Leonel Pernía: “El toque fue alevoso”
-Dejamos en pista todo lo que teníamos. El toque me complica un poco las posibilidades. Me quedó la sensación de que la sanción a “Bebu” tiene sabor a poco. Por la forma en que fue el toque y cómo repercutió.
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-¿Por como te quedó el auto quedaste sin chances de perseguirlo?
-Claro, el toque me lo cambió mucho. De por sí, el arrancó con un auto superior al mío, después del toque el suyo era tres veces mejor que el mío. El quedó con la chance de atacarme con el auto entero, el mío estaba herido.
-¿Qué te sugería en la previa el hecho de tener que definir con Girolami?
-Pensé que iba a ser una carrera luchada, a chapa y chapa. El toque fue alevoso, fue fuerte y con consecuencias grandes. Fue más allá de lo que yo esperaba.
-¿Cuán importante era lograr el “1” en la clasificación?
-No tanto. Largando primero iba a tener el mismo auto que tenía. “Bebu” se mostró muy contundente durante todo el fin de semana. Nosotros tuvimos un gran auto en toda la temporada, y en esta carrera hicimos lo que pudimos con lo que teníamos, que era un poquito menos que lo suyo. Esa es la realidad.
-¿La diferencia en favor de Girolami pasaba sólo por el potencial de su auto o también por las características del circuito de San Luis?
-Por las dos cosas. Creo que las características de este autódromo favorecían un poco al Peugeot. Nosotros íbamos al tope de nuestras posibilidades, y si lográbamos hacer el “1” en clasificación era con más esfuerzo del que pudo haber hecho “Bebu”.
-¿Llegaste a ilusionarte con alguna sanción de otro tipo para Girolami una vez finalizada la prueba?
-No. Se le dio un apercibimiento y las autoridades no podían tomar otro tipo de decisión. Yo, desde arriba del auto, le dije a mi equipo que la maniobra de “Bebu” era para un “pase y siga” porque me perjudica. No es un toque que me pone un poco de costado dejándome arriba del asfalto y devolviéndome la posición. Es un roce que me tira al pasto, me hace cruzar por arriba del piano, después vuelo, caigo, rompo una llanta y el piso. El auto empezó a transitar diferente. Decidieron darle un apercibimiento y ya no podían dar marcha atrás.
-¿Qué análisis hicieron en tu equipo sobre esa maniobra?
-Están todos muy calientes y amargados. Cuando hablo de equipo me refiero a desde directivos de la marca hasta los integrantes del equipo que trabajan en mi auto. Fue un toque que complicó mucho nuestras chances, imaginate que en condiciones normales ya se me complicaba para aguantar a Girolami. Después del toque, más allá del daño en tu auto, te cambia la cabeza, empecé a pensar que él podía seguir luchando de igual forma, sin ninguna merma en su auto y yo debiendo hacerlo con una herramienta todavía menor a la que tenía en la largada.
-No es poco cinco subcampeonatos en la categoría, pero a éste debe tener gusto a poco.
-Sí. Son cinco definiciones de las cuales a tres llegué en desventaja. Hubo dos que los podría haber ganado. Me parece que ayer (por el domingo), más allá de todas las condiciones que se dieron en la carrera, podría haber hecho un poco más para hacérsela más difícil a “Bebu”, inclusive después del toque. Ya está, lo volveremos a pelear la próxima.
-¿Este año te sentiste más cerca del título que nunca?
-No. Quedé preocupado por la contundencia que mostró el auto de Girolami el sábado. Cuando más cerca de ser campeón fue el que perdí con Fontana en Potrero de los Funes.
-Hace un par de semanas definiste otro campeonato, el de TN, y también lo perdés con una acción polémica.
-Sí, me tocaron dos definiciones en las que venía adelante y recibí un golpe. Se dio así, hay que seguir para adelante, no cambiar nada de lo que venimos haciendo bien y mejorar lo que hago mal.
-Independientemente de este sabor amargo, ha sido un buen 2015 en lo personal.
-Sí, ganamos carreras en las tres categorías (TC, Súper TC 2000 y TN), peleamos los campeonatos. Obviamente, uno quiere ganarlos y no se conforma con haberlos peleado. Pero no hay que dejar de ver lo bueno y aprender de lo malo.
-¿En el TC te faltó un poco de potencial para pelearles de igual a igual a los mejores?
-No, tuve mala suerte con la rotura de La Pampa y con la tierra que me encontré en Río Gallegos. Creo que terminamos siendo referentes de la marca, con uno de los mejores autos de la categoría. Integré un equipo que venía prácticamente con la intención de retirarse de la categoría. Apostamos, lo dimos vuelta con “Fino” Gliemmo y lo pusimos ahí donde terminamos.
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