El pulso de la semana
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Sobre cero
Es más que una sensación. La inseguridad, que en los últimos meses había alzado las voces de vecinos de distintos zonas de Tandil, está instalada. Lo importante ahora sería evitar que se vuelva una costumbre, que se naturalice, que sólo se traduzca en los fríos números que marcan las estadísticas.
El crimen de Luis Oscar Fernández sacudió la modorra serrana el viernes por la tarde, en el comienzo del fin de semana. Vino a confirmar que no se puede bajar la guardia o que los medios de prevención del delito no son los suficientes.
Porque el hombre de 75 años fue ultimado en un intento de robo, y esa teoría es la que maneja la Justicia. No hay otras sospechas, como de movida ocurrió con la beba de Ayacucho.
Los detalles del crimen hielan la sangre, erizan la piel, provocan escalofríos. Lo golpearon con un fierro en la cara, y lo cortaron en el cuello y el abdomen. Era discapacitado, su marcha era dificultosa por las secuelas de una poliomielitis, no habrá logrado defenderse. Y el indicio, además del terrible final, es la violencia manifiesta por parte de los autores del hecho macabro.
Ahora bien, en el cierre de la campaña de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias, el intendente Miguel Lunghi decía que “en Tandil, como todo, si te toca, te toca, y es gravísimo”, aunque “siempre antes de las campañas te tocan primeras planas en los diarios” referidas a hechos delictivos.
Así, el jefe comunal retrucaba las críticas de quienes estuvieron en la vereda de enfrente, los candidatos de todo el arco opositor que instalaron como una de las problemáticas centrales la necesidad de tomar acciones para garantizar la seguridad.
Ante un homicidio en ocasión de robo, la inseguridad deja automáticamente de ser una sensación. Un crimen no lo inventa la prensa, sólo lo cuenta.
Ojalá pronto podamos dar la noticia del esclarecimiento de este cruento episodio. Al menos así, la sensación sería que el Estado puede más que un reducido grupo que vive al margen de la ley.
Pero ahora no hay vuelta atrás. La estadística de las muertes en hechos delictivos en Tandil en 2011 ya escaló el cero…
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