Pese a las críticas de la oposición, el oficialismo sumó a Integrar y aprobó el Presupuesto 2020
El bloque de Juntos por el Cambio defendió la visión en términos de recursos que planteó el Ejecutivo para el próximo ejercicio. Y sumó la adhesión del bloque de Mauricio D’Alessandro. La oposición votó en contra y realizó duros descargos sobre los lineamientos de la gestión. Enfocó sus objeciones en la presión tributaria y en la asignación de prioridades.
En el marco de una sesión que se extendió por casi seis horas, la mayoría representada por el bloque Juntos por el Cambio, con el acompañamiento de Integrar, aprobó el proyecto de cálculo de recursos y presupuesto de gastos para 2020 y las ordenanzas fiscal e impositiva.
Recibí las noticias en tu email
En el nuevo encuentro, el oficialismo se encargó de abrir el debate al exponer los principales lineamientos que incorporó el Departamento Ejecutivo para el próximo ejercicio.
Como estaba previsto, se alineó para dar los votos necesarios y sancionar la herramienta que le permitirá al intendente Miguel Lunghi transitar el primer año de su quinto mandato, y logró sumar las adhesiones del bloque Integrar, Mauricio D’Alessandro y Nilda Fernández, que no acompañaron un artículo que faculta al Ejecutivo para la modificación de partidas sin solicitar acuerdo al Legislativo.
En general, el proyecto de presupuesto fue sancionado con 13 votos a favor y siete en contra, al igual que las ordenanzas que contemplan las modificaciones en los cuadros tributarios.
La oposición, en tanto, direccionó sus objeciones a la presión tributaria que recae en el contribuyente que, en medio de un escenario de retracción de la economía, se traduce en un 51 por ciento en promedio anual, y rechazó el escalonamiento planteado: del 37 por ciento para el primer trimestre, un 13 por ciento para el segundo trimestre y un 10 por ciento para el último semestre.
Además, volvió a enfocarse en las prioridades de la gestión al observar la distribución de las partidas asignadas a las dependencias y la ausencia de políticas que atiendan las “cuestiones pendientes” de la gestión.
Durante el extenso debate, el análisis apuntó principalmente a las áreas centrales de la estructura comunal: el Sistema Integrado de Salud Pública y las secretarías de Desarrollo Humano y Hábitat y Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales.
El encuentro
El último encuentro del año comenzó a las 12.30, dos horas después del horario previsto. Las reuniones y las negociaciones contrarreloj entre oficialismo y oposición sobre temas a tratar en la sesión demoraron el inicio del debate.
Además del presupuesto, que estuvo dos semanas en estudio, los integrantes del cuerpo estuvieron enfocados en buscar acuerdos frente a un convenio que elevó el Sistema Integrado de Salud Pública con la exSecretaría de Salud de la Nación –ver aparte- durante la gestión de Mauricio Macri para la implementación de la Cobertura Universal de Salud (CUS).
A ello, sumó el reclamo de la comisión directiva del club Rivadavia en relación a la clausura de la sede por la falta de la habilitación correspondiente para funcionar en un trámite que, en principio, está en pleno proceso.
Con los 20 concejales en sus bancas, en la segunda sesión con la nueva conformación tuvieron un primer debate al abordar un proyecto de modificación de una ordenanza para financiar obras en salud a través del Fondo de Ayuda Solidaria.
El concejal del oficialismo, Luciano Grasso, llamó a “dejar de discutir las excepciones” sobre el rol de esta herramienta que lleva 27 años vigente y “discutir el verdadero FAS”.
Por su parte, Silvia Nosei (Frente de Todos) pidió que se cumplan los plazos para la ejecución de las obras proyectadas y que “los fondos sean usados” con el destino para el cual fueron autorizados.
Los lineamientos del Presupuesto
El tratamiento del presupuesto se puso en marcha alrededor de las 14.40, cuando la concejal María Haydée Condino, titular de la Comisión de Economía, trazó los principales lineamientos de la ordenanza que expresa la visión política del gobierno del intendente Miguel Lunghi.
En cuanto a los números, precisó que el presupuesto consolidado es de 4.183.358.830 millones de pesos y que el del Sistema de Salud se incrementó un 47 por ciento en relación al actual, dado que “este Intendente trabaja haciendo hincapié en la salud pública”.
También hizo un repaso sobre el origen de los recursos, con la división sobre los que provienen de la Provincia y los que son municipales (49 por ciento y 51 por ciento).
La edil del radicalismo se detuvo en el énfasis puesto en la Secretaría de Desarrollo Productivo (exDesarrollo Económico Local), luego avanzó en la de Gobierno, con un pormenorizado detalle sobre la inversión del Fondo de Financiamiento Educativo, y detalló los recursos en la Planificación Urbana, Obras y Viviendas.
“Las obras planificadas en su mayoría son para los servicios”, destacó Condino, que señaló que aguardan certezas sobre posible financiamiento de Nación y Provincia para infraestructura.
Sobre la procedencia de los recursos, enfocó los argumentos en defensa del aumento de las tasas municipales y comparó el esquema que propone el gobernador Axel Kicillof.
Valoró la “sensatez” del Ejecutivo comunal de hacerlo de manera escalonada para alcanzar un promedio anual del 51 por ciento en los tributos y comparó la experiencia de otros municipios. “Entendemos que somos equilibrados”, sostuvo.
