HOY, SÁBADO
Un caso típico

El 8 de julio de 1942 el gobernador bonaerense Rodolfo Moreno firmaba el decreto de conmutación de penas de los anarquistas Pascual Vuotto, Reclús de Diago y Santiago Mainini, quienes habían sido condenados a cadena perpetua por un acto terrorista cometido once años atrás. Los tres eran militantes anarquistas. Los tres eran inocentes.
Recibí las noticias en tu email
Accedé a las últimas noticias desde tu emailLa idea de conmutarles las penas se le ocurrió al ministro de Gobierno de Moreno, un conservador llamado Vicente Solano Lima, quien años más tarde iba a ser electo vicepresidente de la Nación, en fórmula con Héctor José Cámpora.
Sacar a esos tres hombres de la cárcel donde habían sido enviados injustamente era un acto de humanidad. Pero no de justicia. Eso habría de llegar medio siglo después.