Hoy, mano a mano con Franco Daniel Cabrera
Sus primeros trabajos en Tandil estuvieron vinculados con los boliches que existían en la década del 90. Con el paso del tiempo se convirtió en uno de los más destacados empresarios gastronómicos de la ciudad. Integra en la actualidad varias sociedades, pero proyecta construir su propio local comercial.
Llegó a Tandil procedente de su Gonzales Chaves natal, y en poco tiempo, Franco Cabrera se ganó el afecto de muchas personas y construyó lazos de amistad muy fuertes que perduran en el tiempo.
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Hoy es uno de los empresarios más prestigiosos de la ciudad en el rubro gastronómico, pero sus inicios estuvieron ligados a los lugares de esparcimiento nocturnos. Fue el responsable en Tandil de Yamó Discotheque, un lugar por siempre recordado para muchas personas. Permaneció hasta que los dueños decidieron cerrarlo y continuó su vínculo con la noche trabajando en otro emblemático boliche como Woody. Pasó por Ingenios Gráficos y regresó al fluido contacto con la gente con el surgimiento en la ciudad de Paca Bar.
Más tarde, estuvo dos años en Uni Restó Bar; otros dos trabajando en Syquet y desde el 2007 al 2012 se vinculó a parrilla y restaurant La Pulpería.
David y Gabriel Marcassó, Pedro Sánchez, Federico Albano, Sandra Maqueira, Diego Drysdale y Sebastián Espada son algunos de los amigos-socios que lo han acompañado en todo este tiempo desde su llegada a la ciudad.
En la actualidad y con distintas sociedades, está involucrado en El Criollo, La Rueda, El Bodegón del Fuerte, Pink y Uma Eventos; además del geriátrico denominado Reminiscencias que tiene junto con su señora.
Franco Cabrera fue la persona seleccionada para este domingo y aceptó gustoso responder el cuestionario dominical, donde permite conocer sus gustos más en profundidad.
1) El mejor café: El expreso doble de la mañana leyendo El Eco de Tandil.
2) El mejor consejo que le han dado: ”Hacé andar el carro, que los melones se acomodan solos”.
3) La banda de sonido de una película: La de Tarantino en “Tiempos violentos”.
4) La reunión ideal: Almuerzo con familia y amigos, todos juntos hasta la tardecita.
5) Tiempo perdido: El de los trámites burocráticos.
6) Tiempo valioso: Reuniones creativas de trabajo.
7) Un actor: Daniel Day-Lewis.
8) Un amigo: Muchos y buenos.
9) Un amor: Mi mujer, Anahí Soulie.
10) Un animal: El gallo.
11) Un artista plástico: Alejandro “Toto” Azcue.
12) Un auto: Alfa Romeo.
13) Un color: Rojo.
14) Un conductor de televisión: Marcelo Tinelli.
15) Un disco: Álbum de Oro de Julio Sosa.
16) Un enemigo: El pesimismo.
17) Un escritor: Oliverio Girondo.
18) Un ideal: Que podamos convertir a Argentina en un país normal.
19) Un juego o juguete: La pelota de fútbol.
20) Un legado: Que siempre se puede, aunque cueste.
21) Un libro: La Biblia.
22) Un lugar: Tandil.
23) Un proyecto: Construir mi propio local comercial.
24) Un recuerdo: Los de la infancia, el primer beso.
25) Un referente: Mi tío Eduardo Echever.
26) Un sabor: El del asado.
27) Un sueño: Que mi hija se realice.
28) Un viaje: El que hice con dos de mis mejores amigos a Europa.
29) Una actriz: Cate Blanchett.
30) Una banda extranjera: U2.
31) Una banda nacional: Soda Stereo.
32) Una bebida: Vino tinto en invierno y blanco en verano.
33) Una cábala: Firmar contratos e inaugurar mis negocios en luna llena.
34) Una canción: Adiós Nonino.
35) Una causa: La preservación del medioambiente.
36) Una cuenta pendiente: Terminar mi carrera universitaria en la Unicen.
37) Una época: La actual.
38) Una estación: Las cuatro, todas tienen su encanto.
39) Una fecha: 22 de agosto, mi cumpleaños.
40) Una flor: La flor del aromo.
41) Una fragancia: La de los tilos.
42) Una fruta: El durazno.
43) Una obligación: Hacer dieta.
44) Una obra de teatro: “Un tranvía llamado deseo”.
45) Una película: El hijo de la novia.
46) Una posibilidad: La que me dio Luis González de tener junto a él mi primer negocio.
47) Una pregunta: ¿Por qué los gobiernos ponen tantos palos en la rueda?
48) Una prenda de vestir: Los zapatos.
49) Una tradición: La fiesta de San Juan.
50) Una utopía: Que todo el mundo tenga las mismas posibilidades.