En el ámbito privado disminuyeron considerablemente las consultas y los testeos de Covid-19
Los laboratorios particulares registraron una merma en la demanda de hisopados y cambió el tipo de paciente; si antes eran personas con sintomatología, ahora la mayoría son pacientes que necesitan el resultado del test para realizar algún viaje, trámite o actividad. Se incrementaron además las pruebas serológicas para saber si la persona estuvo en algún momento en contacto con el virus.
En el último tiempo, de acuerdo a los partes oficiales, la cantidad de testeos y de casos positivos disminuyó a nivel local, tendencia que el sector privado también registra.
Recibí las noticias en tu email
El doctor en bioquímica Matías Molina, de Laboratorio ABM, conversó con el programa de radio “Cosas que pasan” (104.1 Tandil FM) y aseguró que luego del pico que se vivió dos meses atrás –con una gran demanda de hisopados-, en la actualidad la cifra de consultas por este tipo de estudios descendió notoriamente, a la par de los casos positivos notificados por el ámbito privado.
Vale reseñar que el parte médico del Sistema Integrado de Salud Pública incluye en su estadística los resultados reportados por los laboratorios particulares. Y mientras que en los meses de septiembre, octubre y parte de noviembre llegaron a registrarse un promedio de 20 casos positivos diarios provenientes del área privada, ahora la tendencia se revirtió.
“Aparecieron otro tipo de consultas y ahora hay un futuro incierto con respecto a lo que sucederá con las vacaciones. Lo cierto es que desde el principio la situación ha sido muy dinámica y todo va cambiando”, expresó.
Demanda fluctuante
Si bien en abril, periodo más restrictivo de la cuarentena, cayó notablemente el número de personas que se acercaban al laboratorio por otro tipo de análisis clínicos, y pese a que las consultas en el sistema sanitario tanto estatal como privado por otras patologías se resintieron durante este año, el especialista sostuvo que a esta altura están operando al 80 por ciento de lo que era el ritmo habitual antes de la pandemia.
La demanda durante los más de ocho meses que pasaron desde que se declaró la pandemia de coronavirus fue muy fluctuante y aparecieron, además de diversos efectores para realizar este tipo de estudios y también surgieron diferentes metodología de análisis.
Además, ponerse a tono con las exigencias que planteó este insólito escenario epidemiológico, implicó para el privado potenciar estudios que antes sólo realizaban como investigación y tuvieron que aceitar todo un nuevo esquema operativo. Al respecto, consideró que se pudieron sortear dificultades como la falta de reactivos, de insumos y también la falta de tiempo, porque cada análisis requiere de muchas “horas hombre” de trabajo.
A esto se suma que varias obras sociales comenzaron a incorporar a su cobertura el PCR o los estudios relacionados con el Covid-19, lo que implicó también cambios administrativos para poder responder en tiempo y forma toda la demanda.
Pruebas y diagnósticos
En tanto, explicó que la prueba conocida como PCR –hisopado- permite saber si la persona está infectada con el virus en ese momento, pero además existen estudios serológicos que muestran si la persona estuvo contacto en el pasado con el Covid-19 y su sistema inmunológico desarrolló anticuerpos.
“Ahora es más frecuente la consulta por el estudio de anticuerpos que hace dos meses o un mes. Durante el pico de contagios la gente quería saber si estaba infectada o no”, expuso Molina.
En este momento se siguen realizando las pruebas, pero prevalecen los estudios que no tienen carácter diagnóstico en los que el paciente no presenta síntomas ni sospecha estar contagiado, pero se quiere evaluar igual porque necesita los resultados para efectuar algún tipo de trámite, para viajar a ciertos lugares, o para visitar a alguna persona de riesgo.
“Era muy común al principio y ahora lo estamos volviendo a ver, pero hasta el mes pasado estuvimos saturados por pacientes con sintomatología, llegamos a tener 200 consultas por día”, cerró Molina.