Con los estudios de costos, se inicia el debate por un nuevo cuadro tarifario para los micros
El Concejo Deliberante inicia una nueva discusión para definir el nuevo cuadro tarifario del transporte urbano de pasajeros, uno de los temas que enciende los debates más encendidos dentro y fuera del recinto.
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En este caso, la Comisión de Transporte recibió hace algunas semanas los resultados del estudio de costos elaborado por el Instituto Argentino de Profesores Universitarios de Costos (Iapuco) que evalúa las distintas variables para estimar el costo por pasajero y por kilómetro.
Hace unos días, la Cámara de Transporte finalmente presentó su estimación sobre el porcentaje que se debería aplicar al boleto plano en función de una metodología que abarca los costos en insumos, salarios, subsidios, a la vez que considera la cantidad de pasajeros que utilizan el servicio y los kilómetros recorridos.
En esta oportunidad ambas proyecciones arribaron a diferentes resultados a partir de la inclusión de un aspecto por el cambio de esquema que impuso el Gobierno nacional para la designación de subsidios.
Este año dos de los aportes que se reciben quedaron suspendidos a partir del acuerdo paritario que se alcanzó y que se homologó en el Ministerio de Trabajo de la Nación.
Este aspecto fue considerado por la entidad que nuclea a las empresas del sector, que postergó su presentación a partir de esta novedad y efectuó una nueva simulación en el precio del boleto, pero no por el trabajo encomendado por el Legislativo.
Frente a este nuevo esquema el debate se enfocará a la diferencia que marcó el acuerdo salarial, que ronda un 20 por ciento, para compatibilizar criterios. De todos modos, no se descarta otro método de financiamiento para que el desfasaje no lo absorba la tarifa y, en definitiva, el usuario.
Sin porcentajes estimativos, se presume que el boleto plano –actualmente en 11,62 pesos- se ubicará en un valor inferior a los 16 pesos. Sin embargo, la discusión recién comienza.
El lunes la comisión interna accedió a ambos estudios por lo que en el transcurso de la semana entrante habrá nuevos encuentros para avanzar en esta línea y alcanzar un acuerdo para llevarlo a debate en el recinto.
Cambio en el esquema
En diálogo con el ciclo radial “Dulce o amargo” (104.1 Tandil FM) el concejal de Cambiemos, presidente de la Comisión de Transporte, José Luis Labaroní, contextualizó que el Ministerio de Transporte decidió cambiar la forma en que se medía la designación de subsidios y explicó que en la última paritaria que firmó la UTA “agregaron un punto que dice que se va a congelar el subsidio que las empresas recibían para sostener el sistema salarial”.
Esto significa que este año, por ese concepto, se va a recibir el mismo subsidio que el año pasado, alrededor de 76 millones. “El aumento salarial queda afuera del sistema subsidiado”, dijo.
En consecuencia, el estudio de costos solicitado a Iapuco no se contempla esta variable dado que fue incorporada luego de la homologación, condición que llevará a una revisión de los resultados para determinar posteriormente las alternativas de financiación disponibles.
Sin brindar precisiones en cuanto a los potenciales valores para el precio del boleto dijo que “primero tenemos que determinar si el estudio de costos se condice con el que presentó la Cámara de Transporte”.
En otro pasaje de la entrevista expresó que el aumento del boleto “siempre” incluyó las variables de la economía del transporte público; sin embargo una de ellas “se congeló” este año, por lo que será necesario determinar el modo en que se financia “ese segmento que está faltando”.
Y aclaró en esa línea que “no se congelaron todos los subsidios”, sino que “solo es una parte de los cinco tipos distintos de aportes que asisten al transporte urbano”, precisamente el que influye en los sueldos de los choferes.
Frente a este esquema emergería como una alternativa a considerar los beneficios que otorga SUBE y que en Tandil no se perciben por la implementación de un sistema propio (SUMO), dado que podrían aminorar el impacto al igual que la eventual figura de pasajero frecuente.
Equilibrio
Por lo expuesto, el concejal del oficialismo se mostró imposibilitado en definir en esta instancia “si el sistema puede absorber el impacto”.
No obstante, y frente al debate que se avecina, se escudó en la búsqueda de un “equilibrio” entre ambas pretensiones, tratando “siempre de mirar el impacto en el bolsillo de la gente que vive lejos del centro, que es la que más usa el micro”.
Es por eso que se aboca a esta tarea de estudio con el objetivo de hallar un balance entre ambas cuestiones y no descartó buscar una vía de financiamiento. En efecto, la premisa es simple: “Lo que no se financia con subsidios se financia con tarifa”, última opción que debería ser “la menor posible”.
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