“Uno hace sacrificios en pos de perseguir sus sueños”, declaró el tandilense Ignacio Calles
A poco más de un mes de haber firmado su primer contrato profesional con Section Paloise, club al que llegó como proyecto juvenil a mediados de 2016, el rugbier tandilense Ignacio Calles dialogó con El Eco de Tandil y contó cómo es su vida en Francia.
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Formado como tercera línea en Los Cardos, Calles se convirtió en hooker para integrar por dos años consecutivos Los Pumitas y más tarde, Argentina XV. Tras un paso por la primera división de Liceo Naval, aceptó la chance de mudarse a Pau para integrar los Espoirs, el equipo juvenil de Section Paloise.
Con solo 23 años, logró ganarse su lugar en el primer equipo y se consolidó como pilar izquierdo en el Top 14.
De su paso por Los Cardos destacó que “he tenido la suerte de jugar con muchos jugadores que, para mí, podrían haber tenido una gran trayectoria. Pero creo que las cosas se dan o no se dan por algún motivo; hoy en día veo cómo está cada uno y tienen un pasar espectacular”.
-¿Cómo te adaptaste al rugby francés?
– Me costó bastante. Cuando llegué había muchas cosas que no entendía: nuevo país, nuevo idioma, también nuevo torneo y otra cultura; eso me sacó un poco de contexto de lo que venía viviendo en Argentina, pero con el tiempo me pude ir adaptando. Por suerte había otros argentinos conmigo en ese momento que me dieron una mano muy importante.
-¿Qué diferencias de juego notás?
– La diferencia más importante son las formaciones fijas, que son más intensas. Además, el partido se juega muchas veces estilo ‘test match’, con un juego más sobrio y sin tanto riesgo (no siempre) que por ahí no ves en Súper Rugby. Por otra parte, al haber descenso y ascenso hay presiones extras en los partidos, sponsors y demás.
– ¿Con qué jugador te diste, o te estás dando, el lujo de jugar?
– La verdad que tuve la suerte de jugar con muchos jugadores que miraba antes por televisión pero el que más me impresionó fue Conrad Smith (exjugador neozelandés, retirado en 2018).
-Y de los que te enfrentaste, ¿cuál fue el mejor?
– ¡Uf! No tengo una respuesta exacta, hay tantos buenos jugadores que no te podrías quedar con uno.
– ¿Qué evaluación harías del presente de tu equipo?
– Fue un año muy duro, con muchos problemas internos en el club que por ahí influyeron dentro del campeonato. No obstante, me parece que hay un buen proyecto y se está trabajando para llegar lo más alto posible en el rugby francés.
En lo personal…
– ¿Cómo es tu vida en Francia?
– Por suerte me dedico 100 por ciento al rugby. Además, el club me ofreció una formación de educador deportivo, pero voy de a pasos cortitos, no voy a mentir, ja ja.
-¿Cómo hiciste para adaptarte al idioma?
– Desde un principio noté que era muy necesario, así que en su momento, cuando llegué, comencé un curso de francés.
-¿Estás viviendo en Pau con algún compañero?
-Estoy en un departamento cerca del club, pero en este momento estoy solo.
-¿Volvés seguido al país?
– Vuelvo una vez al año a fines de mayo o principios de junio, dependiendo del campeonato ¡Vivo de invierno en invierno, ja ja!
-¿Extrañas algo o a alguien?
– Se extraña todo; se extraña Argentina… Mi familia, mis amigos, mis costumbres. Pero bueno, son los sacrificios que uno hace por perseguir sus sueños.
-¿Te mantenés informado de lo que pasa acá?
– Sí, la verdad que me interesa mucho. Hablo con mis amigos, con mi familia, veo también en las redes para saber cómo viene todo. Por más que estoy en Francia, Argentina sigue siendo mi país.