El primer Consorcio de Exportación de empresas de la Cepit cierra un año exitoso y con el 2020 en la mira
Con misiones concretadas en tres países, las siete empresas del consorcio exportador QuickStone concluyó una etapa con balance muy positivo. Estados Unidos, México, Uruguay y España fueron los destinos seleccionados, donde ya quedaron las puertas comerciales abiertas. Los desafíos para el próximo año serán establecidos con una “vara más alta”.
El año pasado la Cámara de Empresas del Polo Informático de Tandil (Cepit) logró poner en marcha un Consorcio de Exportación que llamaron QuickStone, conformado por siete empresas locales.
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Las expectativas fueron cubiertas en este primer año de experiencia, con misiones comerciales a México, España y Uruguay, logrando en cada destino presentar los servicios y productos locales, dejando las puertas abiertas para poder concretar intercambios futuros.
De aquí en adelante, ya trabajan en nuevas metas para el año que se acerca y con la vara más alta. “Fue un primer año de mucho aprendizaje, de mucha preparación, en el que pusimos ‘on’ y eso era lo importante. Ahora tenemos que planificar el 2020 con otros objetivos y a otro nivel”, sostuvo Cintia Scoles, parte del grupo coordinador y gerente de Cepit.
Este consorcio surgió el año pasado en el marco del plan estratégico de software y servicios informáticos, Pesit, que ya viene ejecutando hace varios años. Se trata de un proyecto en el que participan el municipio de Tandil con la Secretaría de Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales, la Secretaría de Innovación y Tecnología, la Unicen con la Facultad de Ciencias Exactas y la Cámara de Empresas del Polo Informático de Tandil (Cepit).
Los pasos escalados
En 2018 seleccionaron a siete startapps asociadas a Cepit y presentaron el proyecto a la Agencia Argentina de Inversión (AAI) y Comercio Iternacional, que junto con la fundación del ICBC tienen un programa llamado Gerenciamiento Asociativo. Allí quickstone quedó seleccionado entre los 23 elegidos, de cien grupos de todo el país, siendo uno de los cuatro asociados al rubro tecnológico.
A partir de ahí comenzaron a trabajar en lo que fue el primer consorcio de exportación junto a las empresas IT Colemena, Creadores de Sitio, EmpresAR, Intermedia, Región Global, GetUp y MoleMedia.
Cintia Scoles, recordó que uno de los primeros pasos fue realizar un diagnóstico de cada una de las firmas para poder, a partir de ahí, planificar una oferta exportable de cara a este año que está finalizando. “Hicimos una investigación de mercado con datos micro y macro exclusivos de nuestro sector, lo que nos permitió seleccionar los mercados que fueron rankeados y priorizados”, detalló. Ese criterio de selección los llevó a Estados Unidos, México, España y Uruguay.
Durante el primer semestre se dedicaron a prepararse tanto en concepto de grupo como de manera individual, ya que es un consorcio de asociatividad pero en el que ninguno pierde su individualidad de sus negocios. El trabajo de grupo los llevó a la definición del nombre, eligiendo QuickStone (piedra movediza), relacionándolos con la ciudad en inglés que es el idioma tecnológico. “También nos identifica como grupo, porque queremos ser un concepto solvente y tener la dinámica de estar siempre en movimiento”, explicó.
Ya en la segunda mitad del año se abocaron a planificar las misiones comerciales, donde la primera fue a México y se concretó en octubre. Según detalló, lo que hicieron a modo general fue armar una especie de ciclo, contactándose tanto con empresas directas como con grupos empresariales, cámaras, asociaciones y clústers, entre otros, de todos los sectores. Una vez que el intercambio llevaba al interés de ambas partes, coordinaban una reunión en las que “ponían todo sobre la mesa” para dar luego paso a actividades concretas.
En noviembre, asistieron a la Feria Internacional de Tecnología en Barcelona que resultó muy enriquecedora y fructífera para ubicar los productos y servicios ofrecidos allá. Ya a principios de diciembre fueron a Montevideo, donde los recibió el secretario de Ciencia y Tecnología de la intendencia, Juan José Prada, y concretaron encuentros con el programa Uruguay XXI, la Cámara Industrial y la Cámara Tecnológica. “Las puertas quedaron súper abiertas, nos están esperando no solamente para que nuestras empresas exporten sino que vayan y se radiquen en Uruguay.
Balance positivo y nuevas metas
“Fue un año súper positivo, pero tenemos nuevos desafíos para el 2020”, celebró. La intención ahora es seguir trabajando hacia adelante, con otros propósitos y metas más altas. En este sentido, Scoles aclaró que los resultados no se ven en el corto plazo, ya que se trata de “un trabajo de hormiga”, pero con la idea de empezar a concretar exportaciones y poder llevar esos productos/servicios intangibles al mundo.
Por otro lado, aclaró que continúan en articulación con el Municipio, destacando que la conformación de la nueva Secretaría de Desarrollo Productivo y Relaciones Interacionales va a dar un empujón muy bueno. Asimismo, mantuvieron la reunión anual con la AAI y la fundación del ICBC donde cada integrante del grupo de Gerenciamiento Asociativo contó su experiencia y resultó muy interesante el intercambio.
Cabe destacar que, además de la comercialización y oportunidad de negocio logrado mediante el Consorcio de Exportación, Cepit tiene otros cuatro pilares que son la formación de talentos, la especialización de ese talento, el emprendedorismo y la modernización del estado.