Producción, suelo y vivienda
Por la oposición, Juan Arrizabalaga hizo un análisis en términos de producción, suelo urbano y vivienda, con un mensaje esperanzador para que las propuestas opositoras sean escuchadas por la administración comunal. “Tandil es una ciudad hermosa, pero cada días más desigual”, definió.
Entre las consideraciones realizadas, marcó la falta de relación entre la “fuerte presión tributaria” y el programa de reactivación económica, productiva, comercial y del empleo, por lo que consideró que responde a una “necesidad de la gestión”.
Observó la ausencia de cuestiones estratégicas centrales y repasó aquellas que consideró centrales, como suelo urbano y vivienda, una de las “mayores deudas del Gobierno”.
Con cifras, realizó un extenso repaso sobre la falta de políticas en la materia y las cuestiones vinculadas al desarrollo urbano de los últimos 16 años. “La clave pasa por articular una nueva estrategia, permanente y planificada, para convertirla en una política pública”, sugirió.
Producción y empleo
Tras una breve intervención, la concejal de Juntos por el Cambio Juana Echezarreta destacó las políticas impulsadas por el Gobierno vinculadas al sector productivo y los resultados obtenidos en la gestión conjunta con el sector privado.
A su turno, Juan Manuel Carri (Frente de Todos) enfocó su alocución en la necesidad de generar trabajo “digno y de calidad”, y advirtió que son “escasos” los recursos asignados a la Secretaría de Desarrollo Productivo, la cual “sería una herramienta fundamental si hay voluntad”.
Deseó que el área a cargo de Marcela Petrantonio, “esté a la altura, se cree trabajo de calidad y digno que es el mayor ordenador social”, a la vez que se detuvo en el “aumento agresivo” de los tributos que “aleja al Estado de la realidad que vivimos los argentinos”.
Por su parte, la concejal Silvia Nosei elaboró sus cuestionamientos en torno a las falencias en materia de salud y de desarrollo social y los recursos asignados a cada área.
En el primer caso, pidió que se refuercen las partidas para salud comunitaria, señaló las falencias en los centros de salud y en la Dirección de Bromatología, mientras que en la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat se centró en las políticas de juventud y en género. “El presupuesto son números; el tema es ver dónde se pone el foco para tener esta ciudad que cada día es más desigual”, planteó Nosei.
“Una cuota de responsabilidad”
Promediando la tarde, y cuando la sesión llevaba más de cuatro horas, el presidente de la bancada oficialista Mario Civalleri solicitó observar el proyecto en términos globales y analizó que un tercio del presupuesto se destina a salud.
Respondió a los reclamos en cuanto al desarrollo productivo y obras al indicar que de 290 millones de pesos asignados para la Secretaría de Planeamiento, “más del 75 por ciento está dirigido a obras en los barrios”, y también aclaró, en relación a lo expuesto por Carri, que “debemos ser conscientes de que el Municipio tiene políticas en diversos rubros partiendo que la función primordial es brindar servicios y actuar como facilitador de ciertas políticas que deben estar en línea con el sector privado”.
Y planteó que “el Presupuesto actúa como fuelle, como un factor distributivo, porque es el Estado municipal el que terminará absorbiendo las demandas de los ciudadanos”, y sobre los “calificativos” en torno a las tasas, acusó que “la doble vara nos obliga a ser cuidadosos y responsables”.
“Creo que debemos tener una cuota de responsabilidad para no desfinanciar al Gobierno en los momentos difíciles”, instó Civalleri y reclamó “equilibrio”.
“A nadie le es grato ajustar las tasas, pero estamos en una situación ajustada; el Gobierno merece la cuota de confianza y esa mirada de consideración”, cerró.
Más lecturas
Minutos antes de las 17, tomó la palabra el presidente de la bancada del Frente de Todos, Rogelio Iparraguirre. El concejal realizó una lectura más política sobre los lineamientos propuestos por el Gobierno comunal y que “expresa el parecer de una mayoría de los tandilenses”.
Así, definió que refleja la “continuidad” en cuanto a la distribución de los recursos de las distintas áreas, sin sorpresas, por lo que en aquellos lugares “críticos” se mantiene la “misma pobreza”.
En ese sentido, citó la falta de políticas en materia de suelo y vivienda, y en función de la “desintegración social” que observan desde la bancada, se sostiene una baja ponderación en deporte, cultura y atención primaria de la salud.
Se detuvo sobre el esquema tributario local y reclamó que “la distribución de la carga sigue siendo la misma, año tras año”, a la vez que cuestionó la falta de “progresividad, segmentación y escalonamiento, que bien podría haber sido a la inversa” en cuanto al esquema de las presión tributaria.
El eje en las políticas de salud
En tanto, el concejal de Juntos por el Cambio, Luciano Grasso enfocó su análisis en la asignación de recursos del Sistema Integrado de Salud Pública, el incremento que sufrió de un ejercicio a otro, y en su argumentación buscó salir del aspecto netamente financiero para abocarse al modelo de organización y de atención en cuanto a los indicadores que arroja el sistema público.
En ese sentido, analizó cifras para medir los parámetros sobre el impacto de las políticas sanitarias, observando “si cumple con uno de los principales objetivos, que es reducir las brechas”.
“Si entendemos que la ciudadanía hace aportes esperando que, como contrapartida, los invierta bien para garantizar sus derechos, no tenemos dudas que pueden estar conformes con esta inversión de un sistema que nos enorgullece”, defendió el exdirector de Salud Mental de la Nación.