aseguró ayer que el Gobierno intentará en los próximos días convencer a la oposición de que la ley contra los despidos sin causa “es mala”, y atenta contra la creación de empleos.
“Que se haya postergado nos da tiempo a seguir intentando convencer a todos los sectores políticos de que la ley de doble indemnización y de prohibición de despidos es mala”, señaló Frigerio.
En declaraciones formuladas a radio Mitre, el ministro aseguró que “hasta el miércoles que hay sesión, vamos a intentar convencer de que es una ley que va en contra del objetivo que pretende generar”.
Frigerio indicó además que el presidente Mauricio Macri “tiene mucha convicción sobre el rumbo de su mandato” y que “está dispuesto a dialogar, a negociar, pero con mucha firmeza en sus convicciones, y lo que él entiende que está mal, lo va a decir”.
“No creemos que ese sea el camino, y no estamos dispuestos acompañar algo que consideramos que es malo para la gente, para los argentinos. Vamos a tratar de convencer a todos los sectores para tratar de llegar a una ley buena, que cree las condiciones para generar puestos de trabajo, como la ley de primer empleo. Esas son las leyes que vamos a apoyar e impulsar”, apuntó.
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Se define el kirchnerismo
A menos de 48 horas de la sesión de la Cámara de Diputados, el bloque del Frente para la Victoria-PJ definía qué postura tomar sobre la ley antidespidos, para la cual propone su aprobación sin cambios, tal cual vino del Senado, aunque ante la posibilidad cierta de no reunir quórum analiza apoyar el dictamen del massismo.
“Eso es lo que estamos discutiendo”, respondió el presidente del bloque del FPV-PJ, Héctor Recalde, consultado sobre si los diputados kirchneristas estarían dispuestos a apoyar el dictamen del massismo sobre la ley antidespidos.
En declaraciones a Radio del Plata, Recalde señaló que le plantearán al massismo un acuerdo: que su bloque apoye la doble indemnización del Senado sin modificaciones, a cambio del acompañamiento del FPV-PJ al proyecto pyme del Frente Renovador.
“Si no nos ponemos de acuerdo, el riesgo que se corre es que no haya ley”, advirtió Recalde.
Sin embargo, la diputada massista Graciela Camaño negó que hubiera negociaciones con el kirchnerismo y ratificó que mañana su bancada irá al recinto con su propio dictamen.
“No hay ninguna conversación, no tenemos ninguna reunión, no nos han llamado ni nosotros hemos llamado a nadie. Estamos en la misma situación. Lo que tenemos es nuestro dictamen y con nuestro dictamen vamos a bajar”, dijo Camaño a NA.
El kirchnerismo pretende que la media sanción del Senado, que establece la Emergencia Ocupacional por seis meses, durante los cuales las empresas deberán pagar indemnización doble por despidos sin justa causa, sea aprobado sin cambios para ser girado esta misma semana al Poder Ejecutivo y de esta forma lograr que el presidente Mauricio Macri asuma el costo político del veto.
Pero esta bancada de 82 diputados (contando aliados), conducida formalmente por Recalde, que responde directamente a la expresidenta Cristina Kirchner, fracasó la semana pasada en ese afán al no reunir el número necesario para iniciar la sesión especial que había solicitado para tratar el asunto.
Ese resultado podría repetirse mañana, cuando se traten en sesión los cinco dictámenes de comisiones que hay emitidos sobre la ley antidespidos.
El primero de ellos en ponerse en consideración es el de mayoría, que firmaron los diputados del FPV-PJ y los del Bloque Justicialista, que lidera el exkirchnerista Diego Bossio, entre otros, que confirma la media sanción del Senado sin cambios.
Si no es aprobado, corresponde tratar el siguiente dictamen de comisión más votado, el del interbloque Cambiemos, que rechaza la doble indemnización y establece beneficios impositivos para las pymes, y que también estaría lejos de reunir votos.
El tercer dictamen es el del interbloque federal Unidos por una Nueva Alternativa (UNA), que lidera Sergio Massa, que a diferencia del de Cambiemos ratifica la doble indemnización sancionada por el Senado pero añade un régimen de incentivos fiscales a las pymes, que el oficialismo rechaza por su “alto costo fiscal”.
En este escenario, al kirchnerismo le quedan dos alternativas:
rechazar el dictamen de Massa, con lo cual no se conseguirían los números y la ley se caería, o acompañarlo, lo que supondría que el proyecto debería volver al Senado, porque fue modificado.
Si el kirchnerismo no acompaña al massismo el proyecto quedará sin la posibilidad de tratarse hasta el año que viene, según establece el artículo 81 de la Constitución: “Ningún proyecto de ley desechado totalmente por una de las Cámaras podrá repetirse en las sesiones de aquel año”.
En cambio, si la bancada de Recalde resuelve acompañar al massismo en su dictamen —que también tendría el apoyo del bloque de Bossio si antes se hubiera rechazado el dictamen de mayoría—, el proyecto de ley modificado volvería al Senado, donde la iniciativa fue sancionada por 48 votos afirmativos y 16 negativos.
En esa instancia, el Senado tiene dos alternativas: aceptar los cambios o insistir en la media sanción, lo que en ambos casos supone que se convertirá en ley y esta será girada al Ejecutivo, donde se descuenta que el presidente Macri la vetará.
Además de los dictámenes del kirchnerismo, del oficialismo y del massismo están emitidos dos despachos más, el del trotkista Néstor Pitrola y el de la socialista Alicia Ciciliani, que también podrían ponerse en consideración mañana, si todos los anteriores fueran rechazados.
Todos los dictámenes podrían ser modificados hasta hoy a las 18.00, cuando se realice la reunión de Labor Parlamentaria en la que se definirá el temario de la sesión.
Además de la ley antidespidos, esta previsto que mañana se debata en el recinto una declaración de repudio por la suspensión de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y la habilitación de un allanamiento judicial al diputado kirchnerista Julio de Vido, lo que anticipa una sesión larga y discutida.
También se tratarán el proyecto de devolución de IVA y el de la ley de Acceso a la Información Pública.
En este contexto, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, afirmó este lunes que el Gobierno intentará en las próximas horas convencer a la oposición de que la ley antidespidos “es mala”, y atenta contra la creación de empleos.
Todo el trámite parlamentario sobre la ley antidespidos se realiza en el medio del silencio de los dirigentes de las cinco centrales obreras, las CGT de Hugo Moyano, Antonio Caló y Luis Barrionuevo y las CTA de Pablo Micheli y Hugo Yasky.
Massa, insiste
con su propuesta
El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, ratificó anoche que mañana impulsará su propio proyecto de ley antidespidos en la Cámara de Diputados, ya que “no se puede hablar de desempleo y no hablar de empleo” porque son medidas “complementarias y van de la mano”.
Massa señaló que “es de sentido común discutir en conjunto” el freno a los despidos y los beneficios a la promoción del trabajo por parte de las Pymes y se mostró confiado de que la iniciativa se aprobará en forma “rápida y contundente” en el Senado de la Nación.
“Vemos la buena voluntad de senadores de muchas fuerzas políticas… del Frente Para la Victoria, del Peronismo Federal… Hemos charlado con dirigentes de todas las fuerzas y aspiramos a debatir en serio estas propuestas”, sostuvo el diputado.
Y se mostró confiado en que “si hay necesidad de que vuelva a intervenir el Senado sea de la manera más rápida y contundente para darle tranquilidad a los trabajadores pero también a las Pymes”.
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