Los vecinos de La Movediza ruegan por seguridad tras el incendio del destacamento
Un grupo de frentistas escribió una carta que envió a El Eco de Tandil para contar la difícil situación que atraviesan por un “par de familias que tienen en vilo a todo un barrio”. Rogaron a la policía que no los “abandone”. “No nos dejen a la deriva por unos pocos”, remarcaron.
Luego del incendio intencional del destacamento policial de La Movediza, situado en La Pastora y Paseo de los Abuelos, vecinos de la zona escribieron una carta donde exponen la compleja situación que se vive por un “par de familias que tienen en vilo a todo un barrio”.
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En la misiva, expresaron que están “cansados de estar siempre en el ojo de la tormenta por las acciones impunes de unos pocos. Cansados de que nos metan a todos en la misma bolsa. Cansados de escuchar siempre los mismos apellidos detrás de algún acto de vandalismo. Cansados de que los detengan sólo por un par de horas y al otra día vuelvan para terminar lo que empezaron”.
En ese contexto, se preguntaron “a quién hay que pedirle seguridad, que nos den la tranquilidad de que nuestros hijos puedan salir a jugar sin miedo a que se crucen con uno de estos delincuentes o que los mate una bala perdida, porque también están armados y no tienen miedo de tirar”.
Lamentaron que llevan “años escuchando los mismos nombres. Años viendo como las generaciones ‘degeneradas’ de un par de familias tienen en vilo a todo un barrio, esperando cada fin de semana que se desate el quilombo, porque esta gente alcoholizada y bajo los efectos de cualquier otra sustancia utiliza el día que cualquier persona común aprovecha para descansar, para darle rienda suelta a la miseria que lleva dentro”, lamentaron.
“No nos dejen a la deriva”
Frente a ese panorama se preguntaron “qué están esperando. Hace unas semanas fueron piedras y balas, después fue fuego en señal de poder, de empoderamiento. Señores, los vecinos de La Movediza no aceptamos bajo ninguna circunstancia que ganen ellos. No somos eso”.
Por último, pidieron “seguridad”, que la Policía “no nos abandone. En La Movediza también hay respeto a la autoridad y podemos asegurar que somos muchos más que estos delincuentes. No nos dejen a la deriva por unos pocos”.
Los antecedentes
Cabe recordar que el hecho violento sucedió en la medianoche del sábado, cuando dos jóvenes masculinos de aproximadamente 20 años, encapuchados y de contextura delgada, aprovecharon que los vidrios del destacamento estaban completamente destruidos por el ataque vandálico que la sede policial había sufrido 20 días atrás, y arrojaron un objeto tipo bomba molotov en el interior, lo cual causó el foco ígneo. Fue así que el destacamento ardió el llamas y quedó completamente destruido.
Por el ataque que había sufrido hace tres semanas, el puesto de vigilancia no tenía vidrios en la puerta, la traba estaba forzada y el resto de los vidrios estaban rotos, es decir que quedó inhabitable, por lo cual no había efectivos policiales dentro del mismo desde ese 3 de mayo.
En su lugar se había establecido una guardia dinámica, con un móvil que patrullaba la zona.
Por el momento, no hay aprehendidos porque la causa se encuentra en plena investigación y fue caratulada como “Incendio intencional”, a cargo de la UFI 8 del fiscal Gustavo Morey.
Hace exactamente tres semanas, también un sábado a la medianoche, un grupo de personas atacó a policías que habían acudido a un llamado alertando de un vehículo sospechoso en la zona. Además de romper el patrullero, destruyeron los vidrios del destacamento.
El hecho comenzó el sábado alrededor de las 23.30, cuando el Servicio de Emergencias registró un llamado alertando de un vehículo sospechoso en una obra en construcción ubicada en Los Tulipanes 1800. Un móvil policial se dirigió hacia ese lugar y si bien no visualizaron el vehículo por el cual habían recibido el llamado, observaron un grupo de gente que se acercó rápidamente al patrullero y empezaron a arrojar elementos contundentes contra el móvil.
En un primer momento, los efectivos policiales descendieron del vehículo para intentar detener a las personas que los atacaban, pero en ese momento los agresores destrozaron los cristales de las puertas traseras del móvil, por lo cual el personal volvió a subir a la patrulla y se replegó hacia atrás, mientras aguardaba la llegada de refuerzos de otras comisarías.
En tanto, los atacantes continuaron arrojando elementos contundentes y efectuaron también algunos disparos con armas de fuego, por lo cual los efectivos repelieron las agresiones con escopetas para tratar de disuadir a los malvivientes. Tiempo después, arribaron los móviles de refuerzo pero mientras esperaban su llegada, los agresores rompieron todos los vidrios del destacamento policial.