Los resultados de la prueba Aprender en Tandil reflejan mejores porcentajes en la tercera edición
Se trata del dispositivo nacional de evaluación de los aprendizajes de los estudiantes. En el orden local, se relevaron escuelas primarias en contenidos en lengua y matemática. En términos generales, las cifras demuestran un avance en comparación con la primera experiencia y se ubican en mejor escala en cuanto a los resultados en la provincia y en el país.
En octubre del año pasado se llevó adelante una nueva edición de la prueba Aprender, el dispositivo nacional de evaluación de los aprendizajes de los estudiantes. En esta oportunidad, se midió el conocimiento en lengua y matemática de los alumnos de 6to. grado de las escuelas de educación primaria del país.
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El objetivo es obtener y generar información de calidad para conocer los logros alcanzados y los desafíos pendientes en torno a los aprendizajes de los estudiantes y, de esta manera, aportar información que contribuya a procesos de mejora educativa continua y a disminuir las brechas de desigualdad educativa.
Los datos, a los que tuvo acceso El Eco de Tandil, permiten observar un progreso en cuanto a los resultados si se lo compara con el rendimiento obtenido en 2016, año en que se llevó adelante la primera experiencia.
En concreto, según las cifras oficiales, un 82,1 por ciento resolvió en forma satisfactoria los contenidos propuestos durante el examen en lengua contra el 70,1 por ciento de hace dos años. Mientras que en matemática el nivel de aprobados fue de 68,1 por ciento contra un 67,4 por ciento.
La brecha de desaprobados también evidenció mejoras en lengua dado que se redujo de 29,9 por ciento a 17,9 por ciento.
La misma línea, aunque menos marcada, se mantiene en matemática, donde el porcentaje de estudiantes que no logró superar los objetivos pasó de 32,6 a 31,9 en 2018.
Los resultados en Tandil
En detalle, el desempeño de los estudiantes de nivel primario en el distrito en lengua refleja que el 82,1 por ciento alcanzó resultados satisfactorios y que el 17,9 por ciento no lo hizo, lo que demuestra una mejor situación si se la compara con los logros obtenidos a nivel provincial y nacional, donde las cifras resultan inferiores (75,5 y 75,3 respectivamente).
En matemática la tendencia se mantiene. Un 68,1 por ciento de los estudiantes que respondió el cuestionario en esa materia aprobó. El porcentaje de desaprobados es de 31,9 en las escuelas relevadas de Tandil, y se ubica por debajo de la media obtenida a escala provincial (43,7) y nacional (42,6).
Comparativo
Por otro lado los datos obtenidos permiten comparar los resultados de la prueba aplicada en 2016 con los de 2018, los cuales reflejan una mejora en los años en que se llevó adelante la experiencia.
En lengua, un 70,1 por ciento de los jóvenes tandilenses aprobó durante la primera experiencia, mientras que el año pasado lo hizo un 82,1 por ciento.
En matemática, el nivel de desempeño marca que el 67,4 por ciento de los estudiantes logró resultados favorables en 2016 y en 2018 el porcentaje trepó a 68,1 por ciento.
En la provincia
En la provincia de Buenos Aires participaron 5.236 escuelas primarias, de las cuales 3.604 son de gestión estatal y 1.632 privada, mientras que el índice de participación de establecimientos educativos alcanzó el 95.7 por ciento, superando con esa cifra la evaluación de 2016, que fue del 93.3 por ciento.
En total el año pasado participaron 205.368 estudiantes del nivel primario, que se refleja en un porcentaje del 74.9 por ciento durante la prueba Aprender 2018. La cifra también marcó un incremento en relación a la experiencia que se llevó a cabo en 2016, que fue del 69.3 por ciento.
En lengua
En relación a los resultados nivel provincial en lengua, el 35,5 por ciento obtuvo un desempeño avanzado; el 40 por ciento satisfactorio; el 17,3 por ciento básico y un 7,2 por ciento por debajo del básico.
El 75,5 por ciento de los estudiantes alcanzó niveles de desempeño satisfactorio y avanzado, mientras que un 7,2 por ciento se ubicó por debajo del nivel básico.
