El artista Pablo Orcajo pinta 10 murales en Gardey, un proyecto que entrelaza Turismo y Medioambiente

La entrada a Gardey cuenta ya con un nuevo atractivo. En una de las históricas casas que se ubican pasando la arcada que da la bienvenida a la localidad, los locales y visitantes pueden disfrutar de la imagen de un grupo de ñandús en el campo, enmarcados por un conjunto de diamantes. Se trata del primero de los 10 murales que el artista Pablo Mariano Orcajo Volzone realizó como parte de su proyecto Paseo Artístico Visual.

Oriundo de Rauch, Orcajo llegó hace 12 años a Gardey. Instalado junto a su familia, tuvo una activa participación comunitaria en relación a la protección del medioambiente. Sin embargo, hace un tiempo atrás surgió en él la idea y el deseo de intervenir y movilizar desde su propio oficio, el arte.

Así, dejó por un momento de lado a la pintura “de caballete” y se propuso, como relató en su propio taller a El Eco de Tandil, “volver a salir”. Ese deseo motivó el Paseo Turístico Visual, del que ya culminó un mural, tiene casi terminado otro y uno más ya iniciado.