“Algún día voy a volver a Santamarina”, aseguró Callejo
El futbolista tandilense Facundo Callejo manifestó en una entrevista que mantuvo con el periodista Mariano Peralta que se ilusiona con volver a vestir la camiseta de Santamarina, ya que toda su familia es hincha del club.
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Tras un agitado paso por el fútbol griego, marcado por la pandemia del coronavirus que le puso un freno a la actividad deportiva y lo obligó a regresar al país porque la institución en la cual estaba afrontaba una crisis económica, Callejo reveló que planea firmar con un elenco argentino o uno chileno.
“Mi idea es jugar en Argentina. Estamos analizando varias opciones, que tienen que ver con lo futbolístico y la calidad de vida. Hay muchos equipos que, dependiendo de la ciudad donde estén, tienen menos contagios y, por ende, más tranquilidad para la familia”, reconoció y agrego que si bien lo volvieron a llamar varios elencos de Grecia para contratarlo, prefiere esperar “y ver si puedo jugar en Argentina o Chile”.
Por otra parte, el exjugador de Colón, All Boys y Gimnasia de Jujuy, entre otros, reveló que siente que tiene una deuda con Santamarina, club que lo vio nacer y del cual es hincha, debido a que no pudo rendir como le hubiese gustado cuando tuvo la oportunidad de hacerlo.
“Es una deuda que tengo con el club, la gente y también personal. Lamentablemente, cuando tuve la oportunidad de venir a jugar a Santamarina no estaba bien desde lo físico y mental. Me costó muchísimo la categoría, porque venía de dos años en Primera División, y me fastidiaba mucho conmigo mismo. En el tiempo que estuve no logré estar al 100%. Algún día voy a volver a jugar en la institución, donde mi viejo y toda mi familia quiere”, aseveró.
La crítica situación de Venezuela
Callejo tuvo un paso por Venezuela, donde defendió los colores de Carabobo. De aquella época recordó que fue una etapa compleja debido a la crisis del país.
“Fue difícil. Llegué al club y a la semana tuve un desgarro que me impidió jugar contra Guaraní (Paraguay) por la Fase 1 de la Copa Libertadores. El equipo venía bien, con una base de dos años, pudimos ganar la etapa regular y caímos en semifinales”, rememoró.
En cuanto a la situación social venezolana reveló que el día a día era muy complejo y que vivían encerrados en el hotel por la propia inseguridad que se registraba en las calles. “Solo salíamos para ir a los entrenamiento”, señaló.