En 2018, el 75,5 por ciento de los alumnos obtuvo un desempeño satisfactorio y avanzado.
El grupo de estudiantes que se ubicó en los niveles de desempeño satisfactorio y avanzado creció 8,5 puntos porcentuales respecto a los resultados obtenidos en Aprender 2016. Es decir, pasó de 67 por ciento a 75.5 por ciento.
Asimismo, reflejó una disminución de 7,3 puntos porcentuales el grupo de estudiantes ubicado en el nivel por debajo del básico respecto de Aprender 2016. En efecto, pasó de 14,5 por ciento a 7,2 por ciento.
En matemática
En los contenidos sobre matemática, el 18,3 por ciento logró un desempeño avanzado; un 38 por ciento satisfactorio; el 23,6 por ciento básico; y un 20,1 por ciento por debajo del básico.
El 56,3 por ciento de los estudiantes alcanzó niveles de desempeño satisfactorio y avanzado, mientras que el 20,1 por ciento se ubicó por debajo del nivel básico.
El grupo de estudiantes que quedó englobado en los niveles de desempeño satisfactorio y avanzado disminuyó 1,3 puntos porcentuales respecto a los resultados obtenidos en Aprender 2016.
En función de los resultados se observó una disminución de 0,3 puntos porcentuales el grupo de estudiantes en nivel básico, mientras que aumentó 1,6 puntos porcentuales el grupo de estudiantes ubicado en el nivel por debajo del nivel básico respecto de Aprender 2016.
Mejores índices en 2018
El director general de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires, Gabriel Sánchez Zinny, destacó que las pruebas Aprender son “más que una evaluación; son la herramienta que nos permite conocer cómo están aprendiendo nuestros alumnos y cuáles son las estrategias y decisiones que tenemos que implementar para poder mejorar”.
E indicó que los primeros resultados en 2016 revelaron las dificultades en materia de aprendizaje. Los datos que arrojó una nueva experiencia indican “mejoras” en lengua en relación a 2016.
“Pasamos de 67 por ciento a un 75,5 por ciento el porcentaje de alumnos evaluados que aprobaron, lo que representa un crecimiento del 8,5 puntos porcentuales”, subrayó el funcionario, que marcó que además “disminuyó la desigualdad educativa” ya que “se redujo a la mitad el porcentaje del grupo de estudiantes ubicado en el nivel por debajo del básico, respecto del 2016, pasando del 14,5 por ciento al 7,2 por ciento”.
Sánchez Zinny destacó como “gran dato” la mejora observada en aquellas escuelas con mayor vulnerabilidad socioeducativa, que integran la Red de Aprendizaje.
La comparación entre 2016 y 2018 para este grupo de escuelas indica que “el número de estudiantes aprobados en lengua se incrementó en 10 puntos porcentuales”. Y además, en términos de inclusión, “disminuyó significativamente” la cantidad de chicos que se desempeñaban en la categoría por debajo del nivel en esta prueba.
“En 2016 era cerca de un 20 por ciento y en los resultados de 2018 ese porcentaje se redujo a la mitad”, señaló el funcionario.
Implementación de políticas
“Las políticas educativas enfocadas en los alumnos, en sus aprendizajes, son las que marcan y consolidan el camino hacia una educación de calidad, que genera movilidad social e igualdad de oportunidades”, expresó el director general de Cultura y Educación bonaerense.
En esta línea, se implementaron estrategias enfocadas en intensificar la capacitación docente, la actualización de los diseños curriculares “con objetivos de logros concretos y la implementación de nuevas metodologías de enseñanza”.
“Los datos de las pruebas Aprender no sólo le sirven a un gobierno para diseñar estrategias o planes, sino también a las escuelas”, enfatizó y marcó que el año pasado más del 70 por ciento de las instituciones educativas tomó su reporte de resultados para trabajar en la mejora de los aprendizajes de sus alumnos. “Comprendiendo lo positivo de contar con información sobre el rendimiento de los estudiantes en su escuela”.