Desde la pandemia, la depresión en Argentina aumentó más significativamente que en otros países de la región

 “Una vez que el Covid pasa por uno deja resabios, hay que saber tener paciencia y el tiempo lo va a ir acomodando”, afirmó el médico psiquiatra Jorge Garaguso, quien además de estudiar sus efectos y consecuencias, recientemente padeció el virus.

En primer término, en la conversación que mantuvo con el programa de EcoTV “Tandil Despierta”, el especialista explicó que el coronavirus es una enfermedad inflamatoria, que también hace estragos en el área de la coagulación, entonces lleva su tiempo de recuperación. 

De hecho mencionó un estudio que se ha realizado en Inglaterra y Estados Unidos donde se develan al menos 50 efectos a largo plazo en quienes lo han padecido  y ocho de cada diez personas presentan síntomas en distintas áreas. 

En cuanto a lo neuropsiquiátrico, destacó que “lo que está estallando” y se ha transformado en una bomba son los trastornos de ansiedad, depresiones, estrés post traumático a largo plazo, dolores de cabeza, déficits de atención, caída del cabello. 

Cuando alertarse

En realidad, más que instalada la enfermedad, dijo que en principio hay que recordar que el sentirse abrumado, no poder cumplir con obligaciones, tener problemas para dormir, el volverse más irritable, así como los síntomas de soledad que han aumentado estrepitosamente, la violencia, y el cansancio en las mujeres jóvenes que tienen niños pequeños y les cambian las estrategias escolares todos los días, son una serie de síntomas a los que hay que estar atentos.

“Uno tiene que saber que todo esto podría ser normal como respuesta del cuerpo y el cerebro para adaptarse a una nueva realidad”, apuntó, advirtiendo que es necesario reconocer que se convierte en un alerta cuando no se puede funcionar normalmente en las rutinas diarias, que es cuando se torna necesario salir y buscar ayuda. 

En este sentido, recordó una conversación que también mantuvo con El Eco Multimedios el año pasado con la pandemia todavía muy incipiente en el país, donde invitó a prestar atención a lo que pudiera suceder con la salud mental, advirtiendo que podría generar estragos sin posibilidad de resiliencia en caso de no ocuparse de eso. 

“Estamos frente a una bomba de tiempo, porque se están viniendo todas las consecuencias”, aseveró.