Desde la joyería Alca enviaron una carta a Lunghi manifestando preocupación por la inseguridad
En la misma, expresaron que “hemos sufrido el cuarto robo en nuestro local comercial, este último caratulado como “Robo agravado por portación de arma” (I.P.P. N° 01-01-002310-13), en donde nos apuntaron y amenazaron llevándose una importante cantidad de joyas y dinero”.
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“Nuestro comercio cuenta con alarma de seguridad, rejas de hierros por todos lados, y con cámaras de seguridad, las cuales han filmado todo el acto sucedido. Asimismo, somos socios de la Cámara Empresaria de Tandil desde hace muchos años y abonamos la cuota requerida para obtener el personal de vigilancia durante los días de peatonal, por lo que nos esforzamos cotidianamente en mantener al día toda la documentación reglamentaria”, aseguraron.
Las cámaras
Cuestionaron el funcionamiento de las cámaras de seguridad que colocó el Municipio, que tal como se había revelado en un informe de El Eco de Tandil, no son eficientes y están mal ubicadas.
Al respecto, sostuvieron que la Cámara Empresaria adquirió dos cámaras de seguridad para monitorear el Centro Comercial a Cielo Abierto, las cuales fueron brindadas al Municipio para su uso pero, “lamentablemente, están ubicadas, una sobre calle 9 de Julio al 400, en el Banco Santander Río, lo cual no es parte del Centro Comercial a Cielo Abierto, y la otra sobre 9 de Julio al 600; por tanto, ninguna de las dos cámaras enfoca nuestro local comercial”.
Asimismo “también es de nuestro conocimiento que las mismas no funcionaban mientras acontecía el hecho sucedido en nuestro local, y que tampoco existe personal idóneo que esté monitoreando las mismas las 24 horas. En este caso, sólo por contar con cámaras de seguridad propias y botones antipánico en el local, junto al excelente accionar de la policía de Tandil, en especial de la comisaría Primera y DDI, nos permitió recuperar lo sustraído”.
En ese sentido, manifestaron su “enorme preocupación e indignación por el suceso acontecido. En primer lugar, no podemos entender cuál es el fin de poner cámaras de seguridad en el Centro Comercial a Cielo Abierto, ya que si esto es para controlar y mantener la seguridad del lugar, debería existir personal idóneo las 24 horas monitoreando las mismas, y sobre todo éstas deberían funcionar correctamente. Lo cual no está ocurriendo”.
En segundo lugar, ante este tipo de eventos, se preguntaron: “¿Cuál es la seguridad que ofrece el Municipio hacia los ciudadanos trabajadores? Si no hubiésemos tenido un sistema de cámaras propio, que filmaran y documentaran todo lo acontecido, no se podría haber solucionado lo ocurrido”.
Sin embargo, criticaron también que a partir del robo sufrido en su local en el año 2011 “desde el Municipio, particularmente Pablo Esquivel, solicitó la presencia policial en la zona céntrica durante las horas de apertura y cierre de los comercios; lo cual se cumplió sólo por dos o tres semanas”.
Delincuentes en libertad
En tercer y último lugar, se preguntaron “¿de qué sirve el excelente accionar de la policía de Tandil, quienes en sólo dos horas pudieron solucionar y arrestar a los delincuentes, si luego de unos pocos días de lo acontecido, exponiéndose uno a ruedas de reconocimiento y demás, ya se sabe que uno de los delincuentes se encuentra en libertad por no poseer “sentencia firme” y haber pagado una gran fianza? El otro va por el mismo camino”.
Por último, cuestionaron: “¿Las leyes a quiénes amparan? ¿A los ciudadanos trabajadores o a los delincuentes? Si los jueces y fiscales son garantistas, ¿por qué no se modifican las leyes? ¿Cuándo vamos a poder vivir y trabajar con seguridad?”.
“Se te van las ganas de trabajar”
María Elena Casalini, esposa del titular de Joyería Alca, explicó que sienten “indignación porque nos enteramos que uno de los que nos robó a nosotros ya está suelto. Entonces, ¿de qué sirve ir a una rueda de reconocimiento, que lo hayan agarrado con todas las cosas, que haya salido hace una semana de Batán? No tiene una sentencia firme y por eso lo dejan libre, me parece que los jueces no tienen que ser tan garantistas en esto, tienen que tomar otras medidas o por lo menos cambiar las leyes de alguna manera”.
En cuanto al otro delincuente, indicó que todavía está detenido y que se va a realizar la rueda de reconocimiento.
Asimismo, cuestionó el funcionamiento de las cámaras de seguridad que “no alcanzan a tomar nuestro local y si no hubiera sido por nuestra filmación y que mi hija alcanzó a pulsar los botones de pánico, no tendríamos nada. Ninguna de las dos cámaras nos alcanza y es más, ese día no funcionaba ninguna de las dos porque cuando la policía llama para pedir la grabación le dicen que no funcionaban. Esa noche no funcionaron las cámaras de las 21.30 hasta el otro día a las 9.30”.
“Nosotros pagamos todos los impuestos, yo pago también esa seguridad por los días de peatonal, que la pagamos entre todos los comerciantes para que anden dos personas cuidándonos a todos, pero tampoco sirve de nada”, fustigó en diálogo con El Eco de Tandil.
Y afirmó que “en esta oportunidad, gracias a Dios mi hija está bien, pero la podrían haber matado, es terrible que un tipo te diga ‘te vuelo los sesos pendeja si seguís hablando’ y ni bien entró, lo primero que hizo fue cargar el arma. Entonces después de tantas veces ya se te van las ganas de seguir trabajando”.
“Lo que le pedimos en la carta más que nada al Intendente es que traten en el foro de seguridad el tema de las leyes y por lo menos a la hora de entrada y a la de salida, nosotros tenemos que tener una persona dando vueltas acá. Yo entiendo que capaz que no tienen el personal suficiente pero que busquen, porque nosotros pagamos, pagamos y pagamos, pero hasta ahora, nada. Yo vengo a las 16 y no hay nadie, no ves un policía para nada”, criticó.
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