Pese al voto dividido en el oficialismo, se aprobó por mayoría la declaración de utilidad pública a exMetán
El Concejo Deliberante no ocultó las diferencias internas entre los bloques al abordar ayer el proyecto que declara de utilidad pública la adquisición del predio donde funcionaba la fábrica Metán y donde el Gobierno plantea la construcción de un centro cívico.
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Tras un amplio debate, y con distintos resultados en la votación, finalmente se aprobó por mayoría la herramienta que dará un marco de negociación para que esas dos manzanas consideradas estratégicas, ubicadas entre las calles Luis María Campos, Cabral, Doering y avenida Lunghi, pasen al dominio municipal para la concreción del proyecto.
El oficialismo acompañó el proyecto de ordenanza en términos generales pero lo hizo dividido a la hora de enfocarse en dos de los cuatro artículos que contempla ya que, desde la perspectiva de tres de sus integrantes, encabezados por Marcos Nicolini, resultan redundantes en términos legales.
En efecto, la votación en general salió por 15 votos a favor contra cinco en contra representados por los integrantes de Unidad Ciudadana. En particular, el artículo segundo, que establece que ante el desprendimiento de cualquier bien inmueble deberán remitirse las actuaciones al Concejo para su “previa aprobación”, salió por voto dividido y el presidente del cuerpo debió desempatar con su voto doble.
Lo cierto es que Gabriel Bayerque, Nora Polich, Marcos Nicolini (UCR – Cambiemos), Nilda Fernández y Gustavo Ballent (bloque Integrar) no acompañaron este punto, por considerar que los postulados se encuentran contenidos en la Ley Orgánica de las Municipalidades.
El artículo tercero, que contempla el destino que tendrán las tierras, cosechó 13 votos a favor y siete en contra (cinco de Unidad Ciudadana y dos de Integrar), mientras que el cuarto, que reclama un informe de impacto ambiental y tasación previo a la concreción de la compra, permuta, donación o expropiación del predio, sumó doce adhesiones y ocho rechazos, cinco de Unidad Ciudadana y tres del oficialismo dado que consideró que este aspecto estaba resuelto con una incorporación a última hora que daban un panorama.
Facundo Llano (bloque Justicialista) y Mauricio D’Alessandro (bloque Integrar) dieron su voto afirmativo en general y en particular.
Lo cierto es que el tema se perfilaba para la polémica y ya anticipaba un desenlace abierto en función de las posturas y matices que mostraron algunos concejales con sus compañeros de bancada en el debate previo.
Así, la frustrada sesión en la que se pretendió el tratamiento sobre tablas en el recinto hace dos semanas continuó con el intercambio que alcanzó un avance el martes en la Comisión de Interpretación y Asuntos Legales.
Ese escenario llevó a la inclusión del tema en el orden del día para dar discusión en el recinto y lograr así la aprobación de la herramienta que el Ejecutivo pretendía obtener con celeridad para iniciar la negociación.
Sin embargo, hasta el miércoles e incluso antes y durante el encuentro legislativo aún persistían las dudas entre un sector del oficialismo y de la oposición, que bregó por hacer imponer su postura frente a una decisión de coyuntura.
La sesión
La sesión comenzó pasadas las 10.30 con 16 concejales presentes dado que los ediles de Integrar, Gustavo Ballent, Nilda Fernández y Mauricio D’Alessandro demoraron su ingreso en función del posicionamiento que debían adoptar frente al tema de exMetán incluido en el orden del día.
En primer término se trató la licencia de la concejal del bloque UCR – Cambiemos, Marina Santos para que asuma su reemplazo Andrés Mestralet y de este modo el oficialismo evitaba perder un voto frente a la cerrada discusión que se avecinaba.
Luego continuó con reconocimientos a tres periodistas deportivos de la ciudad (Juan Cía, Juan Di Paola y Jorge “Cacho” Alí), que dieron paso a la exposición de Luciano Villalba a través de la Banca XXI.
