Tributo a Sabina cumple ocho años
-¿Qué le han dado estos ocho años?
-Infinidad de amigos, historias? porque la noche tiene su encanto agregado, muchos viajes, tocar por un montón de lugares, pero lo que más destaco son los amigos.
-¿Se viste como Sabina? Se lo pregunto porque hay artistas que lo hacen.
-Yo no, soy Francisco Olano cantando canciones de Joaquín Sabina.
-¿Qué significa el cantautor para usted?
-Es la banda sonora de mi vida y creo que de un montón de gente, por algo llena el estadio de Boca como lo hace. Es la palabra justa en el momento justo, si no te encontrás en una canción te encontrás en otra.
-¿Qué le pareció ?Tiramisú de limón??
-No es un súper disco, no es el que más me gusta.
-¿Le gusta este Sabina actual, un poco ?más juicioso? o el ?atorrante?
-Sabina es Sabina siempre. El último disco tiene un tema ?Cristales de bohemia? que es impresionante y otras canciones que parecen relleno, como suele pasar. Uno escucha ?Mentiras piadosas?, y es un discaso de punta a punta.
-¿En el verano hace temporada fuera de la ciudad?
-Sí, me voy en enero y vuelvo en marzo, toco en la costa. Es todo un desafío sacar la guitarra y ponerse a cantar las canciones de otro; sin embargo la respuesta del público es muy buena, me acepta y disfruta el show.
-¿Compone sus propios temas?
-Sí, letra y música, pero todavía no se ha dado presentarlas en un formato de escenario.
-¿Por qué?
-Siempre les falta algo a mis canciones?
-Hay quienes los ponen en lugares opuestos a Sabina y Arjona, ¿cómo lo ve usted?
-No siento que Arjona tenga la carga poética que tiene Joaquín, pero de ninguna manera es un músico menor.
-¿Piensa continuar tributando?
-Sí, ya que me da placer, cuando no me lo dé lo dejaré, porque no tendría sentido hacerlo.
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