Más de trescientas personas participaron de un simulacro de catástrofe en el Carrefour
Con un espectacular despliegue, ayer por la mañana se llevó adelante un simulacro de catástrofe en el hipermercado Carrefour, situado en Panamá al 300. El operativo de entrenamiento requirió la participación de más de 300 personas, más 140 actores que tenían diferentes roles en la escena que se montó en el cine, ubicado en el interior del centro comercial.
El enfermero jefe del Servicio de Emergencias Médicas del Hospital Ramón Santamarina, Claudio Vulcano, explicó que trabajaron en el lugar más de 300 personas y participaron unos 140 actores, que tenían diferentes roles dispuestos de antemano. Entre ellos, había estudiantes de todas las escuelas de enfermería, grupos de scout y cadetes de la escuela de Policía Local.
“El desarrollo en sí era en una situación de colapso de estructura dentro del cine. Los bomberos tenían que trabajar y controlar el área. Se realizó una evacuación, y una categorización según la gravedad de las víctimas”, indicó.
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Amplio
despliegue
Participó personal del Ejército montando un hospital móvil, Defensa Civil con una unidad de comunicación, Policía Local con sus efectivos que hicieron el vallado, personal de seguridad de Carrefour con sus brigadas para acciones de emergencias y socorristas de Cruz Roja, del Hospital, las ambulancias del 107 y privadas.
A su vez, hubo veedores externos, que era personal entrenado, en su mayoría médicos y bomberos, profesionales de las distintas áreas de emergencias.
Además, “se trabajó interrelacionado con socorrismo de Cruz Roja con la parte sanitaria militar, y en sí la temática de todo era del manejo de los roles interinstitucionales dentro de la escena”.
El simulacro comenzó a las 10 y terminó 43 minutos después con “la evacuación de las víctimas más graves, la atención en el lugar de los heridos leves, y se finalizó con las que eran de menor gravedad”.
La evaluación
En cuanto al balance del procedimiento que se realizó posteriormente, explicó que “se retiró la gente, se quedaron los coordinadores de todas las áreas junto al coordinador de Defensa Civil y se hizo una puesta en común de lo que habían visto los observadores externos”.
“Se nos dijo las cosas que habíamos hecho bien, las que teníamos que mejorar y en base a eso cada cual se va a su institución, habla con su personal y cada institución realiza después un protocolo de actuación interno. Ya entrando el año que viene se van a hacer ejercicios de maniobras para mejorar esto”, indicó.
Luego, se realizarán “ejercicios de maniobras en conjunto, que es algo más guionado, más controlado. Llegado el final del año que viene se va a hacer un simulacro de una temática parecida para ver si se logró mejorar la situación”.
“En líneas generales, estamos más que conformes, el simulacro siempre sale bien, pero se ponen observadores para mejorar todo. Los simulacros están creados para que cuando llegue la realidad, uno no se encuentre con sorpresas y pueda responder de la mejor manera”, argumentó.
Y resaltó que “en el ciento por ciento de los simulacros los veedores tienen que encontrar algo. Si no te encuentran algo es porque fracasaron, porque es un ejercicio para poder pulir técnicas y mejorar”.
Además, subrayó que “se desplegó el material real que se cuenta en estos casos, que no escapa a la realidad local, usamos el personal realmente existente. Teníamos una hora para resolver y se hizo en 43 minutos. Técnicamente sabíamos que todo iba a andar bien, los detalles que surgen no tienen que ver con la atención directa sino cosas para pulir”.
“Nosotros anualmente hacemos un simulacro, pero en éste participó a pleno todo el personal de Tandil. Se estuvo anunciando toda la semana en los medios de comunicación y aparte de eso había destinados scouts que le avisaban a la gente que estaba ahí para que no se alarmara”, sostuvo. u
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