Robaron unos mil kilos de quesos, valuados en medio millón de pesos, de una fábrica de Azucena
Los ladrones ingresaron por la tranquera de un campo vecino y cortaron los alambres hasta la sede de la Fábrica de Quesos Moreno. El propietario expresó que “me hicieron pedazos” y lamentó que estos hechos no se puedan evitar.
Ayer por la madrugada, robaron unos mil kilos de mercadería de la Fábrica de Quesos Moreno, ubicada en el kilómetro 233 de la Ruta Provincial 74, muy cerca de Azucena. El propietario, Miguel Moreno, le contó a este Diario que “me barretearon una puerta y me llevaron toda la producción. Me hicieron pedazos”.
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Calculó que los ladrones se alzaron con unos mil kilogramos de quesos de diversas variedades, producto de la elaboración de unos cuantos días, y que estaban en la planta para el proceso de maduración.
El productor manifestó que la mercadería que tenía en la planta era “de varios días. Siempre vamos dejando algo. A mí me hicieron pedazos. No tengo seguro, no tengo nada de combustible, así que el robo me hizo pedazos” y en tono resignado, agregó: “Bueno, ya está”.
El botín estuvo integrado por quesos de pastas semiduras y duras, como gouda, pategras, hormas saborizadas, sardo, reggiano, y está valuado en unos 500 mil pesos.
A campo traviesa
El establecimiento productivo se encuentra ubicado a 800 metros de la Ruta 74, junto a un camino vecinal. El damnificado estimó que los delincuentes ingresaron por lo de un vecino que dejó la tranquera sin candado porque estaba en plena tarea de laboreo y cortaron campo, destruyendo alambrados. Además, evaluó que se movilizaron en una camioneta grande “para poder llevarse esa cantidad de kilos y el volumen que eso implica”.
Accedieron a la planta después de barretear una puerta, de la que cedió el pestillo, y cargaron todos los quesos, condimentos y etiquetas de la marca.
En la víspera, vecinos de la pyme refirieron que escucharon ladrar a los perros cerca de las 5 de la madruga y otros productores que estaban cosechando indicaron que vieron movimientos de desconocidos cerca del lugar.
Remar y remar
En cuanto a las consecuencias económicas de este robo, Miguel Moreno explicó que se traducirán en deudas porque “en la medida en que voy vendiendo, voy pagando la materia prima, que básicamente la leche es el mayor porcentaje de materia prima. Así que lamentablemente ahora tengo que remar meses y meses para poder recuperar todo eso, que es pérdida neta”.
Por otra parte, Moreno confirmó que radicó la denuncia en la Patrulla Rural y se mostró conforme con el accionar policial. Incluso, vecinos habrían aportado algún indicio acerca de movimientos de personas extrañas por la zona, mientras estaban trabajando en la cosecha hasta entrada la noche.
“Es una cosa que lamentablemente no se puede evitar”, dijo el productor quesero, que trabaja en Azucena desde 1985. Afortunadamente, el episodio de ayer fue el primero, lo que no alcanza para mitigar su bronca.
“La venimos peleando hace un montón de años, con mucho esfuerzo para poder llegar a donde uno llegó y poniendo todo uno, sin apoyo de nadie. La verdad es que fue un cachetazo fuerte”, confió.
Por otro lado, indicó que a través de Huellas de Tandil decidieron publicar el robo en las redes sociales para intentar rastrear los quesos y alertar a otros productores. “Son mil kilos de queso, unas cuantas hormas. No es para consumo. No es por hambre que lo hicieron. No sé si lo comercializarán acá o en otro lado, pero me robaron etiquetas, las latas de pintura para pintar los quesos”, señaló y agregó que “no sé qué pensar, entonces por lo menos decidí darle difusión”.
El mensaje
A través de Facebook, en un mensaje dirigido a Tandil y la zona, desde Huellas Serranas informaron que “lamentablemente algunos amigos de lo ajeno forzaron y entraron en la Fábrica de Quesos Moreno ubicada en zona agraria, cerca de Azucena, llevándose toda la producción de quesos e insumos”.
Y agregaron que “pedimos máxima difusión de este mensaje para que esos quesos no entren en el mercado negro (pueden aparecer con etiqueta Moreno, Doña Catalina o sin etiqueta; en la foto se aprecian alguno de los formatos)”.
Por último, reseñaron que “desde ya confiamos en nuestra policía y en la sociedad para que esto se esclarezca. Estamos muy apenados, ya que es una fábrica que se fue haciendo muy de a poco y con muchísimo esfuerzo y sacrificio”.