Detuvieron ladrón que se ocultó en un kiosco tras robar en una agencia
Ayer por la tarde, personal de la Unidad de Policía de Prevención Local atrapó a un hombre de unos 35 años que se ocultó en un kiosco de Alem al 500 tras robar dinero de la recaudación de una agencia de quiniela ubicada en San Martín al 800.
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Alrededor de las 19.45 una persona ingresó a la agencia de quiniela El Trébol, ubicada en San Martín 813, y mediante amenazas e intimidaciones hacia la empleada, y sin exhibir arma de fuego, sustrajo más de 3 mil pesos producto de la recaudación, y se dio a la fuga.
Personal de la Policía Local que se encontraba patrullando la zona a una cuadra fue alertado por vecinos y se dirigió hacia el kiosco de Alem 524, ante un aviso que daba cuenta de su presencia en el interior del comercio.
Allí los efectivos preguntaron al empleado si todo se encontraba en forma normal, a lo que respondió que sí pero mediante gestos intentó advertirlos sobre la presencia de una persona en el interior, que se ocultaba detrás de un exhibidor.
Al notar que algo extraño sucedía, los uniformados volvieron a ingresar, redujeron al sospechoso, lo aprehendieron y lo trasladaron hacia la comisaría Primera, en un accionar que contó con la colaboración de los efectivos de la Bonaerense de la jurisdicción.
En su poder hallaron la totalidad del dinero sustraído instantes previos de la quiniela, del mismo modo en que la damnificada describió que estaban (en fajos y atados con banditas elásticas).
Según se informó a este Diario, ante el alerta sobre el hecho, los oficiales de la nueva policía retuvieron al autor del hecho y tras completar las tareas se entrevistaron con la dueña de la quiniela, que informó sobre el hecho previo.
Finalmente se iniciaron actuaciones por “Hurto in fraganti” con intervención de la fiscalía de turno, mientras que el aprehendido quedó alojado en los calabozos de la Primera.
“Fue muy rápido”
El empleado del kiosco de Alem al 500 que presenció el episodio contó a este Diario que se encontraba detrás del mostrador cuando ingresó una persona, que se dirigió hacia el sector de las heladeras dado que pretendía comprar alguna bebida.
Enseguida ingresaron oficiales de la Policía Local, “me preguntaron si estaba todo bien y el hombre me hacía señas para que no dijera nada. Cuando vi que se distrajo los alerté y se dieron cuenta que estaba adentro”, y fue allí que se produjo la aprehensión.
“Estaba tranquilo, pero fue muy rápido. Entró la policía, me preguntaron, lo detuvieron, lo requisaron y lo llevaron”, resumió.
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