Tandilense, asesor de Felipe Solá, cree que el Gobierno tiene una oportunidad de revertir los tarifazos
Meses atrás varios medios capitalinos lo señalaron como el gran hacedor del fallo que permitió la reapertura de la causa para determinar si es constitucional el blanqueo de capitales de familiares de funcionarios.
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Ahora, en medio de jornadas cargadas de tensión en el Congreso Nacional, Martín Yáñez, abogado tandilense que se desempeña en Diputados, volvió a la carga contra el oficialismo, pero esta vez a partir de su función de asesor del justicialismo junto al diputado Felipe Solá y por ende partícipe en la confección del articulado de la ley de Emergencia Tarifaria aprobada por aquel cuerpo días atrás.
Contundente, señaló a El Eco de Tandil que “si Macri veta esta norma, se volverá a equivocar”.
Aseveró que “de pronto con esta calma que ha retornado, el Presidente puede resolver el problema. Si el sentido común decía que era injusto pagar lo mismo por un café que por la cuenta de luz, aprovechemos para entender que en un país viable todos deben poder pagar las tarifas”. Y reflexionó que “tampoco es propio del sentido común que una familia pague más por la luz que el alquiler”.
Tarifas y justicia social
Desde su despacho en la Cámara baja, el tandilense justificó la iniciativa “anti tarifazo”. Detalló que “es una propuesta razonable, justa, que plantea tarifas lógicas”.
Entre las disposiciones más importantes del polémico proyecto destacó el hecho de retrotraer los valores al 1 de noviembre, con lo cual, explicó, “quedan firmes los aumentos hasta esa fecha, que no es poco”.
De acuerdo a su visión “lo más justo hacia el futuro es que las categorías de consumo medio y bajo quedan atadas a los próximos aumentos del índice de variación salarial”. A su vez añadió que “el Régimen de Beneficiarios con cuadro diferencial incluye a jubilados, pensionados y monotributistas que perciban menos de tres salarios mínimos (9.500 pesos), como así también a discapacitados, usuarios con seguro de desempleo y excombatientes de Malvinas”.
También quedaron bajo el alcance de la ley, indicó Yáñez “los clubes de barrios, centros asistenciales públicos, entidades educativas públicas, mutuales y cooperativas de trabajo de hasta 50 asociados”.
Dijo que “esta propuesta está lejos está de ser demagoga, desestabilizadora o populista, como la calificaron desde el oficialismo”, manifestó el tandilense, quien disparó una pregunta a sus pares del oficialismo “¿acaso creen lógico que si la tasa de inflación va a ser del 20 por ciento el aumento de tarifas sea tres o cuatro veces más alto?”.
“Un grave error”
Según reveló, los intensos debates en las comisiones le permitieron a Yáñez acceder a mucha información sobre la cuestión tarifas públicas y a partir de eso dijo tener ahora “certeza absoluta” respecto a la falta de inversiones y a las “excesivas” ganancias de las empresas.
Por ello señaló que detrás de los incrementos existe “un gran negociado”, con una rentabilidad extraordinaria.
“Entre 2016 y 2017 el gas aumentó el 927 por ciento y las empresas del sector obtuvieron 1.032 millones de ganancias. En el caso de las eléctricas, en el mismo período aumentaron el 920 por ciento, con lo cual las ganancias treparon a 2.312 millones”, precisó.
“Y a la obtención de esas ganancias hay que agregarle que esas firmas multiplicaron el valor de sus acciones y distribuyeron dividendos. No obstante eso aún no realizaron las inversiones necesarias”.
En conclusión, “el Presidente se equivoca al presionar a los gobernadores -evaluó Yáñez- pidiendo a los demás lo que no le dan los propios y se volverá a equivocar si veta esta ley. A la gente se le está haciendo imposible pagar las facturas, eso el Gobierno parece no advertirlo y así se va alejando de la realidad y se vuelve cada vez más insensible. Si vetan, pagarán un enorme costo político”.
Yáñez y el día que la Justicia
falló contra el poder de turno
Sea en los largos años del kirchnerismo, cuando se mencionaba al Congreso como la “escribanía” de la Casa Rosada, o en los actuales del macrismo, a Martín Yáñez le tocó estar en la vereda opositora y siempre se lo consideró un respetado asesor que se destacó con el mérito del equilibrio y del no dejarse llevar por los apasionamientos extremos a la hora de la discusión de los proyectos legislativos.
Desde Nicolás Cuesta, camporista tandilense con funciones en Diputados, hasta el exasesor en ese cuerpo y hoy dirigente con aspiraciones en Tandil desde el PRO, Gonzalo Santamarina, entre muchos otros de diferentes bancadas, el abanico político reconoce en Yáñez un interlocutor clave a la hora de intentar que una iniciativa legislativa pueda consensuarse y avanzar.
Tal vez fue por esos antecedentes que no recibió fuego cruzado desde el oficialismo cuando en noviembre pasado la Cámara Federal, a instancias de este abogado tandilense, revocó un fallo de primera instancia que había beneficiado al oficialismo. Sin doblegarse ante el rechazo inicial a la acción de amparo con que buscaba declarar la inconstitucionalidad del blanqueo de capitales llevado a cabo por familiares de funcionarios del gobierno de Mauricio Macri, Yáñez insistió con nuevos argumentos ante el tribunal superior.
Y se convirtió en el protagonista de una de las pocas causas que alcanzó una resolución favorable de la Justicia en segunda instancia. Por ese capítulo fue señalado por los medios capitalinos como un tenaz letrado que, contra todos los pronósticos, logró que se declare la legitimidad del diputado Felipe Solá para actuar como parte en la causa “blanqueo” que ahora prosigue su curso.
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