El Censo Agropecuario en ejecución muestra concentración de tierras y explotaciones fuera del partido
Debido a problemas en el sistema de gestión el trabajo de campo sufrió postergaciones y finalizará el 29 de marzo. Los productores locales respondieron activamente a las consultas y han logrado relevarse más de la mitad de los establecimientos. Concentración de la tierra y explotaciones en otros territorios son dos de las tendencias observadas en el ámbito local.
Después de 16 años sin registros de esa naturaleza en el país, en 2018 se lanzó el Censo Nacional Agropecuario, con el objetivo de actualizar los datos del sector y poder caracterizar la totalidad de las actividades agropecuarias, forestales y bioindustriales que se desarrollan en el país.
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Sumado a esto, los datos que brinde el censo permitirán generar políticas públicas generales, sectoriales y regionales. También brindará información útil para el diseño de programas específicos orientados a la pequeña producción agraria, a la agricultura familiar, a las comunidades indígenas y a la superación de la pobreza rural.
Pero debido a problemas técnicos y dificultades en la gestión operativa -completamente digitalizada en esta ocasión- el trabajo de campo, que comenzó el pasado 15 de septiembre en todo el territorio nacional, sufrió dos aplazamientos. La actividad censal tenía un plazo inicial de finalización el 30 de noviembre pero por motivos vinculados a dificultades en el sistema de carga de datos, no se pudo terminar en el espacio de tiempo estipulado y se prorrogó hasta el 31 de diciembre. La persistencia de los problemas y la escasa superficie cubierta en todo el país obligó a postergar las tareas hasta el 29 de marzo de 2019.
“En el caso concreto de Tandil el operativo se ha desarrollado bastante bien, a la fecha llevamos cubierto un 60 por ciento de la superficie del partido y creemos que vamos a llegar a cumplir con tranquilidad el 100 por ciento del barrido de superficie a la fecha límite”, explicó Guillermo Corbetta, supervisor del censo a nivel local, quien conversó con El Eco de Tandil y ofreció precisiones sobre el desarrollo del trabajo desplegado por los 6 censistas en toda el área rural, teniendo en cuenta que es pasible de ser censada toda superficie que supere los 500 metros cuadrados, destinada a una actividad agropecuaria ejecutada en el periodo de referencia que va del 01/07/2017 al 30/06/2018.
La disponibilidad de los productores
“Los problemas en el sistema de gestión son menores pero siguen existiendo, hay algunas dificultades en las tablets que les brindaron a los censistas, se han solucionado algunos inconvenientes y de alguna manera lo vamos llevando adelante”, señaló.
Según recalcó, a diferencia de otros operativos, este censo ha contado con una excelente predisposición de los productores para poder realizarlo, bastión fundamental para lograr la concreción del cometido. Si bien las entrevistas son más extensas de lo que se calculaba inicialmente -duran dos o tres horas-, y en algunos casos han tenido que efectuarse de manera desdoblada, la circunstancia fue comprendida y aceptada por los implicados. “De alguna manera el productor accedió con ganas a poder realizarlo, en mi caso he participado de los dos censos previos, 2002 y 2008, varios años en la Encuesta Nacional Agropecuaria y esa predisposición no era tan visible como es este año. En este operativo la población censada ha contribuido mucho”, manifestó.
Además, para darle un impulso, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) emitió el año pasado un comunicado extensivo a todos los bancos del país para exigir que todos aquellos productores que tengan carpetas crediticias en las entidades presenten el comprobante de cumplimiento censal para mantener vigente la ayuda financiera y las prestaciones correspondientes.
El supervisor local reconoció que a partir de esta novedad muchos productores del sector se acercaron al equipo para efectuar el censo. “Para nosotros es de una gran ayuda esta medida”, destacó.
Las bondades del suelo y el clima posibilitan que esta región sea un polo atractivo por la multiplicidad de actividades ligadas al agro que pueden realizarse con éxito. “Tandil tiene la virtud de ser una región fundamentalmente mixta donde todos los tipos de explotaciones son viables; hay ganadería de cría, de engorde, hay tambo, agricultura, horticultura, floricultura, forestación, explotaciones aviares, porcinas. Es indudablemente una zona privilegiada porque todo es posible de realizar, por eso creo que mucha gente elige esta zona para radicarse y trabajar”, argumentó Corbetta.
Menos dueños para igual superficie
El censo consta de 6 módulos: información general de la explotación, uso del suelo, existencias ganaderas, instalaciones, prácticas de manejo agrícola e información del personal residente y laboral.
A priori, de acuerdo a la información disponible del último relevamiento, se contabilizaban unos 1000 productores en el partido. Las observaciones actuales indican que la cantidad es menor porque se registra una tendencia a agrupar establecimientos, lo que redunda en menos productores en la misma superficie territorial. “Llegamos a los 400 entrevistados y creemos que puede llegar a haber unos 300 más. De la base teórica de 1000 estaremos en 700 u 800 productores entrevistados en el partido”, indicó.
De esto puede deducirse que hay una inclinación hacia la concentración de la tierra. Desde el censo 2002 -porque el de 2008 tuvo una serie de inconvenientes y no pudo ser tenido en cuenta- los números indican que ha habido cierta concentración de las hectáreas disponibles para explotación en todo el país, y en Tandil este comportamiento también se ve reflejado.
Otro dato significativo que se desprende del trabajo efectuado es que muchos de los productores que poseen establecimientos o residen en la ciudad también tienen explotaciones fuera del ámbito local e inclusive fuera de la Provincia, detalle que permite analizar que Tandil es un centro de residencia y administración de una superficie que excede a las 450 mil hectáreas que conforman el partido.
“Si contamos las hectáreas relevadas superamos la superficie misma del partido, porque contamos extensiones de tierra por fuera que pertenecen a una misma explotación, y nos falta censar el 40 por ciento todavía”, apuntó el supervisor.
La información obtenida por los censistas es elevada a la Dirección Provincial de Estadísticas que los hace llegar al Indec (Instituto Nacional de Estadísticas y Censos), el organismo nacional responsable en la ejecución del relevamiento que emite los informes pertinentes.
Luego del procesamiento de datos y la interpretación de los mismos, la dependencia produce un informe preliminar que suele listo estar a los 90 o 120 días de finalizado el censo, y un informe final que anteriormente se emitía a los dos años de haberse terminado el trabajo de campo. Debido a la informatización de los procesos resulta probable que ahora esos dos años se reduzcan y se pueda disponer en menor tiempo de la información recogida.