Ladrones entraron a una casa mientras su dueño dormía, lo golpearon salvajemente y lo asaltaron
El hecho ocurrió alrededor de las 4.30 cuando Ricardo Esteban Herrera, de 58 años, se encontraba durmiendo en su casa de Del Valle 908, que está ubicada detrás del bar El 24, de Richard I, que pertenece a la víctima.
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Los malvivientes accedieron a la finca luego de saltar un muro que da a la calle Vicente López.
“Me quebraron en tres partes la muñeca”
En diálogo con El Eco de Tandil, el damnificado contó que “estaba dormido y me tiraron la puerta abajo, no sé si con un fierro o con una patada. Entraron dos tipos y me empezaron a pegar a oscuras. Yo me cubrí un poco la cabeza tratando de defenderme y ahí es donde me quebraron en tres partes la muñeca”.
“Pero me siguieron pegando con un fierro, que después mi hijo encontró tirado afuera. No les puede ver la cara. Ellos ya sabían dónde estaba la plata. Lo que no recuerdo, porque yo estaba dormido, es si estaba la llave de la caja fuerte puesta”, afirmó.
Y añadió que “no recuerdo la cantidad exacta de dinero que había pero más de 20 mil pesos seguro. No me acuerdo exactamente porque soy medio despelotado con la plata”.
“Si los llego a ver me matan”
“Gracias a Dios que no prendí la luz porque si los llego a ver me matan. Me decían: `Dale hijo de p… dame la plata´. Yo me resistí al robo, primero me pegaron y luego se llevaron el dinero”, explicó.
A su vez, deslizó la sospecha de que “ellos sabían que estaba esa plata ahí. Fueron momentos de mucha tensión y me duele todo. Tengo una pequeña sospecha de quién puede ser, alguien que siempre me amenaza, en la comisaría dije lo mismo. Me podrían haber matado si yo no ponía el brazo en la cabeza, ahora no estaría contándolo”.
La fuga
Los delincuentes se dieron a la fuga por una puerta de emergencia que tiene el negocio, que da al fondo de la casa. Aparentemente se escaparon corriendo, sin utilizar ningún vehículo.
“Venían decididos a pegarme y llevarse la plata, no se llevaron ninguna otra cosa. No es tanto el dinero pero sí la paliza que me pegaron, me golpearon por todas partes. Estoy todo dolorido”, expresó.
Luego del asalto, fue trasladado al Hospital Ramón Santamarina, donde debieron enyesarlo porque los ladrones le quebraron la muñeca en tres partes.
Y destacó que “se portó muy bien la policía, la ambulancia llegó muy rápido, perdí mucha sangre, había un charco de sangre impresionante”.
Por último, aseguró que “hay que seguir trabajando, son cosas de la vida para las que uno no está preparado”.
La denuncia fue radicada en la comisaría Tercera y la causa quedó caratulada como “Robo y Lesiones”. Interviene la UFI 3.
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