Alumnos y obreros de Polivalente salieron a la calle a protestar por la paralización de la obra
Estudiantes de la Escuela Polivalente de Arte y obreros de la Uocra se manifestaron ayer en las puertas del nuevo edificio, en 4 de Abril y Sarmiento, para reclamar que se reinicie la obra, tras la decisión que tomó este lunes la empresa Serber SA de paralizarla por los más de 6 millones de pesos que le adeuda la Unidad Ejecutora Provincial (UEP).
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La movida, organizada desde el centro de estudiantes, comenzó alrededor de las 10 y contó con el acompañamiento de directivos, docentes e integrantes de la asociación cooperadora.
Sin cortar el tránsito vehicular, los chicos fueron apostándose sobre la vereda de 4 de Abril con coloridos carteles, en los que plasmaron distintas frases como “No falta dinero, sobran ladrones”; “Somos un ejército de soñadores, por eso somos invencibles”; “Queremos nuestra escuela”; “Que no pisoteen nuestros derechos”, entre otras.
Además, interpretaron canciones en vivo, mientras los autos que transitaban se acoplaban al reclamo con extendidos bocinazos como señal de apoyo.
Por su parte, los casi treinta obreros que se encontraban hasta este lunes trabajando en el proyecto y fueron momentáneamente despedidos se sumaron también al reclamo, acompañados por el secretario general de la Uocra en Tandil, Daniel Sagrera.
Al igual que los chicos, algunos trabajadores alzaron diferentes cartulinas blancas con oraciones como “Nosotros trabajamos, que la UEP cumpla y pague”; “Sin certificados no hay trabajo”; “Que no nos quedemos sin trabajo”; mientras otros hacían sonar los tambores.
Hasta allí se acercaron también los secretarios generales de Suteba, Hugo González; y de la Asociación Bancaria, Juan Manuel Carri.
Lo cierto es que, una vez más, la decisión que tomó la constructora Serber SA, que llegó prácticamente en la recta final de la obra, reavivó la preocupación de toda la comunidad educativa que decidió salir a la calle para visibilizar un reclamo que ya lleva muchos años y que, lamentablemente, sigue sin poder concretarse.
La voz de
los chicos
En diálogo con El Eco de Tandil, el presidente del Centro de Estudiantes, Lautaro Andrés, explicó que decidieron manifestarse en protesta por la paralización de la obra. “Estamos también por el despido de los trabajadores y porque no se finaliza el edificio”, afirmó.
Andrés señaló que en realidad el proyecto se encuentra en la recta final y por eso “es una indignación” que vuelva a frenarse. En lo personal, contó que cuando ingresó a la escuela, el edificio recién se estaba comenzando a edificar y hoy, seis años más tarde, todavía no está finalizado.
El joven dijo que esto genera “algo negativo” entre los propios alumnos porque muchos ingresan a la institución y egresan sin ver el proyecto terminado. “Por eso decidimos salir a protestar nuevamente porque ya estamos cansados”, manifestó.
Por último, en el marco de la manifestación, precisó que también habían confeccionado un petitorio y la idea era juntar firmas para poder entregárselo a las autoridades correspondientes.
Un reclamo
“justo”
Por su parte, la directora de la institución educativa, Nancy Mazza, lamentó la situación que se dio en los últimos días, sobre todo, porque “falta muy poquito y han sido muchos años reclamando y siempre, si no reclamamos, no pasa nada”.
Confirmó luego que la manifestación de ayer “la generaron los propios chicos y obviamente nosotros los apoyamos. Están con un reclamo justo por tener un edificio y porque esto se continúe”.
“Y además -advirtió- esto tiene consecuencias pegadógicas que uno también va sufriendo con los años. Una cosa es estar uno o dos años en dos edificios, pero ya hace bastante que estamos así”.
Puntalmente, recordó que “la primera parte se entregó en 2006 y el otro tramo, que fue el último, en 2015. A partir de allí, la empresa fue construyendo firme, pero ya pasaron dos años más, es decir, no es una cuestión de un año. Acá venimos hace 11 años esperando el edificio”.
“Sería un desperdicio
no tener la obra”
Por último, Mazza valoró el cumplimiento de la constructora Serber SA, que si bien se ha extendido un poco con los plazos, venía avanzando a paso firme en la construcción. “Le faltará un 20 por ciento para terminar porque cuando uno ingresa a la obra puede ver que ya están los pisos, las mesadas y las instalaciones. Simplemente, faltan los revoques y las terminaciones, y es un desperdicio no tener la obra”, lamentó.
Por lo tanto, deseó que pueda destrabarse esta situación lo antes posible porque señaló que “una semana que no se trabaje, es una semana más de retraso y el año que viene -como teníamos pensado- no vamos a poder arrancar el nuevo ciclo lectivo acá”.
Sagrera deslizó que el conflicto
podría agudizarse la semana próxima
Por su parte, el secretario general de la Uocra en Tandil, Daniel Sagrera, explicó que junto a los trabajadores resolvieron manifestarse para pedir el reinicio de las tareas, que la obra continúe y que no se pierdan las fuentes laborales.
Aclaró luego que no sabían que los alumnos también iban a salir a la calle, como lo han hecho en anteriores oportunidades.
Por otro lado, valoró la presencia de los gremios que se habían acercado al lugar para solidarizarse con la medida. “Estamos acá en forma pacífica reclamando que la obra se reinicie y que no se pierda la fuente de trabajo”, reiteró Sagrera.
Precisó que ayer se cerró una quincena y la semana próxima estarían cobrando, pero confirmó que “lamentablemente la situación no es la mejor, la empresa ya nos avisó que nadie se comunicó para pagarle los certificados y dice que no puede seguir más en esta situación”.
Indicó que Serber SA “tiene todos los calefactores para terminarla, el ascensor comprado, todos los materiales, es decir, tiene intenciones de terminar con la obra”.
Sin embargo, este lunes decidió no continuar hasta que la Provincia no le pague el dinero que le adeuda. Mientras tanto, el dirigente gremial insistió en que la semana próxima los trabajadores deberían cobrar la quincena y, de no ser así, deslizó que “habrá un conflicto más grave”.
“Nosotros inclusive hoy ni siquiera estamos cortando la calle. La gente lo que quiere es trabajar, la situación en el país no es de las mejores, se ha perdido mucho el poder adquisitivo, no alcanza el dinero y encima, para peor, que queden casi treinta trabajadores en la calle, es lamentable”, finalizó.
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