Saveljich, el tandilense que se llevó Montenegro
Le dicen Polaco, pero es argentino y se hizo montenegrino. Esteban Saveljich se sumó al seleccionado balcánico y se transformó en el tercer tandilense en llegar a un combinado extranjero, después de que en la década pasada hicieran lo propio Mariano Pernía (España) y Mauro Camoranesi (Italia).
Recibí las noticias en tu email
En su primera incursión internacional, el zaguero disputó un amistoso frente a Dinamarca (1-2) y un cotejo clasificatorio para la Eurocopa 2016 ante Suecia (1-3), en ambos casos ingresando desde el banco de suplentes.
Saveljich, de 24 años, vivió un pasaje invalorable en el seleccionado que dirige Branko Brnovic, aquel mediocampista que fuera parte de los seleccionados yugoslavos de los ’90 y que se destacara en el Espanyol de Barcelona.
De descanso en Buenos Aires, donde espera el inicio de los entrenamientos con Defensa y Justicia, el defensor dialogó con este Diario y contó su reciente experiencia.
Además, se ilusionó con recibir futuras convocatorias, ya que Montenegro jugará en septiembre con Liechtenstein y Moldavia, partidos correspondientes a las eliminatorias hacia Francia 2016.
-¿Cómo se fue dando esta posibilidad?
-Por una relación familiar, ya que mi bisabuelo era montenegrino. Es algo que nunca lo tuve en cuenta para el fútbol, pero me lo comentó gente de la Embajada en Buenos Aires, porque ellos buscaron antecedentes en distintos jugadores y ese fue mi caso. Se trabajó con el pasaporte y me sirvió para poder jugar. En su momento lo hablé con mi señora y lo decidimos, ya que era una oportunidad única.
-¿Qué encontraste a tu llegada para sumarte al seleccionado?
-Fui una semana antes del amistoso con Dinamarca. Me recibieron de la mejor manera y aprendí algunas palabras elementales para el fútbol. Fueron pocos entrenamientos y ya viajamos para jugar.
-Cuando ibas a entrar contra Dinamarca, se vio que el técnico te estaba hablando… ¿Qué te decía?
-Cosas puntuales del momento, más que nada que estuviera tranquilo. Me dijo que haga lo que sé hacer, me dio confianza y apoyo.
-¿Cómo es el nivel de jugadores del seleccionado de Montenegro, comparándolo con lo que estás acostumbrado en Primera División de Argentina?
-Es todo muy parejo. Encontré jugadores jóvenes, interesantes, con posibilidades de trascender. Y un juego rápido.
-¿Cómo viviste el partido con Suecia, ya por los puntos?
-Fue todo para disfrutarlo, algo que nunca hubiera imaginado. Todo el entorno, los jugadores que había, la situación de un partido internacional.
-Y supongo que la presencia de Zlatan Ibrahimovic…
-También, sin dudas, estar cerca de semejante jugador. Ya cuando estaba calentando veía los movimientos que tiene, la clase para ubicarse y para jugar la pelota. Y dentro de la cancha demuestra por qué es uno de los mejores delanteros del mundo, hizo dos goles y marcó diferencia.
-¿Te dijeron algo de una futura convocatoria?
-No se habló demasiado, pero sé que el cuerpo técnico quedó contento con mi desempeño, tanto en los partidos como en lo grupal. Así que es posible que vuelva a ser convocado.
-¿Qué repercusión tuviste entre tus compañeros en Argentina?
-Las mejores, con los que estuve en contacto, pero todavía no volvimos a los entrenamientos con el club. Seguramente me van a cargar un poco, pero con la mejor onda.
-¿Tu futuro está en Defensa y Justicia o tenés previsto volver a Racing?
-Racing es el dueño de mi pase y el préstamo en Defensa es hasta fin de año. Falta bastante tiempo, no pienso demasiado en eso sino en tratar de consolidarme y darle lo mejor a mi equipo.
La mano de Botella
-¿A Tandil venís seguido?
-Mucho menos de lo que quisiera, la última vez que estuve fue en Navidad. Pero para ir necesito algunos días libres, para que se justifique el viaje, así que vamos poco.
-¿A qué edad te fuiste a Racing?
-A los 17 años. Fui a probarme y quedé, en 2009. Había tenido otra buena prueba en Vélez, pero había un problema con la pensión y se complicó.
-¿Habías pasado por varios puestos?
-Sí, como casi todos los chicos, había jugado mucho de delantero y hasta de arquero, desde la época del baby en La Esperanza. Fui dándome cuenta de que tenía mejores posibilidades yendo de marcador central, algo que me recomendó Duilio Botella.
-¿Botella fue un poco el mentor de que te retrasaras en la cancha?
-Seguro, para aquellas pruebas en Buenos Aires, me explicó que tenía mayores posibilidades yendo de marcador central. Me sirvió mucho para progresar.
Este contenido no está abierto a comentarios