El investigador e integrante de la Mesa Girsu presentó desde la banca ciudadana un proyecto de ordenanza que enfoca la atención sobre los grandes generadores de residuos sólidos urbanos, con miras a atender la situación de los desechos que se destinan al relleno sanitario.
En líneas generales, y respaldado por el marco legal vigente, propone que los grandes generadores de basura implementen un plan de gestión diferenciada de los residuos sólidos urbanos haciéndose cargo de la “separación en origen, transporte, tratamiento y/o disposición final de los mismos”.
Posteriormente los 20 concejales se enfocaron al tratamiento del orden del día, con la expectativa puesta en el asunto 290/2018 elevado por el Departamento Ejecutivo y que contempla la declaración de utilidad pública las dos manzanas de la fábrica Metán.
Entre los puntos abordados, salió por unanimidad la resolución respecto a la declaración del Concejo frente a la implementación de la Ley 15.008 que avanza sobre la caja jubilatoria de los trabajadores del Banco Provincia. El tema derivó en un debate político, que incluyó distintos posicionamientos y chicanas, pero que terminó con un acompañamiento por unanimidad.
Cuarto intermedio
y negociación
A las 11.20 el titular del Deliberativo, Juan Pablo Frolik solicitó un cuarto intermedio para retomar la negociación en un nuevo intento por sumar adhesiones a la iniciativa elevada por el Ejecutivo.
Los presidentes de los bloque se reunieron en presidencia para tratar de cerrar la redacción del articulado del proyecto de ordenanza que sería votado minutos después en el recinto dado que, hasta ese momento, mantenía cierta resistencia.
En medio de un encendido intercambio, los legisladores buscaron que sus miradas encontraran eco, no solo de la oposición sino también del oficialismo. Ya en la previa el concejal de la UCR – Cambiemos, Gabriel Bayerque, había mostrado sus objeciones y reclamado que se consideren algunos aspectos, en sintonía con sus compañeros de banca Marcos Nicolini y Nora Polich.
Nilda Fernández (Integrar) fue otra de las concejales que había puesto sus reparos y ayer volvió a solicitar, sin suerte, que el expediente volviera a comisión para continuar con su análisis, mientras que Rogelio Iparraguirre (Unidad Ciudadana) también hizo un pedido en este sentido, al que acompañó con un reclamo para sumar determinados requisitos.
Con un acuerdo de redacción final del proyecto, los concejales volvieron al recinto casi una hora después, a las 12.10, en medio de una suerte de disconformidad frente a los términos en los que se pretendía otorgar la declaración de utilidad pública al predio.
Cuestionamientos de
Unidad Ciudadana
El primero en pedir la palabra fue Iparraguirre, que solicitó el retiro del expediente del orden del día para que regrese a la Comisión de Interpretación y Asuntos Legales, moción que solo cosechó los votos de la bancada que preside, siendo insuficientes para imponerla.
Tras cerrar algunas cuestiones de forma, el concejal realizó un extenso y encendido discurso en el que mostró su postura frente al debate y renegó de la urgencia con la que el Gobierno pretende negociar la eventual compra de las tierras, a la vez que marcó algunas incongruencias que, desde su mirada, tiene la administración de Miguel Lunghi.
Molesto, Iparraguirre marcó la “distancia” que existe entre “lo que el intendente Lunghi pregona y lo que manda a hacer a sus concejales”, con una mirada crítica frente al discurso que brega por el diálogo y consenso.
“Hemos escuchado la palabra construcción de diálogo y consenso en función del tan mentado Acuerdo del Bicentenario, que hay que escuchar, ceder, pero no hay reflejo de lo que dice en lo que hace”, sentenció.
Aclaró que cualquier proyecto que piense en un Estado más cerca de los ciudadanos “va a contar con nuestro visto bueno”, más aún si se considera que en una de las dos manzanas de Metán estarán destinadas para la construcción de viviendas para los trabajadores metalúrgicos de la UOM.
