Por los altos precios de la fruta de estación, su consumo bajó alrededor de un 40 por ciento
Marcos Muñoz, gerente del mayorista de frutas y verduras Central Tandil, explicó que “el valor en distintos artículos se ha incrementado de diferentes formas, pero en lo que es frutas de carozo ha subido terriblemente. Está carísimo, no se puede consumir”.
“El kilo de cualquier fruta de carozo sale prácticamente lo mismo que un kilo de carne, entonces la gente no la consume. Además, tenés otras alternativas como la banana, la manzana, la naranja, que están en un precio muy accesible, entonces la reemplazan, obviamente”, afirmó.
El durazno, pelón, cereza y demás frutas de carozo se suelen “consumir en masa en plena temporada, ya que dura poco tiempo”, pero este año, eso “no ocurre, sólo lo compran algunas personas pero el común de la gente no lo hace”.
En consecuencia, sostuvo que “se redujo notablemente la venta. Respecto a la temporada del año pasado se ha perdido un 40 por ciento”.
Las causas
En cuanto a las causas de estos incrementos tan marcados, detalló que lo que ocurrió con este tipo de frutas es que “en la floración de la planta, heló y se quemó la flor, entonces los rindes son mucho más bajos que en años normales. Ese es el verdadero problema y también hay que sumarle el costo del flete y demás. Pero eso no hubiera interferido tanto, realmente el precio fue desorbitante porque se quemó la floración”.
“Ahora el durazno está bajando un poco porque estamos perdiendo calidad. Como el consumo no está, ésa es una fruta que no se puede almacenar, que no espera; no es como una manzana que la podés dejar de un año para otro en una cámara, entonces se empieza a desmerecer. Por ese motivo, está un poco más barata pero la calidad es muy inferior”, señaló.
Empero, aclaró que el precio no va a bajar en forma significativa. “La cereza, por ejemplo, que sí se puede conservar, en Tandil en muchos lugares la están cobrando 95 pesos el kilo. Es una locura, la cereza vale alrededor de 60 pesos el kilo, la están cobrando un 40 ó 50 por ciento más de lo que cuesta en verdad”.
Por otra parte, manifestó que “con la exportación se quedan sin mercadería para nosotros, entonces la comercializan a valor dólar. Esa es la realidad. No va a haber faltantes, pero no va a haber baja de precios, van regulando la venta con el precio”.
El variable precio
de las verduras
En lo que respecta a las verduras, explicó que “el tomate tiene una tendencia, sube y baja. Ahora, por ejemplo, bajó. La semana pasada estaba carísimo. Se maneja con la luna, cuando está en cuarto menguante madura y cuando sale de cuarto menguante, no. Cuando se corta la maduración del tomate, falta. Generalmente, son 10 días y sube el precio”.
“La semana pasada por ejemplo que no maduraba valía 200 pesos un cajón de tomates. Hoy ya empezó a madurar y vale 80 pesos. Es decir, que baja un 120 por ciento en cuestión de días, pero eso es normal, es todo el año así, tomate hay mucho y no pasa nada. El tomate y la papa son los artículos más variables que tiene el mercado”, aseguró.
Por otra parte, señaló que en estos días “está carísimo todo lo que es hoja, que también es producto del fuerte sol por lo que se perdió mucho rinde, ya que quemó mucha verdura, sobre todo lechuga, espinaca”.
“Todo lo que es cultivo de hoja ahora está caro pero eso se va a solucionar, porque se quedaron sin mercadería por 20 días porque se quemó y ahora empiezan a sacar nuevo y vuelve a bajar. Esto va todo de la mano con el clima, a las altas o bajas temperaturas que traen cola en la producción”, argumentó.
LA ACTUALIDAD DEL SECTOR FRUTIHORTICOLA
“El productor está
muy descuidado”
Por otro lado, Marcos Muñoz consideró que “la realidad es que la inflación que estamos viviendo es real y altísima. El productor está muy descuidado, porque se maneja con agroquímicos que se cobran en dólares, y tiene mano de obra que sube todos los días, la madera sube y el flete”.
“Si lo trasladás a un kilo de papas o de tomate, 10, 12 pesos es caro pero un helado vale 15 pesos. Entonces son realidades que son opuestas con el sueldo, pero no con lo que vive un productor. Es lo mismo que está pasando con los sueldos, uno tendría que pagar sueldos altísimos pero la realidad es que no lo puede hacer por la gran carga que se genera en el Gobierno. Esa es la economía que estamos viviendo”, analizó.
En cuanto a los verduleros, sostuvo que “se quejan porque no tienen el poder de consumo. Hoy una caja de uvas de entre 10 y 12 kilos, por ejemplo, está 400 pesos. Entonces, no tienen la disponibilidad de la mercadería. Antes en una verdulería veías 10 ó 15 cajas de uvas y ahora hay 1 ó 2, porque no tienen el poder adquisitivo para traerlas y tampoco se venden”.
“Son productos que son súper perecederos y más con estas temperaturas, entonces es muy difícil levantar un negocio. Hoy por hoy este rubro está muy golpeado”, concluyó. u
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