Por una información confiable
Por Roxana Morduchowicz (*)
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Buscar información en Internet es la segunda actividad más importante para los adolescentes, después de las redes sociales. Ya sea para la tarea escolar o por propia curiosidad, todos los adolescentes navegan en la web buscando información. Sin embargo, en todo el mundo, existe hoy una gran preocupación por la manera en que los adolescentes se informan.
Estudios internacionales dicen que cuando los estudiantes buscan información en la web, eligen la primera página que encuentran; no analizan ni chequean la procedencia de la información; utilizan un solo sitio web, no comparan ni chequean entre varias páginas, no distinguen entre publicidad e información y se informan exclusivamente por las redes sociales.
Los riesgos de estas limitaciones no son pocos ni menores. Copiar y pegar lo primero que les aparece en el buscador de la web conspira contra la actitud reflexiva y crítica de los chicos, limita la comprensión de los hechos sociales y afecta la toma de decisiones, porque están basadas en una información de dudosa credibilidad. Finalmente, utilizar solo las redes sociales para informarse, con frecuencia significa viralizar contenidos, informaciones y noticias falsas, solo porque las envió un amigo en quien confían. Los chicos creen casi ciegamente en sus contactos, y pierden de vista al autor del texto.
Por ello, en el mundo se habla de la necesidad de promover una Alfabetización Informacional, que enseñe a los estudiantes a investigar, chequear, comparar y evaluar los contenidos que circulan en la web, para estar en condiciones de construir una opinión fundamentada y tomar decisiones sobre la base de una información confiable.
La campaña que lanza Adepa con el apoyo de la Fundación Arcor, se basa en expresiones de la vida diaria, que circulan en la web y que muchos adolescentes consideran ciertas, aunque son falsas. “Tomar sol porque cicatriza el acné o correr abrigado porque se pierde peso” son las frases de la campaña. Considerarlas como ciertas –sin chequear su procedencia y confiabilidad- puede incluso generar riesgos. El mensaje de la campaña busca sensibilizar a los adolescentes para que investiguen, cuestionen y chequen lo que leen en la web y formen luego su propia opinión.
En todo el mundo, se promueven recomendaciones que los adolescentes pueden seguir para hacer un uso reflexivo de Internet y seleccionar solo informaciones y noticias confiables.
Algunas recomendaciones:
-No utilizar sólo el primer link que aparece en el buscador.
-Leer siempre más de un sitio web. Comparar lo que dice cada uno sobre el mismo tema.
-Identificar al autor de la página web. Analizar si hay un editor responsable, comprobar su trayectoria y autoridad para informar.
-No confundir cómo llegó la información (un amigo, un familiar) con la fuente originaria de la información
-Compartir solo los contenidos de los que se sabe con seguridad que son ciertos.
Para ingresar en la sociedad del conocimiento, los estudiantes deben aprender a diferenciar la relevancia de una información, distinguir su confiabilidad, evaluarla y tomar decisiones reflexivas y fundamentadas. Estas son sin duda, competencias claves para todos los estudiantes en el siglo XXI.
(*) Doctora en Comunicación, autora del libro “Ruidos en la web: cómo se informan los adolescentes en la era digital”
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