Muestra patrimonial, expresiones, identidad y lenguajes artísticos
Los actuales procesos de globalización, en cualquiera de sus manifestaciones, han desatado una sorprendente e inesperada tensión dialéctica entre lo local y lo total. Vivimos un intenso proceso de fragmentación territorial y de resurgimiento de las identidades colectivas en un mundo cada vez más interconectado, y asistimos a una excepcional revalorización de los lugares, de los territorios. La globalización se expresa a través de la interrelación entre las fuerzas de la comunidad integral y las de la particularidad cultural, en una tensión continua entre fragmentación y homogeneización. Es sorprendente, pero lo cierto es que, en lugar de mermar el papel del territorio, la internacionalización y la integración mundial, han aumentado su peso específico, comenta Vicente Negué.
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Sin embargo aún hay muchos y diversos espacios de resistencia que expresan sentimientos de comunidad, sentimientos de identidad, en definitiva, las sociedades contemporáneas redescubren, reivindican, reinventan lugares. Cuando creamos lugares en el espacio geográfico, cuando los vivimos, creamos identidades. Hablar de lugar, por tanto, es hablar de identidad, asociada al espacio geográfico.
Diálogo e interpretación de las obras
Una de las salas que alberga en esta temporada estival el Mumbat da cuenta de ese sentimiento de pertenencia e identidad como se puede apreciar en las obras de Sergio Artola y Eva Llamazares “Autitos chocadores II.”, Diana Dowek “De lo inevitable I” y Néstor Goyanes con sus grabados “El árbol de la identidad” y “El puente de mi abuela Petra” litografías”.
En la obra de Diana se observa la transformación de la realidad a través de la figuración. Durante 50 años sostuvo la misma actitud en manos de su pincel que vincula con la fotografía, ella capta la realidad a través de la cámara y después hace una transferencia a la tela, en el límite conflictivo entre pintura y fotografía. Comenta la artista: “Mi gran preocupación siempre fue cómo encontrar las claves para simbolizar lo que estaba pasando”. En la obra “De lo inevitable I” el movimiento que le imprime el quiebre de los espacios, a la manera de los futuristas italianos y el vértigo de las pinceladas, transforman la apacible arquitectura urbana. Para la artista la pintura es un campo de batalla, donde la propia vida se confunde con los acontecimientos que marcaron la historia del país.
Por su parte TelurioCromo, conformado por Sergio Artola y Eva Llamazares, dos artistas de la ciudad de Buenos Aires nacidos en el barrio de Villa Urquiza se encuentra profundamente anclada en las calles vecinas al Museo Histórico de Buenos Aires “Cornelio de Saavedra” y en el parque que forma parte del paisaje de la infancia de Sergio y de Eva. La gráfica es el punto de partida para la creación de las imágenes. El auto, el barrio, las calles transitadas y la familia son algunos de los territorios comunes que les permiten desarrollar una “serie” colectiva. Esta indagación conduce a imágenes que significan y realzan elementos identitarios de cada uno. En estos collages gráficos, a partir de impresiones realizadas con planos de Villa Urquiza, utilizan la imagen del Siam Di Tella como objeto que nos transporta a un espacio que forma parte de la realidad, pero que también representa muchas de las vivencias de cada uno. Las técnicas entrelazan el grabado, el calado y el collage que se manifiesta en la utilización fragmentaria de la estampa.
En las litografías de Néstor Goyanes, que pertenecen a la serie ‘De viajeros, inmigrantes y aventureros sumerge al espectador en el tiempo transportado a través de las cartas coleccionadas y protegidas por su madre y los sellos como final de trayecto y recorrido. El artista plástico Rafael Gil de quien el Mumbat atesora obra en su patrimonio, escribió sobre esta serie: “todo comenzó con un viaje a Galicia, esa tierra de los abuelos que lleva en el alma, con las cartas que su madre celosamente guardaba de los parientes que vivían allá”.
Así en cada obra el logro de un diseño consciente, cargado de significación, cuyas expresiones y lenguajes no puedan ser indiferentes al lugar en el que habitan, principalmente su paisaje local y cotidiano, son algunas de las propuestas que se pueden compartir en salas del Mumbat en relación a su patrimonio exhibido.
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