Vecinos denunciaron la apropiación de tierras de un parque público
Los concejales del Frente para la Victoria Eduardo “Tony” Ferrer y Rogelio Iparraguirre hicieron pública la denuncia ayer, tras recibir la inquietud de los habitantes de la zona.
Se trata de unas 37 hectáreas ubicadas detrás de la Chacra Experimental de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Unicén, sobre avenida Don Bosco. Esas tierras fueron donadas por la familia Cinque al Municipio en el año 2000, según consta en la Ordenanza 8.176.
Habitantes de la zona confirmaron a este Diario que Fernando Ferrari tomó posesión de una parte del predio, asesorado por el abogado Rodrigo López Santoro y por el agrimensor Esteban Kain. Se trata de un heredero de una de las donantes, que reclamaría tener derechos sobre ese predio turístico.
Un espacio
muy utilizado
Los ediles del Frente para la Victoria manifestaron que se trata de un predio de recreación en la zona serrana, con abundante flora y fauna natural y dos cavas de una antigua cantera, cuya donación se aceptó a través de la Ordenanza 8.176, como “Parque Antonio y Juana Cinque”.
En la norma se estableció que la cesión al Municipio fue efectuada por Lía Anunciada Cinque de López Mata, Jorge Armando Cinque, Lía Esther Blanco Villegas de Ferrari, Jorge Alberto Blanco Villegas, Alicia Beatriz Blanco Villegas, Antonio Luis Cinque, Juan Leonardo Cinque, Liliana Cinque de Córsico, María del Carmen Cinque de Bellagamba, Elena Ester Cinque de Craviotto, Sara Edelweiss Cinque de Mezzadri, Delia E. Kindsvater de Cinque, María Cristina Cinque de Delbueno, Miguel Martín Cinque, Miguel García Freire, Marcela García Freire y Federico García Freire.
“A partir del 14 del presente mes y año, en forma intempestiva, se empezaron a realizar en el parque de referencia, obras de amojonamiento, colocación de postes para instalar alambrados, terraplenamiento del arroyo que lo cruza, con el evidente propósito de apropiación, en violación de los derechos municipales y por ende de la comunidad”, manifestaron los 25 vecinos en la nota elevada al Ejecutivo y al Concejo.
En tanto, los concejales del FPV resaltaron que “los vecinos y la comunidad de Tandil desarrollan en dicho espacio múltiples actividades recreativas, tales como acampes, excursiones, deportes al aire libre, actividades escolares, recreación familiar, boy scout, zona de paso de mountain bike, tracking, rapel, entre otras”.
Por otro lado, resaltaron que las actividades que se realizan han sido promocionadas en páginas de internet por la Dirección de Turismo y la Asociación de Guías, en el marco del programa Conocer para Preservar en la zona de la cantera Dos Huecos.
“Hacer pública
la información”
Por otro lado, los referentes de la oposición sostuvieron que “frente al reclamo de la comunidad, nuestro trabajo consiste en hacer pública esta información y comenzar a indagar sobre lo sucedido”.
Y reclamaron que “nos parece apropiado que, con celeridad, el Departamento Ejecutivo a través del área de Legales, explique qué actos administrativos y judiciales se han seguido hasta el momento en el problema originado. Por otra parte, pretendemos que se averigüe quién es la persona que ocupa un espacio verde público sin ningún tipo de permiso”.
Finalmente, expresaron que “resulta necesario detener todo tipo de actividad humana que impacte negativamente sobre el entorno serrano y en particular sobre aquellas que produzcan efectos irreversibles sobre el paisaje. Promover la conservación de las áreas de pastizal natural en sierras es una responsabilidad de todos por su valor ecológico, científico recreativo y porque en definitiva debemos preservar nuestro patrimonio natural”.
La donación
Según la Ordenanza 8.176, sancionada el 20 de diciembre de 2000 durante el gobierno de Julio José Zanatelli, se aceptó la donación y el predio fue afectado “como espacio verde público para la creación de un parque temático, histórico, cultural y recreativo para la ciudad de Tandil”, según el proyecto de obra adjuntado en las fojas 25 y 26 del expediente municipal 8.653/2000.
En el artículo tercero se bautiza el lugar como “Parque Antonio y Juana Cinque” y en el cuarto se declara de “utilidad pública” el bien indiviso, pero además se establece que la porción perteneciente a Velia Blanca Cinque y Barletta quedaría “sujeta a compra, donación o expropiación”. u
Este contenido no está abierto a comentarios