Lunghi analizó uno de los años “más inquietos” de su gestión desde el 2003
El intendente Miguel Lunghi, junto al jefe de Gabinete, Julio Elichiribethy y el secretario de Gobierno, Óscar Teruggi, dialogaron durante más de una hora y media junto a la prensa sobre las diversas situaciones vividas a lo largo del 2018, en lo que definió, el jefe comunal, como uno de los años “más inquietos” de su gestión desde que asumió en 2003.
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“Ha sido un año muy difícil, tienen que pensar que el presupuesto lo hicimos en noviembre de 2017 donde tanto Provincia como Nación nos habían pedido que aumentáramos las tasas un 15 por ciento, el secretario de Economía, Daniel Binando, en conjunto con el gabinete, me convencieron de que lo hiciéramos sobre una tasa del 25 por ciento y la inflación llegó al 48 por ciento. Si hubiéramos aceptado lo otro, posiblemente el hospital habría cerrado”, declaró el mandatario.
En su informe de gestión apuntó al equilibrio para garantizar la gobernabilidad, más allá de las decisiones que debieron tomar en cuanto al manejo de los fondos de un presupuesto devaluado producto de la creciente inflación, y destacó que han pagado los salarios el día 30 de cada mes y no se registraron demoras en el pago a los proveedores del Municipio.
“Lo pudimos hacer porque hemos sido previsibles, hemos planificado y analizado qué teníamos que hacer, qué no, qué podíamos seguir llevando adelante y qué había que suspender, decidimos cuidar el dinero y hacer lo más importante”, defendió Lunghi.
Quita de subsidios
Con respecto al traspaso de los subsidios al transporte público del ámbito provincial al municipal, el Intendente informó que será evaluado en comisión cuando se trate el presupuesto de la Provincia para lograr un término medio. Para Tandil el subsidio de los colectivos implica 80 millones de pesos en efectivo y 40 millones de pesos en gasoil que el Estado local no está en condiciones de afrontar. “Lo van a debatir y esperamos que se llegue a un acuerdo, son pocas las ciudades de la Provincia que tienen colectivos sacando el Conurbano, no tenemos tanta fuerza, pero creo que vamos a poder llegar a un acuerdo”, añadió.
Sin ánimos de aventurar ninguna candidatura ni proyección para 2019 -año electoral y último de este mandato-, Lunghi refirió que por ahora sólo piensa en llegar al 31 de diciembre y apostó a que las aguas se calmen durante la última parte del corriente ciclo, “no va a ser fácil, pero tenemos que sacarnos el miedo de que va a ser un diciembre como hemos vivido antes porque sino no podemos avanzar, que la gente que no la pasa bien sea ayudada por el Municipio y tengamos un poco de tolerancia”.
Conflicto con los trabajadores municipales
El Ejecutivo se encuentra en un periodo de conciliación obligatoria con el sindicato de Trabajadores Municipales, en el marco del conflicto salarial que mantienen ambas partes.
Sobre el tema habló Oscar Teruggi, quien lleva adelante las negociaciones con la representación gremial y la cartera laboral bonaerense.
“Todos los salarios, públicos y privados, van a perder con respecto al proceso inflacionario. Lo que planteamos es que, dentro de las prioridades del Municipio, se ha fijado la recomposición salarial. Ratificamos la propuesta del 15 por ciento, que es lo que podemos pagar. Lo que hablamos con el Sindicato es que hay algunas variables dentro de esa propuesta que se pueden trabajar y vamos a hacer un esfuerzo las dos partes. Nos reuniremos la próxima semana, hay alguna voluntad del gremio de reveer la pretensión para poder cerrar el acuerdo y no llegar a la instancia final de los tiempos que marca la conciliación”, se expidió el funcionario, reconociendo que el reclamo es legítimo.
Pilotos de tormentas
El Estado municipal tuvo que hacer frente a un año duro, en el que los ánimos sociales se agitaron, lo que generó 31 marchas y reclamos de todo tipo en la sede del Gobierno comunal. Desde la problemática por la infraestructura escolar materializada en los inconvenientes surgidos en los edificios del IPAT, Polivalente y Conservatorio, hasta el cierre definitivo de Metalúrgica Tandil.
“Solucionamos el problema del Polivalente y Conservatorio que son dependencias provinciales, no nos corresponde a nosotros; hemos estado en todos y cada uno de los problemas que se han presentado en la ciudad”, manifestó el primer mandatario.
Por su parte, Elichiribehety expuso que en los tiempos de tensión hay cuestiones que quedan en un segundo plano y por esta razón el Gobierno ha debido conseguir un fino equilibrio, para priorizar la gestión mas allá de la coyuntura nacional y provincial.
“Ha sido un año de evitar, lo que se evita no se mide, no se puede dimensionar. Más que de proponer y programar, este ha sido un año en el que hemos tenido mayor conflictividad y esto se inscribe dentro del campo de la política”, expresó.