El fuego destruyó el galpón de Muebles Heredia
Una gran columna de humo negra que se divisaba dese lejos llamó la atención de la comunidad ayer. El fenómeno provenía de la zona de Sarmiento y Santamarina. Es que la mueblería Heredia sufrió un voraz incendio que dejó su galpón trasero totalmente destruido, con gran pérdida de mercadería. Afortunadamente ninguna persona resultó herida, aunque los Bomberos debieron trabajar en conjunto con la policía y Vialidad. Los propietarios no contaban con seguro.
El hecho comenzó cerca de las 11, cuando los Bomberos del Cuartel Central acudieron a un llamado de incendio en la mueblería Heredia, ubicada en Sarmiento 944. Al llegar al lugar, los profesionales se encontraron con un incendio de grandes proporciones que requirió la presencia de varias dotaciones de Bomberos, tanto del Cuartel Central como de Villa Italia, y el apoyo de camiones cisterna de la Dirección de Vialidad de la Municipalidad para abastecer las autobombas.
En diálogo con El Eco de Tandil, el jefe de Bomberos, Ramón García, explicó que se localizó el foco en la parte central de este inmueble, que pertenecía a un galpón con techo y sin paredes en uno de sus laterales. Esto les permitió trabajar en forma directa ya que había un importante riesgo de propagación, tanto al depósito que se encontraba en la parte trasera, distante a unos 50 metros de la línea municipal, como al salón de ventas que se encuentra sobre la vereda.
Cabe señalar que la propagación se vio favorecida por la combustibilidad que tienen estos materiales ya que, al ser una mueblería, la mayoría de sus componentes son inflamables; así como también ciertos lugares que facilitaban la combustión y que ayudó a que se propague bastante más rápido de lo que debería.
Las causas
Por su parte, el propietario de la mueblería, Gregorio Heredia, relató que estaba trabajando en el depósito cuando se acercó a la parte delantera del negocio para traer cierta mercadería, pero sintió el crujir de la madera. En ese momento observó humo que corría por el tinglado del galpón y cuando miró detalladamente, detectó que se estaba prendiendo fuego.
“Me imagino que debe haber sido algún cortocircuito o algo similar. El cielorraso es de telgopor así que que se prendió rápidamente; además que abajo había una partida de 30 sommiers que habían llegado el lunes y que estaban acomodados allí; así como también otros 20 juegos de living”, detalló el propietario.
Peligro potencial
Por otro lado, el jefe de Bomberos explicó que potencialmente hubo riesgo de explosión en base a algunos tubos de gas que se encontraban en la parte final del inmueble, pero el fuego estuvo a unos 50 metros del acopio. No obstante, manifestó que se produjo una caída del techo del galpón donde se inició el fuego y de hecho, el personal estuvo trabajando con riesgo permanente para tratar de cortarlo.
En lo que respecta a las pérdidas, García indicó que fueron totales en el lugar donde comenzó el incendio pero no así en el resto del comercio ya que se cortaron las áreas de propagación; aunque hubo un trabajo importante del humo que seguramente va a afectar a muchos bienes que se encontraban depositados.
Uno de los puntos importantes que resaltó García fue la gran cantidad de productos dispuestos en los pasillos, que deberían tener ciertas medidas para circular que tal vez no se respetan. Indicó que es un lugar laberíntico, como muchos depósitos, por eso dificultó mucho la tarea del bombero en virtud de que ingresar a un lugar donde carece de todos los sentidos porque tiene un equipo que no le permite tener visión, olfato ni tacto, es complejo.
Por último, explicó que se desconoce a ciencia cierta cuál fue el origen del fuego y lamentablemente cuando llegó el personal de Bomberos, a pesar de estar a pocas cuadras, el incendio ya estaba generalizado, por lo que se presume que la advertencia se dio cuando llevaba varios minutos.
Sin embargo, para las 12 el fuego ya estaba controlado, por lo que se hizo una tarea de escombramiento y remoción para tratar de apagar cualquier foco pequeño que quedara y que no se pudiera visibilizar como consecuencia del humo.
“Duele porque son muchos años de trabajo”
Gregorio Heredia, propietario del comercio, mencionó que los Bomberos fueron muy rápidos aunque destacó lo precario de las herramientas ya que llegaron con una sola línea y “no se puede apagar un incendio sólo con eso”.
Reiteró la excelencia humana y profesional, así como que en todo momento trataron de protegerlo; pero indicó que trabajaron cerca de media hora con una sola línea hasta que lograron conectar la segunda.
De toda esta experiencia muchas veces queda un sabor amargo, pero Heredia logró valorar que su familia está bien y expresó que su mayor preocupación fue por los vecinos y el posible daño que se podía producir. “Eso hubiera sido lo más doloroso”, afirmó.
Por su parte, su mujer Rosana recordó que estaba muy preocupada por su esposo ya que era quien estaba en el negocio al momento del incendio. “Se metió a ayudar y no lo podía sacar, pero tenía miedo de que le haga mal el humo porque todo esto es tóxico”, advirtió. Sin embargo, una vez que comprobaron que estaban todos bien, la propietaria indicó que este hecho “duele porque son muchos años de trabajo” ya que la mueblería hace más de 12 años que está en Tandil pero hace más de 40 que vienen trabajando.
“Seguro no tenemos, así que vamos a seguir con fuerza y de a poco iremos recuperando el material que se perdió”, concluyeron.
Recibí las noticias en tu email
Este contenido no está abierto a comentarios