Panaderos pedirán audiencia con Lunghi por la crisis que atraviesa el sector
Desde la Federación Panaderil Bonaerense comunicaron que el rubro enfrenta momentos críticos. Reclaman controles hacia los establecimientos informales que condujeron al cierre de más de 200 panaderías habilitadas en el territorio provincial. En el ámbito local, solicitarán una audiencia con el Intendente en pos de obtener un subsidio en el consumo de energía.
El incremento que sufrieron las tarifas de luz y gas, la afluencia de bocas de expendio que funcionan de manera irregular y el aumento que registraron durante 2018 los insumos propios de la industria panaderil, pegaron de lleno en el sector que a través de sus referentes provinciales y locales, notificaron la situación crítica que se vive desde el año pasado.
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Así lo formuló el presidente de la Federación Panaderil Bonaerense, Emilio Majori, quien en diálogo con Dulce o Amargo (104.1 Tandil FM) detalló el panorama y las acciones que movilizaron a los empresarios del rubro a presentarse en las oficinas de las prestatarias de gas, en cada localidad del país.
“Estamos atravesando un momento crucial porque más allá de la presión impositiva y tributaria, las panaderías formales estamos teniendo una baja del consumo alarmante ya que no podemos vender el producto como se debe vender ante la competencia desleal que hoy realizan muchos comercios”, aseguró Majori
Según describe, el problema fundamental radica en la falta de controles en la aplicación de las normas vigentes que promueven la habilitación, la contratación de personal y los tributos que se dejan de pagar para comercializar el pan a bajo costo.
A manera de ejemplo, manifestó que “hoy un clandestino no cumple con ningún impuesto mientras que, desde el sector formal, por un obrero al que se le paga un salario de 24 mil pesos, debemos abonar al fisco una suma cercana a los 40 mil pesos”.
Majori indicó además que “el pan nunca va a desaparecer porque es patrimonio argentino y sudamericano pero sí, van a dejar de existir las panaderías formales porque ante este panorama, no hay establecimiento que resista”.
Efectivamente, días atrás en conferencia de prensa las autoridades de la Federación Argentina de Industria de Pan y Afines precisaron que en el último tiempo cerraron mil panaderías en todo el país, y que el índice de clandestinidad en el rubro ronda el 40 por ciento.
A más datos, el presidente de la Federación Panaderil Bonaerense informó que esta cifra se corresponde con el cese de la actividad que en el territorio provincial durante 2018 registró un total de 200 establecimientos. “La situación se está agravando y creemos que la panadería formal está en vías de extinción”, agregó.
Acciones concretas
Por su parte, Javier Guiralde, miembro de la entidad provincial, brindó detalles acerca de la presentación que llevaron adelante ayer en las oficinas de la empresa distribuidora Enargas, tramitación que también tuvo su correlato en nuestra ciudad en las instalaciones de Camuzzi a través de los referentes del Centro de Panaderos filial Tandil.
En este sentido Guiralde sostuvo que “como integrantes de la Federación asistimos a los asociados para que comiencen a gestionar un certificado ante la AFIP que les permitirá estar encuadrados bajo la denominación de micropymes y de esta manera obtener un beneficio del 50 por ciento en el consumo de gas”.
“La solicitud se hace de manera individual y hay una serie de requisitos que cada panadero debe cumplir para poder aplicar al subsidio”, puntualizó.
Entre la documentación con la que se deberá contar Guiralde señaló que los particulares necesitan certificar la actividad ante la AFIP, estar inscriptos en Ingresos Brutos y presentar la titularidad del inmueble a través de escritura si se es dueño, contrato de alquiler en caso de ser locatario y si fuera una sociedad, los estatutos.
“El beneficio en sí, es un proporcional que se basa en el consumo del año anterior al mismo mes y a partir de allí, se ejecuta el descuento que se verá en la factura del mes siguiente”, explicó.
“Estamos por todos los medios buscando subsistir ante la situación que hoy se vive en el país y más allá de la estrategia que cada uno implemente en su comercio, necesitamos que en este momento crítico, se pueda dar una mano al sector en general”, subrayó Guiralde.
“Hoy ser clandestino es un gran negocio, porque quienes estamos con los papeles en orden, tenemos dos opciones; o pasamos a la informalidad y dejamos de pagar casi el 70 por ciento entre servicios, cargas patronales e impuestos, o bajamos la persiana”, concluyó.
La iniciativa local
Víctor Barsola, presidente del Centro de Panaderos de Tandil, comunicó que desde el ámbito local ya se iniciaron las acciones correspondientes en la distribuidora Camuzzi Gas Pampeana.
En efecto, Barsola comunicó que “junto a los representantes de la Federación hemos podido conseguir una reducción en el gas del 50 por ciento del consumo neto que nos llega en la factura y esto representa un descuento muy importante”.
Indicó además que también se encuentran abocados a las gestiones que buscarán obtener un beneficio similar en las oficinas de las empresas de energía, en el caso de Tandil ante la Usina Popular.
En este marco anticipó que solicitarán reunirse con el intendente Miguel Lunghi con la intención de lograr un “subsidio, que se puede cristalizar a través de la eliminación de los impuestos municipales en las boletas” de servicios públicos.
“Nos estamos fundiendo, en la ciudad cerraron cuatro panaderías en pocos meses y necesitamos que tanto el Gobierno provincial como el Ejecutivo local nos atienda a ver si pueden darnos una solución definitiva, más allá de estos paliativos”, aseguró Barsola.