Binando rechazó las críticas por el Fondo Educativo y dijo que pusieron “mucho más que un ladrillo”
El secretario de Economía del Municipio, Daniel Binando, salió al cruce de los dichos del consejero escolar Martín Keegan acerca de la falta de ejecución del Fondo de Financiamiento Educativo. Consideró que las críticas que realizó el consejero en diálogo con El Eco de Tandil tienen que ver con cuestiones políticas y aseguró que “creer que el Fondo de Financiamiento es para solucionar la problemática estructural que tenemos en educación es un error”.
Recibí las noticias en tu email
Binando expresó que leer las declaraciones del consejero escolar Keegan en El Eco de Tandil, le produjo “la misma sensación que cuando la oposición del Frente para la Victoria criticó la rendición de cuentas del Municipio por el año 2016. En su declaración mezcla conceptos, no puntualiza, confunde hechos, jurisdicciones y términos económicos y administrativos. No hace un solo aporte que pueda mejorar la calidad educativa”.
En ese contexto, consideró que las críticas vertidas se deben a que se trata de un “año electoral”, por lo tanto, “creo que Keegan trata de generar un manto de duda sobre la exitosa gestión que llevamos desde el Municipio”.
Un error
Binando recordó que el Fondo Educativo nació a fines del 2005 por una ley nacional que buscaba que en 2010, en forma progresiva, la inversión en educación, ciencia y tecnología llegara al 6 por ciento del PBI.
“Fue lamentable que la Nación no destinara fondos genuinos a este notable objetivo. Los fondos que otorgó ya los daba a las provincias, pero los convirtió en afectados, restándoles a los mismos fondos de libre disponibilidad. La Provincia en consecuencia, a los fondos de coparticipación para los municipios de libre disponibilidad los convirtió también en afectados. Por lo tanto, restó recursos al último eslabón, es decir, los municipios. Por tal motivo el Fondo Educativo es dinero que deben manejar los municipios para fortalecer la educación formal y no formal”, afirmó.
En ese contexto, sostuvo que “la diversidad de gastos que puede hacer un municipio para este concepto es muy amplia. Y no se limita solo a la estructura”.
Y cuestionó que creer que el Fondo de Financiamiento Educativo “es para solucionar la problemática estructural que tenemos en educación es un error”.
“Esa es una facultad que la Nación le delegó ya hace varios años a las provincias, que son las responsables de mantener esa estructura. El Municipio está para apoyar, pero no para hacerse responsable de la totalidad de la educación. Me parece que se toma con mucha liviandad la importancia de los recursos, la factibilidad de lo que es llamar a licitaciones, se sale a decir cosas que se prestan a la confusión. Está bien que estamos en un año electoral, pero me parece que son temas muy serios”, criticó.
Y agregó que “hemos hecho muchas cosas, pero no vamos a poder hacer gran cantidad de edificios que demanda el crecimiento de Tandil. Eso se tiene que pelear en la Provincia, y este consejero escolar se olvida que gobernaron la provincia 30 años. Entonces hay que tener un poco de decoro al enunciar las declaraciones, cargando las tintas a esta gestión de que no ponemos un ladrillo. Me parece una exageración”.
Mucho más
que un ladrillo
Por otra parte, explicó que cuando se cierra un ejercicio, el dinero que sobra pasa a “engrosar el presupuesto del año siguiente. Siempre la partida presupuestaria contiene tanto la plata que quedó más todo lo que nos dijeron en la Provincia que supuestamente va a entrar a lo largo de 2017. Los fondos afectados se pasan de ejercicio a ejercicio”.
“Por los proyectos que armaron los consejeros escolares con el Intendente más el PASE, más el pago de horas cátedra, más una serie de gastos de cosas que se hacen con el Fondo Educativo, es muy probable que este año se sobreejecute esa partida. Eso significa que vamos a tener que usar fondos de libre disponibilidad con destino a gastos que debería cubrir el Fondo de Financiamiento Educativo”, vaticinó.
En tanto, sostuvo que ahora, que están cerrando el primer semestre, es cuando mejor pueden hacer un cálculo de cómo van evolucionando los fondos, y admitió que “pensé que íbamos a tener más dinero llegando de Provincia a esta altura respecto a lo que ha llegado, viene muy exacto. Siempre llegaba un poco más de lo que se había previsto”.
“Otra de las falencias que cometen es creer que la plata ingresa toda junta. Los ingresos que envía la Provincia, reitero de manera afectada, se ‘gotean’ día por día. Es decir, que cada día hábil nos remite una suma de dinero, a una cuenta corriente específica del Banco Provincia de Buenos Aires, insisto que están depositados en un banco.
Puedo asegurar que en estos seis meses han ingresado por ese goteo una cantidad de casi 32 millones de pesos”, puntualizó.
