Nuevamente la UTA prohibió la salida de Río Paraná, y al conflicto se suman las líneas de El Rápido
El Sindicato Unión Tranviarios Automotor (UTA), seccional Mar del Plata, decretó ayer un paro por tiempo indeterminado en la empresa El Rápido, suspendiendo todos los servicios programados a partir de las 13. Según explicaron desde el gremio, los motivos de la medida responden a incumplimientos varios, entre ellos, el retraso en el pago de salarios. Por otro lado, desde Río Paraná tuvieron que dar pasos atrás y volver a frenar su rutina tras no terminar de definir la llegada de los móviles prometidos.
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Esta vez el motivo planteado por el gremio correspondería a que no basta con la implementación de 10 o 20 unidades nuevas si las restantes van a continuar en el mismo mal estado. Además, alegan tener la planilla que indica que hay trabajadores sin terminar de cobrar el sueldo. En este sentido, y ante un nuevo intento de encontrar una solución al conflicto, trascendió que el titular, Mario Morel, habría viajado a Mar del Plata.
Así es que las ventanillas comerciales de la Terminal de Omnibus local de ambas firmas permanecieron cerradas, a la espera de novedades por parte de la UTA, de igual modo que en la ciudad balnearia de Mar del Plata en el caso de El Rápido, donde se encuentran sus oficinas centrales.
“Ahora la excusa sería los coches viejos que siguen en funcionamiento y la demora en llegar de la nueva flota”, comentó José Suarez, delegado de Río Paraná. “Paran la empresa hasta que no esté todo concretado”.
Las razones
del paro
En diálogo con El Eco de Tandil, el secretario gremial Adrián Giménez confirmó en primer lugar el paro, que se efectivizó a partir de las 13. Sobre los motivos que incumben a la compañía marplatense, enumeró que “es por falta de pago, unidades e irregularidades con cuotas atrasadas”.
Detalló que ya venían hablando con la empresa, poniéndola al tanto de la situación, pero ahora se desbordó y no quedó otra que tomar una medida de fuerza.
Giménez contó luego que estaba viajando para Tandil para corroborar no solo que los servicios de El Rápido programados para la tarde no salieran, sino también para constatar la situación en Río Paraná, que cayó en la misma mala suerte.
“Son empresas que en su momento ya se veía venir que, si no cambiaban la política, no iban a funcionar”, expuso.
La deuda de El Rápido
Puntualmente en El Rápido, Giménez indicó: “Estamos hablando que tendría que haber depositado el pago el cuarto día hábil, hoy estamos al día 20 y la cuota con la que tendría que haber cumplido, no está”.
Aseguró que “a ello hay que sumarle la circunstancias que están atravesando los compañeros en los viajes con las unidades, que no están en condiciones. No tienen repuestos en los talleres, administrativamente no está funcionando. Hay muchas irregularidades”.
Sobre los trabajadores afectados en este caso, el secretario gremial indicó que son aproximadamente 310, ya que tiene muchos ramales en la provincia. Mientras que otros números indican que para el día de ayer solo en la ciudad de Mar del Plata la empresa tenía previstos 75 servicios, entre 37 salidas y 38 llegadas. Hasta las 13.15, hora en la que iniciaron la protesta, solo se habían cumplido 18 salidas y 19 llegadas.
La situación
en Río Paraná
Por otro lado, Giménez también se refirió a la complicada situación que atraviesa la empresa tandilense de larga distancia. Ya que al momento del contacto aún no había arribado a esta ciudad, no se había desatado la nueva imposibilidad de circulación, sin embargo ya en la comunicación aclaró que no descartaba una nueva medida de fuerza en caso de constatar incumplimientos al acuerdo arribado en las últimas horas, tras el último paro decretado el viernes. Hecho que finalmente sucedió al visitar la compañía y realizar el relevamiento correspondiente.
Esta vez, el conflicto se había destrabado tras las intensas negociaciones que encabezó durante el fin de semana el dueño de la firma, Mario Morel, quien viajó a Buenos Aires y consiguió finalmente la adquisición de nuevas unidades para poder cumplir con el mandato del gremio.
Sin embargo, en horas de la tarde de ayer, desde la UTA determinaron aplicar nuevas medidas por anomalías sobre lo que se había pautado escasas horas antes.
“Ya no cumplió con lo que habíamos pactado en su momento, qué confianza podemos tener ahora. Nos dijeron que estaba todo acreditado y tengo un listado que me pasaron ellos de 329 mil pesos ¿Y cómo puede ser que ahora, de la nada, apareció otra deuda? Los mismos compañeros son los que transmiten la falta de pago”, aseguró Giménez.
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