El desafío del “Ruso” Miguel Ojeda
César Miguel Ojeda inicia una nueva etapa en la máxima. En su bunker de Olavarría, tendrá la responsabilidad de los motores de J. Castellano y J. De Benedictis.
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Uno de los motoristas que ha movido el tablero del TC es el “Ruso” César Miguel Ojeda, motorista olavarriense con grandes logros en los últimos tiempos en la máxima, quien se iniciara con Torcuato “Tito” Emiliozzi y Raúl Durán.
Ojeda fue además uno de los preparadores que asistió al “Gurí” Martínez en su exitosa temporada, donde logró el segundo título en la categoría más popular.
Desde 2010 hasta marzo de 2015 formó parte de la estructura de Omar Martínez. Después del segundo puesto en Concordia, se terminó en buenos términos la relación con el entrerriano. “El domingo que se consagró campeón en La Plata, después de la conferencia de prensa me vino a saludar el Gurí y me dijo: ‘una parte del título es tuya’, algo que me llenó de orgullo”, comentó.
El preparador de la ciudad del cemento volvió a su terruño: “Regresé a mi ciudad porque entendí que era el momento de volver. Ahora tengo mi propio taller y hace unos días llegué a un acuerdo para armar los motores de Johnnito De Benedictis y del Pinchito Castellano. Es un desafío importante que me gusta mucho”.
El capítulo inaugural es una de las metas de los preparadores para observar el funcionamiento de los autos. “A la primera carrera casi siempre se llega de manera ajustada, por el tiempo que lleva armar un motor de cero. Si no se complica nada, debo llegar bien. Se arma en Olavarría, luego pasan al banco de pruebas de Castellano en Lobería. Las pretensiones de los dos pilotos es la misma que tienen todos, tratar de funcionar bien”.
El “Ruso” tiene buenas relaciones con las dos históricas figuras que representaron en los ’80 al sudeste bonaerense, “Con De Benedictis padre, como con “Pincho” Castellano siempre hablaba en las carreras temas de motores como ocurre con cualquier preparador, pero ahora soy el encargado de los motores de cada uno de sus hijos. Todo irá bien, no hay demasiados secretos. Los motores son todos parecidos en su rendimiento, no son muchas las cosas que se puedan tocar para desarrollar”, reflexionaba César Miguel Ojeda.
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