¿Cuáles son las principales preocupaciones del agro?
En el comienzo de la recta final de 2017, el panorama de situación de la cadena de valor agroindustrial se puede esbozar a partir de diferentes miradas. Desde el oficialismo, exhiben como un logro de gestión su diálogo fluido con el sector, y si bien ejecutaron algunas políticas macroeconómicas que apuntaron a beneficiar a este eslabón productivo –quita de retenciones y devaluación- sus efectos se han visto diluidos en parte por la elevada presión inflacionaria, incremento de los costos y aumentos en combustibles y tarifas.
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Desde las entidades gremiales que representan a los productores, empieza a verse algún atisbo de heterogeneidad. Mientras la Sociedad Rural, de la mano de su titular Luis Miguel Etchevehere es un aliado incondicional, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y CONINAGRO, que nuclea a las cooperativas, deslizan algunas críticas al gobierno (sobre todo los confederados), pero en general transitan el mismo sendero.
En contrapartida, la Federación Agraria Argentina, de la mano de su presidente Osvaldo Principe se perfila como la entidad más “opositora”. Como muestra, el titular de los federados no participó durante el pasado mes de julio en la firma de un convenio con el sector agropecuario, orientado a mejorar las condiciones de trabajo de los trabajadores rurales. En el mismo dieron el presente el RENATRE (Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores), la Unión Argentina de Trabajadores y Estibadores (UATRE) y los presidentes de las otras tres entidades.
En este escenario, ¿cuál es la percepción de los productores sobre su situación laboral y las perspectivas a nivel país? Para despejar estos interrogantes, el Instituto de Estudios Sociales del Centro de Investigaciones en Ciencias Políticas, Económicas y Sociales (CICPES) presentó el Índice de Confianza del Sector Agropecuario (ICSAgro) del INTA. El director del instituto es Gabriel Delgado, que en el período 2013-2015 ocupó el cargo de Secretario de Agricultura de la nación, durante la gestión de Carlos Casamiquela al frente de la cartera agropecuaria nacional.
El estudio, que mide la percepción actual y expectativas futuras de los productores agropecuarios, arroja algunos datos interesantes para el análisis. De manera global, y con información relevada en junio 2017, el ICS se ubicó en 55,4 puntos, en donde se evalúan ítems como evaluación económica personal y del sector agropecuario, inversiones y evolución de los precios, entre otras.
Al dividirlo en regiones, los puntajes también se encuentran por encima de los 50 puntos, pero con algunos matices. La mejor expectativa sectorial se puede apreciar en la región pampeana, con 58,4 puntos, seguida por NEA (54,8 puntos) y cierran Patagonia y NOA con 51,7 puntos.
Otro aspecto que indagó el índice fue la percepción económica personal, en donde tuvieron que responder una pregunta muy en boga estos días: ¿Cómo está su situación hoy respecto al año pasado? Un 45 por ciento de los consultados señaló que esta igual, un 30 por ciento peor y el 25 por ciento restante mejor. En relación a las expectativas, un 48 por ciento opina que el próximo año estará mejor, un33 por ciento igual y el 19 por ciento peor.
En el ránking de las principales preocupaciones, el 49 por ciento de los consultados manifestaron su inquietud por la elevada presión tributaria, en un marcado contraste con otras cuestiones, como el valor del dólar, infraestructura y acceso al crédito.
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