La defensa de un acusado de abuso sostiene que no hay pruebas y pide la absolución
El próximo martes, el Tribunal Criminal 1 de esta ciudad deberá dictar el veredicto y la sentencia en el marco del juicio que se sigue a un septuagenario, acusado de abusar de su nieta adoptiva.
El lunes, durante los alegatos, se vivieron momentos tensos y conmocionantes. El fiscal Luis Piotti solicitó para el imputado la pena de ocho años de prisión, por el delito de abuso sexual agravado en concurso ideal y corrupción agravada.
La defensa, a cargo de la doctora Patricia Victoria Perelló, pidió la absolución de su cliente. Habló de una co construcción del relato de la menor, y sostuvo que la prueba producida demuestra que los hechos no sucedieron.
Tras los alegatos, el acusado pidió la palabra y ofreció un desgarrador relato de lo que tuvo que padecer a partir de la denuncia en su contra.
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Los argumentos
En diálogo con El Eco de Tandil, la doctora Perelló se presentó como ?abogada defensora del señor Rubén Abel Dátola? e inmediatamente monologó sobre los alcances del caso en cuestión.
?Mi cliente ha sido juzgado por presunto abuso sexual de una hija adoptiva de su hijo. Toda la prueba que se produjo durante este tiempo muestra que los hechos en verdad no ocurrieron. Según lo que dice la menor, sucedían en una casa donde vivían pensionistas, se fabricaban pasteles, concurrían alumnos de canto. La nena, de diez años, tiene una conflictiva personal previa grave, porque fue abandonada por su padre biológico. Es una historia compleja?, sostuvo en principio.
-¿Qué es lo que desencadena la imputación?
-La realidad es que había un quiebre entre el señor Dátola y su hijo, que es el padre adoptivo de la nena. Había un conflicto, que fue generando toda esta situación.
Acá es importante destacar que intervino una psicóloga particular, Daniela Lezcano, que hizo entrevistas a los menores de manera inapropiada, que hacía terapia con todas las personas del grupo familiar, que hizo diagnósticos apresurados de abuso. Es una persona que tiene denuncias previas ante el Defensor del Pueblo por diagnósticos similares.
-¿Asegura que la prueba producida no es suficiente para condenar?
-Lo que queda claro es que los jueces tienen que resolver esta causa no por peritajes psicológicos sino por prueba. Y la prueba lo que dice acá es que los hechos no pasaron. Con la psicología uno puede decir que algo es blanco y también puede decir que lo mismo es negro. Creo que acá hay que resolver como se resuelve cualquier otro juicio.
Los alegatos
-¿Qué sucedió durante los alegatos?
-El fiscal pidió ocho años de prisión porque considera que son cinco delitos de abuso, que está agravado porque al ser el abuelo sería el guardador de la menor.
Yo pedí la absolución, porque los hechos no existieron. De todas maneras, digo que lo que relata el fiscal es un solo hecho, en delito continuado no agravado porque no existía ninguna guarda. Eso es insostenible.
-Usted pone el foco en la conflictiva relación padre hijo…
-Sí, un conflicto a partir de que el hijo ingresa en los Testigos de Jehová. Cuando era joven el hijo estudiaba arquitectura en Mar del Plata, estaba casado, tenía un futuro promisorio. Conoce a esta nueva mujer, deja a la esposa, la carrera e ingresa a los Testigos de Jehová. La mujer ya tenía a la nena, y luego tienen un nene. Su padre comienza a reclamarle porque él no tenía trabajo fijo ni dinero. Para él fue una gran desilusión porque su hijo tenía un futuro que quedó trunco.
En el medio de estos conflictos aparece la nena diciendo cosas que no se corroboran con la realidad.
-Me decía que allí aparece la psicóloga…
-La psicóloga es todo un tema, todo es en el marco de esta psicóloga. Preparar a los chicos es difícil, porque uno le dice al chico: ?decí tal cosa?, y el chico dice: ?me dijo que dijera tal cosa?. Al chico es más fácil inducirle el relato a través de preguntas, que prepararlo. Se llama co construir el relato, porque la memoria es una construcción, y cuando construyo con otro estoy co construyendo. Entonces, en este caso, la nena utiliza una terminología que no es propia de una nena de nueve años, se nota que toma como propio un relato que no le es propio. Hay un montón de inconsistencias y sobre todo una confrontación con la realidad que hace imposible que pasara lo que ella dice que pasó.
Se dijo que la psicología no aprueba hechos, esto es lo importante. Espero que los jueces juzguen por la prueba y no por psicologismos. Más cuando la perito oficial cometió graves errores que están demostrados.*
El inicio de la causa
?Esta causa no se inicia por esta nena, supuestamente los abusados eran otros dos nenes. Después se descartan esos abusos y aparece esta nena como la víctima. Es como que hubo una denuncia original que quedó sin efecto y después aparece una modificación de la denuncia. Es una cosa totalmente traída de los pelos. Además, la psicóloga Lezcano ya tiene antecedentes sobre el tema?, describió Perelló.*
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