En su paso por Tandil, De Mendiguren planteó los ejes del modelo productivo para salir de la crisis
El diputado nacional del Frente Renovador, José Ignacio De Mendiguren, visitó ayer la planta de Cagnoli. En la conferencia de prensa previa al encuentro, el dirigente empresario y político expresó que de la crisis se sale “creciendo y produciendo”. Y apuntó sus críticas a la política económica y productiva del gobierno de Macri.
Ayer, en la víspera al inicio formal de la campaña electoral rumbo a los comicios de octubre, el diputado nacional por el Frente Renovador, José Ignacio De Mendiguren, hizo escala en Tandil para brindar una charla en la Cámara Empresaria.
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Convencido de la capacidad de recuperación de la economía nacional, el extitular de la Unión Industrial Argentina transmitió un mensaje optimista y compartió la mirada sobre el abordaje a realizar en materia productiva en caso de ratificarse los resultados obtenidos en agosto. “Hay una salida”, aseguró y expuso que el plan es “produciendo”.
En ese contexto, avanzó sobre el debate a impulsar para responder a una crisis a la que el país “sistemáticamente” se enfrenta cada un determinado período. “Argentina le vende al mundo lo que vale poco y le compra al mundo lo que vale mucho”, entonces en las fases de crecimiento “estamos en un velorio en lugar de estar en una fiesta porque no tenemos los dólares necesarios para enfrentar ese crecimiento que tenemos y eso nos llevó a la crisis sistémica”.
Así, apoyado en el entramado productivo, se puede lograr un salto y “dar vuelta” el escenario actual “en un año y medio”. Pero para lograr esta “transformación es clave que se de en todos los niveles, nacional, provincial pero también local. Cuando los tres combinan, el éxito está garantizado”.
También apuntó sus cuestionamientos al Gobierno de Mauricio Macri al criticar que “se asoció con la especulación financiera”, que tuvo “como contracara ahogar a la Argentina productiva. La transformamos en un país carísimo para exportar y barato para importar”.
“Estoy sorprendido que haya tanta gente sorprendida. Esto era la ruta 2, terminaba en Mar del Plata. Hoy tenemos un país endeudado y sin capacidad de generar dólares”, alertó el presidente de la Comisión de Industria de la Cámara de Diputados de la Nación.
Y pronosticó que “a partir de diciembre habrá un cambio de 180 grados en la política económica”.
La actividad organizada por el Frente de Todos reunió en la sede de la entidad camarista a representantes del sector productivo local y también a dirigentes de los distintos sectores que confluyen en el espacio político electoral encabezado por el candidato a intendente Rogelio Iparraguirre.
La matriz productiva
Para De Mendiguren, la única forma de salir de esta situación es “creciendo, produciendo, facturando más” y contrapuso esta premisa a las políticas del Gobierno, que en los últimos años “se ha convertido en una mesa de dinero” y apuntó que la agenda que se discute es la que se vincula a las “Leliq, a la tasa de interés, a la devaluación y nada de la agenda de crecimiento”.
Y planteó que en la actualidad Argentina “exporta a razón de 400 dólares la tonelada e importa a 1.800” y alertó que con esa matriz productiva resulta “imposible hacer frente a ninguna deuda ni tener un modelo económico sustentable”.
A modo de ejemplo para mostrar cuál es el camino a seguir se enfocó en la producción agropecuaria, puntualmente en la exportación de trigo.
“El 85 por ciento se exporta a granel, a 180 dólares la tonelada”, mientras que llevado al primer escalón de agregado de valor, la harina, se eleva a 450 dólares la tonelada. “Si logramos con el tiempo llegar al tercer escalón (pastas, galletitas) fuimos a 1.600 dólares la tonelada”, agregó.
Entonces, si se extiende a “todo el proceso granario del país, con dar el primer escalón, Argentina puede sumar 30 mil millones de dólares adicionales a sus exportaciones”, en un esquema que podría replicarse en otras actividades.
Por otro lado, respaldado en su experiencia como exministro de Producción y extitular de la Unión Industrial Argentina (UIA), resaltó como virtud que en la década pasada se puso como eje de la política económica tres pilares: “un tipo de cambio competitivo, baja inflación y superávit gemelos”, lo que determinó un crecimiento en la industria de un “110 por ciento”, pero no dudó al admitir que también se cometieron errores.
Con autocrítica, De Mendiguren precisó que “vamos a rescatar todo lo virtuoso que tuvimos y corregir lo que nos llevó a perder las elecciones y que la Argentina viviera un nuevo retroceso a la década del ’90. Somos responsables de eso”.
Apostar a la producción
Por su parte, el candidato a intendente del Frente de Todos, Rogelio Iparraguirre, contextualizó la importancia de la visita del diputado nacional del Frente Renovador y el desafío que tendrá la dirigencia política a partir del 10 de diciembre que deberá “reorientar la brújula hacia la producción” ya que de la crisis “se sale produciendo”.
Compartió conceptos vinculados al escenario económico al citar el endeudamiento “brutal” y la “desregulación financiera”, donde “los que trabajan y dan trabajo perdieron, en mayor o menor medida”, para luego rematar que “es una elección suficiente para que volvamos a entender que hay que apostar a la producción”.
En esa línea advirtió que deberán asumirse grandes dificultades pero se respaldó en la “orientación” que vuelve a poner en el centro de la escena “a los que trabajan y dan trabajo” mediante herramientas que “potencien a la producción”.
En ese entramado, la clave estará en el valor agregado que aportarán las ciudades del interior del país como Tandil, donde, según Iparraguirre, “tenemos todas las condiciones para hacerlo”.