Condenado por venta de droga ahora lo acusan de estafas
El nombre de José Luis Britos circuló en todos los medios de Tandil en 2013 cuando Guillermo Arecha, integrante del Tribunal en lo Criminal 1 de Tandil, lo condenó a la pena de 4 años y 2 meses de prisión por el delito de “Comercialización de estupefacientes fraccionados en dosis destinadas al consumidor, en concurso ideal con tenencia de estupefacientes con fines de comercialización, todo en concurso real con resistencia a la autoridad”.
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Tras cumplir su condena en la Unidad 38 de Sierra Chica, Britos salió en libertad y hoy está siendo investigado por haber estafado a decenas de personas en Monte Hermoso y sus alrededores, al hacerse pasar como contratista para vender cabañas a bajo costo pero que luego de cobrar, nunca terminaba, según informó el portal Infobae.
El hombre de 48 años había sido condenado en 2013 por dos hechos que habían sucedido en 2011: venta de estupefacientes fraccionados, al menos, entre abril y agosto; y resistencia a la autoridad, cuando en agosto personal de la Delegación de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de Tandil, debidamente identificados y con la orden de registro y secuestro, lo ubicaron estacionado en Pinto y Alberdi. Al darle la orden de detención y de que descienda del auto, Britos atropelló a un agente y se fugó, pero fue interceptado en la Ruta Nacional 226.
Tras salir libre, advierten en el medio bonaerense, el acusado se instaló en la zona de Monte Hermoso, donde eligió dedicarse a otra actividad pero no alejada del delito, según señalaron las víctimas: a través de una página de Facebook llamada “Constructora del Oeste”, en la que promocionaba fotos falsas, ofrecía un servicio de construcción de viviendas a un precio módico. “La oferta era atractiva y en tiempo de crisis, irresistible”, indican en Infobae.
Tras la primera denuncia por estafa, comenzó a aparecer una importante cantidad de personas que, a través de las redes sociales, acusaba haber sufrido lo mismo. Se abrieron grupos de Facebook donde las víctimas contaron sus experiencias e intentaron advertir al resto de los usuarios.