Líneas de colectivos pararon tras el ataque contra un chofer
Los trabajadores de cinco líneas de colectivos que recorren la zona oeste del Gran Buenos Aires iniciaron ayer a la mañana una huelga por 24 horas en protesta contra un violento asalto a un chofer que fue atacado y recibió al menos tres puñaladas.
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Las líneas que se encontraban paralizadas son la 311, 329, 422, 500 y 501, administradas por la empresa de transporte urbano de pasajeros La Perlita y que circulan en los partidos bonaerenses de Moreno, Merlo y General Rodríguez.
La huelga se inició luego del ataque que sufrió el martes a la noche un chofer de la línea 501 que realizaba el recorrido número nueve de ese ramal y recibió las puñaladas en los brazos y en la cara por dos delincuentes que intentaron robarle sus pertenencias.
El ataque ocurrió en el barrio de Las Catonas, en la localidad bonaerense de Moreno.
Según informaron fuentes policiales, el trabajador atacado no se resistió al robo pero los delincuentes lo agredieron debido a que la víctima no llevaba dinero o pertenencias de valor.
En tanto, los empleados de la empresa La Perlita, ubicada en Francisco Piovano 3553 de Moreno, reclamaban ser recibidos por funcionarios del ministerio de Seguridad que conduce Cristian Ritondo para denunciar la inseguridad que se vive en esa zona del oeste bonaerense.
Por lo pronto, estaba programada una reunión con los responsables del municipio y la distrital de policía, aunque aseguraron que iban a continuaron con el paro.
La agresión
Según relataron sus compañeros ante la prensa, el chofer, de 57 años, fue atacado cerca de las 22 del martes por uno de los tres hombres que subió al colectivo como pasajeros y cuando la unidad pasaba por el barrio Las Catonas enunciaron sus intenciones de robo.
“Uno de ellos, que tenía un arma de fuego, les empezó a robar a los dos o tres pasajeros que había y otro amenazó al chofer con un cuchillo tipo tramontina”, contó Ariel, compañero del trabajador agredido.
“Le sacaron la alianza y los 70 pesos que tenía encima, pero cuando le pidieron las zapatillas se resistió. Le dieron dos puñaladas en un brazo y le rozó la cara con el cuchillo”, contó.
Los delincuentes se escaparon y el chofer herido fue llevado a una clínica de la zona, donde fue asistido y curado, mientras que a las 5 de ayer fue dado de alta.
“Estamos cansados, el reclamo es para la gente que tiene que velar por nosotros. Tiene que haber más recorridos y más móviles, y las empresas tienen que cumplir con la reglamentación de las cámaras de seguridad en las unidades”, dijo Eduardo Morandi, delegado del gremio de choferes UTA, que los acompañaba en su reclamo.
Ariel sostuvo que el accionar de la Policía es insuficiente por falta de recursos.
“Moreno es un distrito muy grande, pero hay sólo dos patrulleros dando vueltas y la frazada es corta: nos protegen por un lado, pero nos pegan por el otro”, se quejó.
La inseguridad en los colectivos del conurbano se cobró una vida este año con el crimen del chofer de la línea 620 Leandro Alcaraz, quien fue asesinado de tres disparos el 15 de abril pasado en la localidad de Virrey del Pino, en La Matanza.
Por el crimen del trabajador de 26 años, que motivó una paralización casi total del transporte en el área metropolitana, hay tres sospechosos que permanecen detenidos.
Tras el trágico hecho, el ministro de Seguridad provincial, Cristian Ritondo, había anunciado una línea de créditos blandos otorgados por el Banco Provincia para que las empresas de colectivos pudiesen incorporar cámaras de seguridad dentro de las unidades y la entrega gratuita de botones antipánico. NA
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