Le quitaron la pensión por discapacidad, el único ingreso de su hogar
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Pedro Miguelez, un vecino que cobraba la pensión por discapacidad desde el 15 de diciembre de 2015, por sufrir Parkinson, recibió la noticia de la suspensión el 1 de junio. El monto de 4.100 pesos que se sumaba al salario por cada uno de sus hijos era el único sostén del hogar.
Para acceder al beneficio debió presentar los certificados de médicos y la documentación necesaria para justificar su condición frente a la oficina de Desarrollo Social de la Nación. Luego de acercarse al Banco Industrial el primer día del mes y descubrir que no le había sido depositado ningún dinero, recurrió a Anses, donde se le informó que debía acercarse a Desarrollo Social. Allí se enteró de que el pago se encontraba suspendido, pero no se le proveyó ningún tipo de justificación.
Al parecer, para gozar del beneficio de la pensión es necesario contar con un 70% de incapacidad, por lo que el 49% que figura en el expediente que afecta a Miguelez no es suficiente para cobrarla. Sin embargo, su médico asegura que tiene un 85%, que se suma a una operación de columna, practicada el año pasado.
A causa de ello debió presentar nueva documentación respaldatoria de su condición y deberá esperar mínimamente dos meses para obtener una nueva respuesta, para conocer si volverá a cobrar la pensión. La carencia de un sostén lo obligó a recurrir a la asistente social del barrio, quien la ayuda con mercadería con lo más esencial, aunque recientemente lamentó el corte de la luz porque no pudo pagarla.
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