Rocío Alvarez regresa a Tandil con ?Almica?
-¿Qué es lo que vamos a poder disfrutar los tandilenses y turistas que visiten nuestra ciudad el próximo fin de semana largo?
Rocío Alvarez: ?Almica? es un espectáculo de danza neoclásica. Somos un grupo de diez bailarines, contando a la directora que también baila con nosotros. Es un espectáculo que se divide en diferentes escenas. Cada una corresponde a distintos pensamientos escritos por la directora y concuerda con un ritmo de música diferente: hay tangos, bulerías, música disco; tenés una milonga también. Está todo mezclado.
La música en vivo también es importantísima. Está compuesta especialmente para la obra (Raúl Bao y Pedro Olcese). Raúl Bao toca y nos acompaña a nosotros con la guitarra. Interpreta muchos ritmos de España porque es parte de su origen también.
-¿Qué le decís a la gente que tiene algún prejuicio con respecto a la danza clásica?
-La gente, cuando uno le dice danza clásica, va con ese preconcepto de ?a mí la danza clásica me aburre, no me gusta?. Esto es otra cosa, es entretenido y tiene un mensaje, un por qué, un para qué. Es el motivo por el que nosotros lo hacemos, y nos encanta. También se lo llama espectáculo de danza teatro porque hay una voz en off que es la que expresa el pensamiento, después de cada pensamiento viene la coreografía con la música específica.
La música se mandó a hacer en Buenos Aires, las coreografías son exclusivas de la directora. Tiene un trabajo de muchos meses y siempre lo seguimos puliendo.
-¿La obra ya se estrenó en Mar del Plata?
-Nosotros presentamos esta obra en la temporada de verano en Mar del Plata, terminó la temporada y se sigue ensayando todos los días. Hacemos clases de ensayo de lunes a viernes, no se para. Se modifican pequeñas cosas para ver si quedan mejor, siempre se busca la perfección en todo, desde el vestuario, el peinado, el maquillaje. Cada bailarina tiene un maquillaje diseñado para ella. Es muy minucioso todo, se busca la perfección, el detalle. Lo que uno piensa que la gente no ve, sí se ve; el conjunto hace a un buen espectáculo.
-¿Cuánto dura un ensayo?
-Nosotras hacemos una clase y después el ensayo. Es un total de tres horas todos los días. Es un trabajo profesional y a nosotros nos gusta. Lo hacemos por pasión, porque si no te gusta no lo podés hacer. Es un sacrificio, te duele el cuerpo y tenés que ir igual, te duelen los pies y lo tenés que hacer igual. Lo que te motiva es la pasión y saber que vas a subir al escenario: esa sensación es única, la devolución del público es única. El estrés que vivís al salir a hacer la función lo vivís, lo hayas hecho una vez o diez veces. Se repite siempre lo mismo, una adrenalina que es lo que yo no cambio por nada.
-Estuviste varios años sin subirte al escenario, ¿Cómo fue tu reencuentro con la danza?
-Yo estudié acá en Tandil, en la Escuela Municipal de Danzas. Terminé y me fui a estudiar derecho a Mar del Plata y ahí colgué las zapatillas de punta y dije: ?Nunca más me paro en un par de puntas, nunca más sufro, nunca más nada?. Y un día empecé a hacer danza contemporánea, más relajada, vi un aviso que era de una audición y dije: ?Qué hago, ¿me presento?, ¿no me presento?, ¿y si me empiezo a meter de vuelta??, pensé. Fui, me presenté; era un entrenamiento, no era danza clásica. Después surgió otra audición y me presenté para un grupo de danza teatro en el cual también estoy. Luego surgió ésta y dije: ?Yo que no me paro hace siete años en un par de puntas ¿qué voy a hacer??. Me compré las zapatillas, era una semana de clases. Lo hice? el último día me calcé las puntas y fue como si hubiera hecho danzas todos los días. Y quedé? podría haber sido un desastre, pero no. (Entrevista realizada por Andrea Rossetti).
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