Padres de niños que concurren a escuelas rurales se reunieron ayer por la mañana con consejeros escolares para plantear la preocupación que atraviesan a raíz de que sus hijos no pueden concurrir a los establecimientos educativos por el conflicto con el transporte rural y exigieron respuestas. 

Cabe señalar que concurrieron pocos padres en representación de todas las comunidades de escuelas rurales, a pedido de las autoridades del Consejo Escolar por la pandemia.

El encuentro se dividió en dos partes. A las 9.30 permitieron el ingreso de cinco padres de alumnos de la Escuela 6 de San Antonio y más tarde se unió a la reunión la directora de la Escuela Secundaria de San Antonio Verónica D´ Andrea quienes fueron recibidos por el presidente del Consejo Escolar Fabián Riva y los consejeros Enrique Ciavarella y Juan Ignacio Roche. 

Luego, alrededor de las 11, recibieron a una madre de niños que concurren a la Escuela 60 del paraje Santa Ana. 

Durante ambas reuniones les informaron a los padres lo sucedido con las últimas licitaciones y les comunicaron que ya enviaron todos los papeles a Provincia que prepararon los transportistas para justificar por qué pasaron un precio mayor al ofrecido. Ahora es el Gobierno provincial el que tiene que tomar la determinación de si acepta o no que los transportistas tomen los recorridos con los valores solicitados. Para ello, tienen plazo hasta el miércoles de la semana próxima. 

Griselda Acosta, mamá de una nena que concurre a la escuela de San Antonio, explicó que “nos dijeron que tenemos que esperar hasta el miércoles o jueves porque ellos mandaron todo y hay que ver qué responde Provincia”.

Contó que en el caso de su hija, cuando puede se acerca a la escuela a buscar las tareas y ella le ayuda a realizarlas porque le resulta “imposible” llevarla ya que su casa está ubicada a aproximadamente 60 kilómetros del establecimiento educativo. 

Por su lado, Daiana Acosta explicó que “yo tengo dos nenes, mi nena va a tercero de primaria, mi nene a jardín a salita de 4. A mi nena le cuesta muchísimo hacer las cosas sin ir a la escuela, sobre todo con todo lo de la pandemia, porque no es lo mismo estudiar en la escuela que en casa”.

Además, explicó que “a mi nena le cuesta muchísimo adaptarse porque es muy tímida, le cuesta mucho adaptarse a todo, tiene 8 años y sobre todo mi nene, extrañan mucho la escuela”.

“Yo trabajo y estudio para terminar mi secundario y además tengo que sentar a ayudar con las tareas a mis nenes, así que se complica muchísimo”, afirmó y contó que tiene que hacer 20 kilómetros todos los días para llevarlos de su casa hasta la calle que pasa el colectivo, porque no entra hasta la tranquera, y tiene otros 20 kilómetros a la escuela.

Asimismo, contó que “son muy poquitos papás los que pueden llevar a los chicos a la escuela”.

Respecto a la reunión en sí, consideró que “veo que desde Consejo se preocupan como nosotros pero nosotros los estamos esperando a ellos y ellos están esperando a los de Provincia. Entiendo que no es fácil pero en el medio quedamos nosotros, los chicos y los papás”.

“Lo que más me molesta es que en Tandil por ahí cierran cursos porque un chico tuvo Covid y allá nunca hubo contagios, están todos los profesores pero no están los chicos”, lamentó. 

“Nos vamos sin una solución”

Por su parte, Guillermo Slamon, padre de dos niñas que concurren a la Escuela Primaria 6 de San Antonio explicó que “igualmente la respuesta que tengamos el miércoles no es nada seguro que vuelven los micros, tienen que evaluar los presupuestos, y ver si lo aprueban pero por el momento seguimos sin escuela, es muy complicado y ya van varios días”.  

“Nos aclararon qué están haciendo pero nos vamos sin una solución que es lo que veníamos a buscar, esperábamos algo más concreto pero es lo que hay”, lamentó.

Y contó que “yo planteé cómo podemos ayudar, si podemos hablar con alguien de Provincia y me pidieron que espere hasta el miércoles, que por el momento ellos se van a encargar, pero si para el miércoles no hay respuestas concretas vamos a tocar más arriba porque queremos que nuestros hijos vayan al colegio”. 

“Desde Consejo Escolar muestran buena predisposición pero queremos hechos. Entusiasmo hay, nos mostraron notas que han enviado, noté que se están preocupando, por ese lado no me voy disconforme”, afirmó. 

Y contó que “algunos padres los podemos llevar pero no todos los días por el gasto económico, algunos problemas de movilidad. En mi caso estoy a 12 kilómetros pero otros están mucho más lejos”. 

Mirta Díaz, mamá de alumnos de la Escuela 60, explicó que de 22 alumnos que van a la institución están yendo alrededor de 4 por día. “Venimos a reiterar el derecho de los niños de ir a la escuela”, recalcó. 

Por su lado, Víctor Ortiz, papá de un nene que concurre a la escuela de San Antonio, explicó que “en mi caso que estoy más cerca con algún vecino nos turnamos para llevarlos pero no es el caso de la mayoría. Tenemos que apoyar a todos, da mucha lástima que los chicos no puedan ir a la escuela”. 

Transportistas rurales desmintieron los 

dichos de los consejeros del Frente de Todos

Por otro lado, los transportistas rurales de la ciudad enviaron una misiva a El Eco de Tandil desmintiendo los dichos de los consejeros escolares del Frente de Todos.

En la misma, expusieron que “en nuestro rol de transportistas, nos es imperativo aclarar y desmentir los dichos del bloque de consejeros escolares del Frente de Todos, quienes expresaron que los aumentos otorgados desde la Provincia al sector en el 2021 fueron del 60 por ciento”.

“En rigor de verdad, los valores de aumento correspondientes al año 2021 son de un 11,7 por ciento en el mes mayo y un 16 por ciento para esta licitación (agosto). Por lo tanto pedimos que a la brevedad, el presidente del Consejo Escolar Tandil rectifique lo dicho porque no representa verazmente la realidad”, manifestaron.

Y agregaron que “el aumento que solicitamos está directamente relacionado con el aumento en los costos que implica la realización del servicio. Por ello cumplimos con la solicitud por parte de la Provincia en reunir un análisis de costos que evidenció de manera tajante que el justiprecio no es suficiente”. También aclararon que “la licitación que se firmaría congela el justiprecio hasta febrero de 2022, sin contemplar futuros aumentos inflacionarios”.

“Queremos recordar que somos un sector más de la sociedad que se vio afectado por la pandemia, y no podemos permitir ser injuriados ante la comunidad educativa”, concluyeron.