Y sostuvo que esa suma “ya está comprometida en muchos proyectos que se realizaron y otros que estamos elaborando y llevando a cabo en licitaciones, como es el caso de la Escuela de Idiomas y de la pileta semi olímpica para el CEF 42. Además, hemos hecho envíos de dinero al Consejo Escolar en carácter de subsidio, que los consejeros rinden cuentas de los mismos, por cientos de miles de pesos”.
“Hemos puesto más que un ladrillo. Hemos arreglado instalaciones eléctricas como el caso de la Escuela Granja. Hemos hecho obras de gas como en la EP 42. Arreglos en el establecimiento de Villa Alduncin. Mucho, pero mucho más que un ladrillo”, enfatizó.
Y añadió que “es necesario señalar que el Fondo Educativo no podrá dar solución a todos los edificios que suman más de cien en Tandil. La responsabilidad de la estructura de educación es de la Provincia. El Fondo Educativo es un complemento para la mejora educativa, pero no la solución a la problemática. Quienes realizan la crítica sin aportes constructivos gobernaron la Provincia desde 1987 hasta el 2015, es decir que tuvieron 28 años a cargo la educación. Creo que son los responsables del deterioro de la educación pública en nuestra provincia”, lanzó.
No hay tantas empresas para
ejecutar el volumen de obras
Por otro lado, el secretario de Economía Daniel Binando se refirió a una problemática que se presenta en la ciudad sobre la poca cantidad de empresas que hay en condiciones de llevar adelante las obras.
En ese sentido, aclaró que las obras de infraestructura que no se realizaron aún no fueron por “problemas del Municipio, como dice Martín Keegan que estamos guardando la plata, ni mucho menos”.
“En este momento, entre lo que tenemos de infraestructura de Provincia, lo que tenemos de infraestructura de Nación más los fondos propios del Municipio del Fondo de Inversión Vial, más lo que tenemos de presupuesto educativo es una suma muy cuantiosa de dinero de cientos de millones de pesos que no hay tantas empresas que puedan cotizar para la cantidad de obras que estamos desarrollando”, admitió.
Y contó que le sucedió que “en muchas licitaciones o no hemos tenido oferentes que quieran realizar las obras, o las condiciones que nos presentaba el oferente no coincidían con lo que nosotros habíamos llamado a la licitación, por lo tanto se dejan caer, no se adjudican porque no es lo que nosotros necesitamos”.
“En los últimos meses hemos empezado a dividir las obras y hacerlas por etapas, porque por ahí hay pequeñas empresas de la zona y locales que no tienen una capacidad financiera para agarrar una obra de 10 ó 12 millones de pesos, pero si la particionamos pueden agarrar en la licitación obras de 1 ó 2 millones de pesos”, sostuvo.
Pero confió que la realidad es que “no tenemos la suficiente cantidad de empresas para la construcción de todas las obras. Como dijo el Intendente, Tandil en este momento es un gran obrador, y no tenemos tantas empresas que puedan atender simultáneamente la cantidad de obras que por distintos fondos que estamos disponiendo necesitamos hacer”.
“Las empresas que están registradas en Nación y que son muy grandes generalmente el capital de trabajo no lo trasladan de las zonas de gran influencia a ciudades intermedias como la nuestra porque el costo es muy alto. Entonces contratan algunas empresas de la zona y calculan un porcentaje por encima del valor, o sea que terminás pagando mucho más caro. Antes no había tantas obras a nivel nacional y provincial y hoy hay tantas que en realidad no hay muchas empresas que puedan afrontar esto”, manifestó.
Y admitió que “muchas veces tenemos que hacer análisis financieros y a veces no son lo suficientemente óptimos para que la parte pública se arriesgue a adjudicar una obra de esa magnitud. Hay mucha demanda de obra pública y relativamente poca oferta de empresas que puedan enfrentarla en Tandil, todas las que tienen capacidad tienen una o dos obras aparte del Municipio. Están al tope de su capacidad”.
“Por ese motivo hemos tenido que rever algunas de las licitaciones que en su momento hemos presentado, pero no es por un tema financiero”, argumentó.
Y sostuvo que “a mí no me entregan la plata el 1 de enero y la tengo para hacer colocaciones. La Provincia nos envía un goteo día por día a lo largo de todos los días hábiles del año 2017. Lo que uno hace es cubrirse con un simple plazo fijo, con la plata que durante los 30, 35 días hasta que se certifica el avance de obra vas teniendo para no perder algunos pesos. Pero la problemática es que tendríamos que tener en el mercado por la cantidad de obras que se están haciendo muchas más empresas dedicadas a la construcción”.
Este contenido no está abierto a comentarios