Integrante del eje “Tandil accesible” advierte la necesidad de promover acciones directas en el tránsito
“Debemos tomar las decisiones hoy porque el futuro se ha hecho presente”, dijo Juan Antonio Bilbao, referente en materia de transporte quien criticó la postura de los comerciantes de calle Quintana que lograron doblegar los cambios en el estacionamiento sobre dicha arteria.
Luego de conocerse los cambios de circulación para Quintana que el Concejo Deliberante votó en la última sesión legislativa, la voz de uno de los referentes de movilidad urbana, que participa del eje “Tandil accesible” dentro del Acuerdo del Bicentenario, puso especial énfasis en la necesidad de institucionalizar los debates que se dan en ese marco.
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La mirada de Juan Antonio Bilbao, asesor de la Cámara de Transporte, llega tras advertir que los vecinos de la arteria principal que atraviesa el corazón de Villa Italia tuvieron injerencia directa a la hora de inclinar la postura de los ediles que recogieron el argumento vecinal y procuraron delinear una política de tránsito ajustada a los avatares de la coyuntura económica.
En diálogo con El Eco Multimedios, el referente de transporte aseguró que “las propuestas que se debaten en relación al tránsito en la ciudad deberían ser institucionalizadas para que no queden como simples recomendaciones que luego van a parar a la basura”.
Atento al pedido que realizaron los comerciantes de calle Quintana, Bilbao evaluó que han efectuado una solicitud “de pueblo, porque ellos creen que si la gente estaciona en el frente van a vender más, cuando en realidad, como consumidores no nos importa caminar si el producto es bueno y está en precio”.
“La posición de los comerciantes siempre fue la misma en todas las ciudades, cuando en realidad no interpretan que los cambios van en sentido de racionalizar el tránsito”, añadió, al tiempo que abogó por la realización de una campaña de difusión por parte del Ejecutivo sobre los conceptos de transformación de ciertos aspectos de la organización urbana.
Por otra parte, mostró cierta incomodidad con las decisiones que deben tomarse de fondo y se diluyen en debates, y argumentó que “las normas de regulación tienen que darse en el corto plazo, con acciones directas porque si no el costo social es muy grande para Tandil que hoy aún tiene calidad y por ello es elegida”.
En este sentido, Bilbao sostuvo que la congestión urbana impacta de lleno y provoca la pérdida en los atractivos de la ciudad ya que disminuye la velocidad media de circulación con el consiguiente aumento del tiempo de viaje de los usuarios de los medios públicos y privados.
A su entender, esto representa un valor económico, que es aquel que los usuarios estarían dispuestos a pagar por disponer de más tiempo para su distracción, descanso o estudio.
Explicó también que la reducción de la velocidad media de los vehículos automotores aumenta el costo del combustible por mayor consumo. “El impacto más importante lo sufren los medios públicos que por reducción de las velocidades medias, requieren mayores inversiones en equipos para mantener determinados niveles de oferta, circunstancia que incide en los costos y consecuentemente en las tarifas”, concluyó.
Cabe recordar que como integrante del núcleo temático denominado “Tandil accesible”, Bilbao ha incorporado una visión basada en cuatro ejes principales cuyo objetivo busca promover el ordenamiento en la movilidad urbana.
Para ello, entre sus consideraciones, el referente en materia de transporte suscribe que la Municipalidad debe impulsar un plan a futuro donde se proyecte más espacio para el peatón, para los ciclistas, para el transporte público y más espacios verdes.
Entre los puntos a abordar, enumera la necesidad de acordar un pacto de movilidad entre los vecinos y las instituciones de la ciudad, “donde todos se comprometan a cambiar muchas costumbres y a transformar las maneras en que circulamos, optimizando los espacios para que todos que estemos más cómodos y para que exista menos riesgo en cómo nos trasladamos”.
Las propuestas
Antonio Bilbao detalló que los proyectos del Plan de Movilidad “deben estar orientados a realizar intervenciones diferenciadas según las zonas de la ciudad”.
A manera de propuesta, sugiere renovar y refuncionalizar el micro y macrocentro; consolidar las principales avenidas como corredores troncales de circulación, con carriles exclusivos para el transporte público (eje al cual se le debe dar prioridad con el objeto de mejorar su operatividad) con la finalidad de ganar eficiencia y optimizar los costos, logrando así reducción en las tarifas.
Advierte además, la necesidad de incorporar tecnologías para resolver algunos problemas relacionados con la señalización urbana, los senderos seguros hacia escuelas o en la zona de boliches, el control inteligente y la coordinación de semáforos para resolver algunos cruces conflictivos incorporando sistemas de luces accionadas por demanda con el fin de minimizar los tiempos de espera de los usuarios que arriban a las intersecciones.
Estos lineamientos permitirían controlar la incipiente pero creciente contaminación urbana, y mejorar los índices de siniestralidad vial para reducir la cantidad de víctimas fatales en el sistema vial urbano y los heridos por accidentes de tránsito.
“Los ejes expuestos se presentan como una herramienta que debe servir de base al Gobierno municipal para generar acciones y políticas tendientes a abordar la problemática de los accidentes de tránsito en el área urbana, poder intervenir, distinguiendo aquellas situaciones más críticas que tiene la ciudad: por qué se producen, en dónde, y por lo tanto, trabajar para reducir el nivel de siniestralidad”, puntualizó Bilbao.