Sin embargo, aludió a dos razones fundamentales que no fueron tenidas en cuenta y por las cuales el bloque no acompañó. “Pedimos tiempo para poder estudiar con más profundidad el tema, pero también tasaciones y el estudio de impacto ambiental” en el predio, resaltó.
Estos dos aspectos fueron incorporados a último momento al expediente a partir de una tasación informal que ubica el precio de las dos manzanas en una suma cercana a los 20 millones de pesos y a un relevamiento efectuado por el director de Medioambiente de la comuna.
Acusó al Ejecutivo de “poco serio” frente a la premura con que pretende declarar la utilidad pública cuando “ni siquiera incluyeron el traslado de la Municipalidad en el Acuerdo del Bicentenario”, y también marcó la falta de planificación cuando pretende construir un nuevo edificio, por ejemplo, para la Secretaría de Obras Públicas con un crédito del Banco Ciudad.
También sugirió otros espacios para implementar el proyecto de construcción del centro cívico que no requieren la compra ni el desprendimiento de ningún activo, “pero es ahí, Metán o nada”, disparó.
“Están tensionando a todos los bloques. Podríamos sacar esto en más tiempo pero no, capricho es un capricho”, enfatizó.
Luego, María Eugenia Poumé coincidió con el planteo de su compañero de banca y sumó como elemento de la discusión el negocio y posible destino que tendría el predio donde funciona el corralón municipal, en la avenida Santamarina 450. Para la concejal ese espacio “serviría no solo para pagar el valor de la compra de las dos manzanas de Metán sino también para financiar la construcción del centro cívico”.
“No perdamos
esta oportunidad”
El presidente del bloque oficialista, Mario Civalleri, fue el responsable de responder los postulados expuestos por la oposición y de defender la iniciativa que impulsa el Gobierno, pero también transmitió un mensaje para que se reconsidere la propuesta frente al valor estratégico que tienen esas manzanas que integran el patrimonio de Metalúrgica Tandil.
El exfuncionario objetó las alertas de la oposición y dijo que el Municipio no se embarcará en una “cruzada loca” para desprenderse de inmuebles que posee y reclamó que resulta necesario generar el instrumento que finalmente se votó para generar las “condiciones ventajosas” para la negociación.
“Se está dando un debate profundo sobre un tema que generó el visto bueno y que con el tiempo aparecen argumentaciones que buscan derribarlos”, achacó y reclamó que “no perdamos esta oportunidad”.
Por su parte, el concejal de Integrar Mauricio D’Alessandro realizó un repaso sobre las instancias por las que atravesó la propuesta del Ejecutivo y destacó que la nueva redacción del proyecto -que incorporó cambios hasta último momento- se cubrió el debate.
Voto diferenciado
Al pedir la palabra, a más de una hora de iniciada la discusión, Marcos Nicolini (UCR – Cambiemos) anticipó la disidencia en cuanto a algunos aspectos particulares pero no en relación a la propuesta en general ya que consideró viable trasladar la estructura municipal para liberar el histórico edificio, aunque pidió más tiempo y sugirió otros espacios.
En representación de sus compañeros Bayerque y Polich, puso reparos en cuanto al articulado y solicitó un tratamiento en general y en particular, dado que se pronunciaron en disconformidad con dos apartados del texto, cuestión que habría quedado salvada si se otorgaba más tiempo.
Compromiso
A su turno, el concejal del bloque Justicialista, Facundo Llano, le bajó el tenor al debate y acompañó la propuesta al lograr que sus planteos sean considerados. “No estamos haciendo actos jurídicos de relevancia aunque tengan su alcance”, expresó y agregó que la declaración de utilidad pública del macizo de tierra es el primero de los pasos “de tantos que se van a dar”.
“El Ejecutivo va a ir a negociar y después nos va a presentar una propuesta”, manifestó. No obstante, en una extensa participación, aprovechó para realizar algunos descargos y reclamar políticas al Ejecutivo y el compromiso para dar tratamiento a los 79 expedientes impulsados por la oposición cajoneados.
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