Comedores escolares
Señor Director:
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Famosos chefs a nivel mundial recorrieron escuelas argentinas y observaron que aun teniendo hambre los chicos no comían la comida que se les servía, porque no les gustaba como estaba preparada. Y día tras día se tiraban ollas llenas, sobre todo si tenían verduras.
Hablaron mucho con los chicos, con los cocineros, con las maestras y usando los mismos productos, en las mismas porciones, hicieron algunos cambios con éxito.
Cocinaron el arroz ?al dente? (una medida de arroz y dos de agua); procesaron la salsa: cebolla, zanahoria, morrón, tomate, zapallitos, para que los chicos no lo notaran. Y los chicos lo comieron.
En vez de darles puré ?mixto? de papas y zapallo, les dieron por separado puré de papas y puré de zapallo. Y los chicos lo comieron.
El problema más grave era que comieran la polenta. La preparaban de varias maneras hasta encontrar la receta que a los chicos les gustó: luego de cocinada, le pusieron un poco de manteca, un poco de queso rallado y la extendieron sobre placas aceitadas, de un centímetro y medio de espesor (bien pareja). La dejaron enfriar bien. La cortaron en cuadrados y la hornearon poniéndole encima un poco de queso rallado. La doraron, dejándola casi crocante (no seca). Y a los chicos le encantó.
Cuando vi el programa pensé en los chicos, en la lucha de las madres y en los comedores escolares que tienen tantos problemas para alimentarlos. Y pensé compartir lo que vi, por si a alguien le aporta una solución en estos momentos tan difíciles.
Zulma Retta
L.C. 5.426.566
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