La cuarentena de los niños, una versión donde los protagonistas cuentan cómo la están pasando
La familia unida y en su casa, con tiempo y disponibilidad para jugar es uno de los mejores planes para los más chicos. Algunos aprendieron nuevas canciones, otros a manejar y otros debieron pasarlo lejos de casa, en otra Provincia. La mayoría extraña a sus amigos y espera a que todo pase para verlos. Cada uno con su historia, pero atravesando lo mismo que todos los tandilenses.
Dicen que los más chicos son los que más fácilmente se han adaptado esta disposición que trajo aparejada la pandemia de coronavirus con el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Quedarse en sus casas no ha sido un problema para los más bajitos, ya que la alegría de compartir más tiempos con sus padres los une a todos como un común denominador.
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Claro que extrañan sus amigos, abuelos, primos y asistir a la escuela, pero para eso se han vuelto casi expertos en las videollamadas y los recursos tecnológicos que no solamente les permiten acercarse a los seres queridos, sino también seguir instruyéndose.
Así, chicos de entre tres y trece años han contado cuáles son las cosas que más han disfrutado en esta cuarentena y qué es lo que menos les gustó. Además, revelaron qué harán ni bien termine este período y puedan salir.
Lejos de casa
Emmanuel está a un mes de su cumpleaños número cuatro y el aislamiento social, preventivo y obligatorio lo encontró fuera de su hogar junto a su familia.
El niño le contó a El Eco de Tandil que está atravesando esta cuarentena lejos de casa, de los juguetes y de los gatos. Es que se habían ido de viaje a Catamarca, para visitar a sus abuelos paternos, Cesarcito y Beticita.
Así que estos días los está pasando con ellos, sus papás y con Luna, la perrita que les hace compañía, y con la tortuga.
Una de las cosas que disfruta y le gusta de estar allá durante este aislamiento es poder jugar con Lisa, una prima que vive cerca. Pero hay algo que no le gusta y los dijo con toda sinceridad: ¨No me gusta compartir¨.
Algunas de las cosas que aprendió estando en Catamarca fue a jugar a las escondidas. Además, contó que para sentirse más cerca de sus amigos del jardín a veces hacen video llamadas, como con sus tíos y abuela materna. Eso es algo que le encanta!
¨Lo primero que voy a hacer al salir es correr en la plaza¨, contó Emmanuel .
Jugar y compartir en familia
Antonia y Vito son hermanos, ella está a un día de cumplir cinco años y el tiene dos. Están atravesando esta etapa en su casa, junto a sus padres.
A los dos lo que más les gusta es jugar con la familia, aunque claramente extrañan ir a la casa de sus amigos y abuelos. Estos días, además de jugar y compartir, han servido para incorporar nuevos conocimientos. En el caso de Antonia, contó que aprendió a que no se puede salir de la casa porque está el coronavirus, también a hacer empanadas y una canción en inglés.
Ella está en edad de jardín, y si bien reciben algunas actividades, las van haciendo a medida que pueden y en familia, pero no tienen un horario estipulado para eso.
Por otro lado, los chicos también se han adaptado a la modalidad digital para acercarse a los suyos, y así contaron que utilizan Zoom para saludar por cumpleaños y realizan videollamadas.
Lo primero que van a hacer cuando todo pase, aseguraron que será ir a comer a la casa de sus abuelos, a la plaza y ver amigos.
Experimentos raros y desorden
Helena tiene cinco años, vive unos días con su papá Matías y otros con su mamá Lorena mas sus dos hermanos.
Lo que más disfruta es jugar a las cartas, al pinche, y al chancho, hacer experimentos raros que impliquen mucho desorden y jugar a la cocina con sus muñecas. También disfruta de aprender letras y números.
Contó que no le gusta estar encerrada, quiere salir aunque esté feo y jugar un rato a la pelota o andar en patines en el patio. Además, le aburre a veces no encontrar que hacer, y siempre le pide al papá que juegue con ella, porque sino se enoja.
Lo que descubrió con está cuarentena fue el vínculo con la tecnología, su papá contó que antes no la dejaba mucho jugar o mirar videos, pero ahora con tanto tiempo disponible le dio un celular viejo para jugar y ver videos de baile.
Como está en salita de cinco, todavía no tiene mucha tarea, pero igualmente un rato del día siempre se sienta a practicar números y letras, además de pintar y hacer actividad física, como bailar.
A Helena le encanta hacer videollamadas con familia o amigos y ya aseguró que cuando termine esto va a salir a hacer un montón de cosas, como ir al club a jugar hockey, ir a clases de baile, a visita a sus primos que los ¨re extraña¨ y a la plaza a jugar.
La segunda cuarentena de su vida
Mariano tiene tres años y está pasando el aislamiento con su mamá y su papá en la localidad de De la Canal, pero ya vivió una situación similar ni bien nació.
Según dijo, disfruta mucho de jugar al fútbol, pero no le gusta no poder entrar al almacén de dónde vive. Además, al principio de la cuarentena preguntaba por qué no podía ir al jardín, y aunque ahora ya se acostumbró, le encanta recibir las tareas y resolverlas en familia.
Durante estos días recurren a la tecnología para contactarse con sus abuelos que viven en Azul, sus tíos y primas. También usa la compu para las actividades del colegio y una clase virtual con su señoritas y compañeritos.
Contó que lo primero que quiere hacer al salir de la cuarentena, es volver a ir al Jardín.
La mamá de Mariano, Catalina, reveló que el nació con Cardiopatía congénita y fue operado de corazón, el cual quedó bloqueado, por eso tiene un marcapaso.
¨Su primer año de vida, desde noviembre 2016 a octubre 2017, hicimos la cuarentena que actualmente se hace por la pandemia, con todas las medidas de higiene y prevención¨, explicó la mamá. Así, se lavaban las manos, usaban alcohol, se bañaban al volver de cualquier lugar público y las visitas eran limitadas. O sea que es la segunda cuarentena de este niño que, como dijo Catalina, ¨sólo él la luchó en el quirófano cinco veces¨.
“El corona nos molesta y no nos deja salir”
A Nina le queda poco tiempo para cumplir cuatro años y espera poder festejarlo con sus amiguitos, aunque sabe que quizás no sea posible.
Ella vive en el campo con sus papás, su hermanita Lola y su tío, y los primeros 40 días de aislamiento también los pudo vivir con sus abuelos paternos.
Una de las cosas que más le gusta es estar al aire libre, ya sea en bici o en la “hamaca loca”, pero no le gusta que sus perros ladren a los autos que pasan por el camino. ¨Lo que menos me gusta es que este corona nos esté molestando a todos y no nos deje salir¨, dijo.
En estos días aprendió que no se puede salir, además dibujó mucho y se divierte en la ¨hamaca loca¨. Algunas veces hace video llamadas con su ¨”Abu” que está en Corrientes y quiere siempre hablar con Edu, Tuti y su madrina Delfi.
¨Lo primero que voy a hacer cuando pueda salir es ver a Maite, Antonia y Manuela, y a jugar a la plaza¨, dijo al niña.
Rutinas deportivas para no extrañarlas
¨Soy Sacha, tengo 10 años y estoy en mi casa con mamá, papá y mi hermano León, que es más chico¨, contó a El Eco de Tandil.
Según contó, a ella le gusta la cuarentena, porque tiene más tiempo de hacer cosas que antes no podía y, además, está más en familia que antes. Sin embargo, como le pasa a todos, hay una parte que no le gusta y es no puedo ver a amigos, familiares ni hacer deportes. Aunque se organizó y desde su hogar hace rutinas deportivas para no perder el ritmo.
En estos días, confesó que aprendió sobre vacunas y añora volver a practicar deporte, estar con amigos y volver a la escuela. ¨A la tarea le dedico un poco de tiempo, aunque ya la terminé toda¨, aseguró Sacha.
Ella también usa el celular para llamar a familiares, mientras que todos los miércoles se conecta a Zoom para asistir a sus clases de la escuela.
¨ Lo primero que voy a hacer cuando termine la cuarentena va a ser reunirme con amigos, hacer una piyamada y dar una larga vuelta al dique con mi mamá¨, aseguró.
Aprender a manejar y cocinar
Pedro y Suyana son hermanos, algunos días de esta cuarentena están pasando con su mamá en la zona de La Porteña y otros días con su papá, que vive en el campo.
Pedro tiene 13 años y explicó que se reparten por semanas, y que además tiene muchos hermanos con los que pasa esta etapa.
“Lo que más disfruto es la cantidad de tiempo que tengo, pero lo que no me gusta es no poder charlar cara a cara con mis amigos. Aunque esto no me afecta tanto porque nos llamamos bastante”, contó el joven, que entre los conocimientos incorporados durante estos días aprendió, nada más y nada menos, que a manejar. “No salí de casa, en el campo de mi papa hay potreros”, aclaró. Además, sumó que le gustaría aprender Quenya; un idioma especialmente creado para la tierra media de Tolkien.
Ya en secundaria, agregó que tiene bastante tarea; aunque muchísimo menos que si iría a la escuela, y confesó que no tiene muchas ganas de hacerla. Al respecto, reveló que prefiere tener nueve horas de clases,. que es más o menos los que tendría yendo a la escuela, a tener tarea en su casa, porque consideró que le saca tiempo la interacción social, ya que no conoce a más de la mitad de los profesores.
A través de las tecnologías participa de las actividades escolares, pero además utilizó algunos recursos para hablar principalmente con amigos, y también con familia. “Cuando la cuarentena termine, ansío sobre todo reencontrarme con mis amigos e ir a la escuela”, contó.
En tanto que su hermana Suyana, de 11, dijo que lo que más disfruta es no levantarse tan temprano para ir a la escuela y que tiene más tiempo para hacer otras cosas. Sin embargo, no le gusta la parte de no poder ver a sus amigos ni ir a algún lugar.
“Cociné muchas recetas que ya sabía y aprendí muchas más, por ejemplo trufas, choco torta, medialunas, fideos caseros, doritos, ñoquis, empanadas, palmeritas, entre otros”, enumeró al referirse a los nuevos aprendizajes.
Por otro lado, contó que tiene bastante menos tarea de la que tendría si fuese a la escuela, aunque al igual que su hermano, tiene menos ganas de hacerla. En estos días, whatsapp se ha vuelto un gran aliado, ya que es canal de conexión con tíos, amigos y abuelos. Lo primero que hará será ver a sus amigos, compañeros y familiares no tan cercanos.
Jugar entre hermanas
Simona e Ignacia son hermanas, la primera está a punto de cumplir siete años y la otra tiene cuatro. Ellas están atravesando este aislamiento social, preventivo y obligatorio junto a sus papás.
¨Yo en la cuarentena salto la soga, me divierto con Nachi jugando a las muñecas y, cuando hace calor, juego al fútbol afuera con mi papá¨, detalló la mayor. Que además, contó que hace la tarea que le mandan desde el Colegio.
Por estos días se dedica mucho a leer y pintar libros, aunque confesó que extraña mucho a sus amigas.
Mientras que Nachita, como llaman a la menor, aseguró que la pasa muy bien en la cuarentena jugando con su perro, sus papás y su hermana, aunque dijo que extraña a su ¨Seño¨.